Jueves, 23 Noviembre 2017 14:09

Amma ha sido portadora de una antorcha de espiritualidad y de cultura india

20 – 21 Noviembre, Munich, Alemania – Europa Yatra 2017

Los programas de Amma en Munich están siempre marcados por la música clásica. Algunos de los músicos vienen de la Orquesta Filarmónica de Munich. Los músicos siempre encuentran un momento para prestar su tiempo y su talento al programa de Amma, para delicia de todos los que asisten al programa. Cuando Amma llega al estrado es recibida por estos músicos vestidos con sus trajes bávaros tradicionales.

La Sala Zenith donde tiene lugar el programa de Amma fue una fábrica convertida en espacio para eventos y el camino de Amma hacia su cuarto pasa por un pasillo elevado en la sala principal del programa. Así los devotos reciben el regalo de la vista de Amma caminando sola y libre de multitudes. Amma se toma su tiempo, mira hacia atrás y hacia abajo a todos los devotos desde el camino a su cuarto. Al final de su paso, aplausos y gritos de ¡Mata Rani Ki Jay! marcan el cierre del programa. Este año la pasarela estaba adornada con corazones de chocolate con un ‘gracias! inscrito en honor del 30 aniversario de las visitas de Amma.

Otro hito del programa fue la danza tradicional bávara de las varas (Maypole) para la que los devotos crearon hermosos diseños con cintas extendidas por las varas.

Los invitados especiales al programa de Amma fueron el Sr.Sugandh Rajaram, Cónsul General de India en Munich y el famoso actor de cine, teatro y doblaje Rufus Beck. María Kriester que conoció a Amma en 1987 en Austria, durante su primera gira mundial e invitó a Amma a visitar Munich, pronunció unas palabras. Ella ha sido una de las organizadoras principales de los programas de Amma en Munich durante más de dos décadas. Dijo la Sra. Kriester: “¿Cómo podemos dar las gracias a Amma por este maravilloso regalo de su amor? No hay palabras para expresar nuestra gratitud. Tan solo podemos darle las gracias integrando todos los valores espirituales de los que ella habla y vive, en nuestras propias vidas. Cuando nuestro pensamiento se torne más altruista, cuando nuestras palabras sean amistosas y empáticas, cuando seamos más compasivos y humildes en nuestras acciones, entonces Amma estará contenta porque habremos aprovechado su presencia del mejor modo. En nombre de todos los devotos de Alemania, querida Amma, quiero expresar nuestra más alta reverencia y gratitud por mantenernos en tu abrazo eterno. Gracias, Amma.  

Dijo el Sr. Rajaram: “Me gustaría, desde el corazón lleno de alegría, dar la bienvenida a Amma a Munich y expresarla mi más profundos respetos. Durante muchos años, Amma ha sido la portadora de una antorcha de espiritualidad y cultura india  en todo el mundo. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para dar las gracias a Amma desde el fondo de mi corazón por venir a Munich y bendecirnos.”

Rufus Beck dijo: “He tenido la oportunidad de pasar un tiempo con Amma. Reímos juntos un montón y ella fue como una Madre para mí. Me sentí muy, muy bien. Amma está en una misión para tocar e inspirar a la gente a dar el primer paso para cambiar  a mejor este mundo con amor… Quiero saludar a Amma con una cita de Neil Armstrong, el primer hombre en la luna. Él dijo: ‘Este es un pequeño paso para el hombre, pero un salto gigantesco para la especie humana.’”

En sus propias declaraciones a los presentes, Amma acentuó la impoortancia de ser conscientes en nuestras interacciones con otros: “Cada persona individual lleva escondido un trauma y tristeza del pasado. Seamos cuidadosos cuando juzguemos al prójimo. La paciencia es el poder más grande. Ella despierta la bondad en nosotros así como en todos los otros.”

Al cierre de la celebración de la trigésima visita de Amma a Munich,  los músicos clásicos llevaron a toda la audiencia a a una hermosa interpretación de Alegría para el Mundo. Cuando los presentes entonaron  “Alegría para el Mundo, Amma ha venido” como una sorpresa especial, globos multicolores en forma de corazón comenzaron a descender del techo, primero cinco, luego diez, luego docenas y muchos más. Cuando los globos llegaron abajo, hasta los asistentes, éstos empezaron a lanzarlos de nuevo hacia el aire, reacios de dejarlos caer al suelo. El resultado fue que aunque los globos continuaban descendiendo, según caían eran empujados de nuevo a lo alto, formando una hermosa danza de corazones, flotando gracias a la atención y cariño de  los devotos. Fue una exhibición fascinante, aún más conmovedora por la canción que reverberaba por toda la sala. Y aunque solo duró unos minutos, el tiempo pareció ensancharse en una escena  y momento que no será olvidada fácilmente. Una perla de amor y celebración de compasión que permanecerá impresa en los corazones de todos los que estaban allí.  

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