*Después de un pequeño preámbulo en el que Amma se refiere al gran obstáculo que supone el ego, contándonos una historia, compartiremos hoy una larga entrevista que le hacen a Amma sobre el ego.

*Amma dice que el ego es el mayor obstáculo para recibir la Gracia divina. Si el ego es poderoso, no podemos dar amor ni recibirlo. A veces el ego nos obliga a comportarnos tontamente para conseguir  la atención o el respeto de los demás. Amma cuenta una historia para mostrarnos esta tendencia del ego.

-En cierta ocasión un oficial del ejército americano ascendió a la categoría de coronel. Nada más ocupar su nuevo cargo se sentó orgullosamente en su despacho y esperó a que alguien se presentara. Cuando la primera visita llamó a la puerta, le dijo: adelante, ya puede pasar. A continuación descolgó el teléfono y marcó un número. Después de una breve pausa se puso a hablar. Estaba hablando con Bill Clinton el presidente de los Estados Unidos.

-Le dijo: Oye Bill, ¿cómo va todo por la Casa Blanca? Espero que hayas disfrutado de tu viaje por la India. Le deseo lo mejor a Hillary en las próximas elecciones para el Senado. Tened cuidado. Si, tú también. De acuerdo, adiós...

-A continuación colgó el teléfono. Después se dirigió a la persona que acababa de entrar en la oficina y le dijo: Sí, ¿qué es lo que desea? El hombre respondió: Discúlpeme señor, soy el empleado del departamento de telecomunicaciones. Venía a conectar su teléfono, pues aún no hemos hecho la conexión.

*Podemos imaginar lo absurdo de la situación y como se sintió el coronel.

*Cuando queremos hacer valer nuestro ego, hacemos a menudo cosas bien ridículas ante los demás.

Vamos a pasar a la entrevista:

*¿Qué es el ego?

*De hecho estás preguntando: ¿qué es lo irreal?, pero ¿cómo describir lo que es irreal? ¿cómo hablar de algo que está desprovisto de realidad, que no existe?, y …, ¿cómo hablar de lo real? Amma no puede daros más que unas indicaciones. La mente es el ego. Pero el ego es una gran falsedad, el ego es una mentira, el ego es irreal.

-Había una vez un pequeño pastor que sacaba las vacas a primera hora de la mañana, y las recogía para ponerlas en el establo por la tarde. Un día cuando estaba atando a las vacas se dio cuenta de que le faltaba una cuerda. Tenía miedo de que la vaca se escapase y era demasiado tarde para ir a comprar otra cuerda. El muchacho no sabía que hacer y fue a consultar a un sabio que vivía no lejos de allí. Este le aconsejó que simulara que sujetaba a la vaca asegurándose de que la vaca lo viera. El muchacho siguió sus instrucciones e hizo como que sujetaba a la vaca. A la mañana siguiente comprobó que la vaca no se había escapado durante la noche. Soltó a todas las otras vacas como siempre, y el rebaño salió a pastar. Cuando también él se disponía a salir, se dio cuenta de que la vaca sin cuerda seguía en el establo, en el mismo lugar. Intentó persuadirla para que se uniera al rebaño, pero no se movía. Perplejo, el muchacho volvió a visitar al sabio y éste le dijo: la vaca cree que está atada, vuelve al establo y simula que la desatas. Esto hizo que la vaca toda contenta también saliera del establo.

-Esto es lo que hace el Guru con el ego del discípulo. Le ayuda a deshacerse de lo que nunca ha existido. Como la vaca creemos que estamos sujetos por el ego, cuando en realidad somos totalmente libres. Esto se debe a la ignorancia. Pero es necesario que estemos convencidos. El ego es una ilusión que no tiene existencia propia. Si nos parece real es gracias al poder que toma del Atman (el Ser). Está animado por el Atman. El ego, en sí mismo, se parece a la materia muerta, pues sin el Atman no tendría vida alguna. Dejad de sostener el ego, y acabará desapareciendo. Somos nosotros mismos los que le otorgamos realidad, cuando es irreal. Descubrid lo que es, o mejor, lo que no es, y eso hará que desaparezca.

-Un perro agita la cola, no es la cola la que agita al perro. ¡Menudo desastre si la cola agitara al perro! Esto mismo sirve para la mente. La mente, el ego, debería convertirse en un instrumento útil. Un buscador espiritual no tendría que  dejarse gobernar por los caprichos y las fantasías de la mente.

-El ego está formado por nuestros pensamientos y nuestra mente. Los pensamientos los creamos nosotros mismos. Hacemos que sean reales por nuestra voluntad. Si les retiramos nuestro apoyo, se disuelven. Basta con observar nuestros pensamientos. Las nubes en el cielo adoptan formas variadas y no cesan de cambiar. Podéis ver como pasan imágenes con distintas formas que evocan el rostro de una divinidad, un animal, un barco de vela. Un niño creerá, tal vez, que todas estas formas son reales, pero sabemos que son una ilusión. De igual manera nuestros pensamientos atraviesan a la mentes, que es el ego. Ellos adoptan diferentes formas, pero no son más reales que una nube en el cielo. Si observamos nuestros pensamientos, actuando como testigos mientras atraviesan la mente no nos causarán ningún efecto, no tendrán influencia sobre nosotros.

-Un león de madera de sándalo le parece real a un niño, pero un adulto sólo ve un trozo de madera de sándalo. La madera queda oculta a los ojos del niño quien sólo ve un león. Un adulto aprecia la forma de león, pero sabe que no actúa como un verdadero león. A sus ojos, la madera es real, no el león. De igual forma, a los ojos de un ser realizado, el universo entero no es más que la esencia, la madera que lo engloba todo, Brahman o la Conciencia Absoluta.

¿Cómo puede el Guru ayudar al discípulo a aniquilar el ego?

*Un Maestro auténtico crea situaciones que le permitan al buscador salir de su sueño. El discípulo desea seguir durmiendo, pero el Maestro desea que se despierte. Todo el esfuerzo del Maestro consiste en conducir al discípulo de una manera u otra hacia la realidad de su auténtica existencia.

Se dice que el ego procura mantener su influencia sobre el individuo sin importar el medio empleado, incluso adoptando la máscara de nuestra aspiración espiritual. ¿Qué cualidades son esenciales para triunfar en la lucha contra las artimañas infinitas del ego?

*Se trata de cumplir con nuestro Dharma (rectitud) con la mayor shraddha posible. Shraddha es una cualidad muy importante al inicio del camino espiritual. Es absolutamente esencial.

Para enfrentarse a las tentaciones del ego ¿cuál es la mejor manera de cultivar el discernimiento?

*Al igual que un niño abandona a medida que crece, sus juegos y su dependencia con los mayores, un buscador auténtico a medida que progresa y desarrolla su comprensión, adquiere la capacidad de discernir entre lo que es eterno y lo que no lo es. Esta facultad de discernimiento se despierta en nosotros cuando desarrollamos madurez y una justa comprensión. Cuando aprendemos a evaluar las experiencias de la vida en su justo valor, automáticamente empezamos a hacer uso de nuestro espíritu de discernimiento. Se trata de un florecimiento interior, similar al que se produce en el capullo de una flor. Forma parte de un proceso lento, pero constante. Toda experiencia que la vida nos aporta, ya sea buena o mala, contiene un mensaje divino. Id más allá de la superficie y recibiréis el mensaje. Nada viene del exterior, todo está en vosotros. El universo está contenido en vosotros. Encontraréis el camino a pesar de las tentaciones y de los desafíos. Sólo una persona experimentada os puede ayudar. El camino que conduce a Moksha (liberación) es muy sutil y a su vez para un aspirante espiritual es fácil sucumbir a la ilusión.

Cuando se trata de trascender el ego, se dice que es muy importante para el discípulo someterse a un Guru ¿porqué?

*El ego se asienta sobre la mente. Cualquier obstáculo puede sujetarse a través de la mente, pero no el ego, pues es más sutil que la mente. Sólo mediante la obediencia a aquel que está establecido en la experiencia suprema es posible vencer al ego.

¿La obediencia perfecta al Guru es en definitiva lo mismo que la muerte del ego?

*Sí, por eso el Satguru (el Maestro espiritual realizado) está descrito en la Katha Upanisad  bajo los rasgos de Yama, el Dios de la muerte. La muerte del ego del discípulo sólo se puede conseguir mediante la ayuda de un Satguru.

-La obediencia no se le puede imponer a un discípulo. El Maestro es para él una formidable fuente de inspiración, el Maestro es la encarnación de la humildad. La obediencia y la humildad emergen espontáneamente cuando se está en la órbita del Maestro.

Afrontar la muerte del ego exige un gran valor

*Sí, son muy pocos los capaces. Si tenéis el coraje y la determinación necesarios para llamar a la puerta de la muerte, veréis que no hay muerte. Pues la misma muerte, o la muerte del ego es una ilusión.

-Pero cuidado, hasta el instante que precede a la realización, nadie está a salvo de tentaciones y deseos.

-Un ego sutil es más peligroso que un ego inflado. Ni el mismo individuo comprenderá que es el ego sutil el que lo guía, el que le motiva, y ese ego sutil se convierte en parte integral de su naturaleza. Estos seres estarán dispuestos a todo con tal de obtener gloria y honores.

-Amma también considera que esta clase de orgullo les hace perder la facultad de escuchar. Y en el camino espiritual es muy importante saber escuchar. Una persona que no escucha no puede ser humilde. Sólo cuando somos realmente humildes puede florecer la pura Conciencia que ya existe en nosotros. Sólo aquel que es más humilde que el más humilde puede ser considerado el más grande entre los grandes.

-Naturalmente todos tienen un ego, desde la persona más rica hasta la más pobre. Puesto que es muy difícil trascender el ego deberíamos al menos intentarlo, intentar deshacernos de él.

-Amma cuenta una historia para mostrarnos como incluso la gente más instruida puede tener una actitud egoísta: Un día un erudito estaba dando una charla, quien además de ser una persona culta era muy egoísta y orgullosa de su conocimiento. Aquel día explicaba el episodio bíblico en el que Jesús alimentó a 5.000 personas con 5 panes, pero como había olvidado sus gafas intentó narrar de memoria el episodio, y cuando llegó al punto culminante del relato, el erudito proclamó triunfalmente: y entonces, nuestro Señor Jesús alimentó a 5 personas, con tan sólo 5.000 panes. -Y alguien exclamó: ¿qué ha dicho? ¿qué tiene eso de grande? Hasta yo mismo podría alimentar a 5 personas, con 5.000 panes.

-El erudito se dio cuenta de su error, pero era demasiado orgulloso para admitirlo, y en su lugar se limitó a contestarle bruscamente: eh! Sabiondo, siéntese y escuche, no quiero oír otro comentario.

-A la semana siguiente el erudito se aseguró de llevar sus gafas y contó la historia sin equivocarse: Y entonces nuestro Señor Jesús alimentó a 5.000 personas con tan sólo 5 panes, ¿quién sino podría hacer un milagro parecido? Pero de nuevo el mismo hombre se levantó y gritó: ¿y qué hay de grande en esto? Hasta yo mismo podría hacerlo. El erudito le preguntó asombrado: ¿qué quiere usted decir? ¿cómo iba a alimentar a 5.000 personas con tan sólo cinco panes? -A lo que el hombre replicó: los alimentaría con los restos de la semana pasada.

-Amma no desea mofarse de nadie, sólo quiere mostrar como el ego engaña hasta a las personas más

instruidas y educadas. Todos cometemos fallos, todos nos equivocamos, pero nuestro auténtico progreso empieza con la voluntad y el coraje de admitir nuestros errores. Desgraciadamente nuestro ego raramente nos permite reconocerlos.

Muchas personas aprecian en usted la encarnación del amor incondicional y es cierto que acogéis en vuestros brazos a todos los que os vienen a ver. Pero he oído decir que podéis ser muy dura con vuestros discípulos. ¿Cómo se pueden compaginar dos métodos de enseñanza diferentes?

*Para Amma no son dos métodos diferentes. Amma sólo tiene un método, que es el amor. Ese amor se expresa bajo la forma de paciencia y compasión. Pero si un ciervo se come las flores tiernas de vuestro jardín, no bastará con decirle gentilmente: Por favor ciervo no te comas las flores. Habrá que gritarle y mostrarle un palo. A veces es necesario mostrarse así para corregir al discípulo. Kali es el aspecto que adopta la Madre llena de compasión cuando trata de castigar, pero mirad sus ojos,... no hay cólera en ellos.

-Amma sólo corrige a aquellos que han elegido permanecer junto a ella, y sólo lo hace cuando están preparados. Un discípulo es aquel que acepta libremente la disciplina. Al principio el Guru une al discípulo a Èl, gracias a su amor infinito e incondicional. Así, cuando llega el momento de la disciplina, el discípulo ya tiene conciencia de la presencia de ese amor en todas las situaciones.

-Amma ayuda a Sus hijos a permanecer siempre conscientes y vigilantes. El amor tiene numerosos aspectos. Cuando Amma impone una disciplina a Sus hijos, lo hace con la única finalidad de guiarlos por el camino que los conducirá al pleno florecimiento de sus seres. Este florecimiento sólo puede producirse en una atmósfera favorable. No puede ser forzada. Un Maestro auténtico no fuerza jamás a Sus discípulos, pues la Pura Conciencia no se impone nunca. El Maestro es como el espacio, es como el cielo sin límites, y el espacio no puede haceros mal. Sólo el ego desea forzar y puede herir. Amma continuará siempre con paciencia y creará las situaciones favorables para que ese florecimiento interior se produzca en Sus hijos.

-La relación Guru- discípulo es la relación suprema. El lazo de amor entre el Guru y el shisshya (discípulo) es tan poderoso que a veces se tiene el sentimiento de que no existe ni Guru, ni discípulo, desaparece el sentimiento de separación.

¿Qué hacéis cuando el ego se apodera de uno de vuestros discípulos?

*Afectuosamente Amma ayuda a Sus hijos a tomar conciencia del daño que puede causar el dominio del ego y les muestra como liberarse.

-Algunos psicoterapeutas y determinadas enseñanzas occidentales creen que antes de intentar trascender el ego, es necesario desarrollarlo y hacerlo fuerte. Afirman que la mayoría de nosotros tenemos un ego débil o herido, por la serie de traumatismos emocionales y psicológicos sufridos a lo largo de nuestra vida y proponen diferentes formas de terapia para ayudarnos a construir nuestro carácter, nuestro ego y nuestra individualidad.

-La mayoría de la gente ha sido profundamente herida, de una manera u otra en el pasado. Habitualmente estas heridas no cicatrizan. Estas heridas no proceden sólo de nuestra vida actual, sino incluso de vidas anteriores, y ningún médico o psicólogo las puede curar.  Un médico o psicólogo podrá en cierta medida ayudar a la gente a vivir con sus heridas, pero no podrá curarlas.  No ha penetrado lo suficiente en su propio espíritu para curar sus propias heridas, y todavía menos en el espíritu del paciente. Sólo un Maestro auténtico que está perfectamente libre de toda limitación, que ha trascendido la mente, es capaz de penetrar en el espíritu de una persona y tratar estas heridas abiertas con su energía infinita. La vía espiritual, sobre todo bajo la dirección de un Satguru no debilita lo psíquico, sino que lo refuerza.

-La causa última de todas nuestras heridas emocionales es nuestra separación del Atman, que es nuestra verdadera naturaleza. Quien quiera consultar un psicólogo, puede hacerlo, no hay nada malo en ello. Pero abandonar la espiritualidad para tratar de reforzar el ego no hará nada más que perpetuar este sentimiento de separación y conducirnos a mayores sufrimientos. ¿Acaso hay alguien que diga? iré a consultar al médico cuando me encuentre mejor.

-Esperar a que se den las circunstancias favorables interiores o exteriores para iniciar el viaje espiritual, es como si esperáramos en la playa a que no haya ninguna ola para empezar a bañarnos. Ese momento no llegará nunca. Cada minuto de nuestra vida es tan precioso y una oportunidad tan única que no debemos desperdiciarlo.

-El principal obstáculo en nuestro camino hacia Dios es el egoísmo. El egoísmo desaparece automáticamente cuando sentimos compasión hacia los demás.

-Hasta que no seas consciente de que estás indefenso, de que tu ego no puede salvarte, de que todo lo que has adquirido no es nada, Dios y el Guru seguirán creando las circunstancias necesarias para hacerte comprender esta Verdad.

*Sólo existe la alegría para quien está libre del egoísmo.

RESUMEN

Que podemos decir después de escuchar a Amma en esta larga entrevista en la que no se deja ningún detalle para hablar del ego, de lo que supone la dependencia del ego, y que papel juega Ella con todos nosotros.

Amma nos habla de una manera muy precisa en cuanto a que es el ego, el daño que nos hace el ego, y que hace Ella para mitigar el dolor, el sufrimiento que tiene su origen en el ego.

Todo el sufrimiento que hay en nuestras vidas procede del ego, absolutamente todo, y para esto y únicamente para esto Dios ha tomado el cuerpo de Amma, para mostrarnos de que manera podemos evitar este sufrimiento procedente del ego.

Lo que Amma hace es darnos un librito con las instrucciones necesarias, para que nos sirvan como la guía  que debemos utilizar para vivir las circunstancias que Ella nos crea, y que nos las crea para que nos vayamos liberando del ego, poco a poco, pero firmemente. Deberíamos tener presente un par de remedios para ir aliviando la enfermedad del ego: el dharma (actuar correctamente) y reconocer errores (humildad)

Recordemos el reciente mensaje de Amma:

“En el quirófano de la vida, todas las operaciones quirúrgicas son realizadas por Dios”.

Quiere decir que puede haber sufrimiento a consecuencia del ego, esto es así, pero en determinadas circunstancias que Amma nos invita a vivir debemos recordar que estamos en el quirófano y Dios con el bisturí, está extrayendo aquello que nos hará más daño si no se extirpa, aquello que al pasar el bisturí duele, pero que después cuando la herida cicatrice nos sentiremos más livianos, lo que quiere decir más comprensivos, y con más disposición a afrontar determinadas circunstancias con más paciencia y ecuanimidad.

Deberíamos tener presente este mensaje de Amma, pues en sí mismo relativiza todas las situaciones que la vida nos invita a vivir. Las relativiza y siguiendo el librito de mensajes de Amma, nos damos cuenta de esta relatividad, nos damos cuenta que le estamos dando importancia a cosas que no la tienen, o no tienen la que nosotros le damos, y sólo con esta comprensión, ya nos evitamos mucho sufrimiento del que nos invita a vivir el ego. El ego se defiende a sí mismo a través del sufrimiento. Esta es su supervivencia. Pero,...

Dios no se va a cansar de crearnos todas las circunstancias que necesitemos cada uno y cada una de nosotros, para que el ego pierda fuerza, para que el ego se retire.

Dios no se va a cansar de ayudarnos estando a nuestro lado en todas las circunstancias que nos crea, para indicarnos el camino a seguir: Es por ahí hija, es por ahí hijo.

Y es que es un trabajo arduo el hacer perder fuerza al ego, pues se defiende como un gato panza arriba.

Tengo un amigo que dice:

A veces estás en un estado de paz profunda, producto de una meditación en la que has conectado con algo en tu interior muy poderoso, o por cualquier otra situación que hayas vivido. Y desde estado de paz, te dices: esta es la mía, voy a deshacerme del ego, y lo coges lo envuelves bien con papel de aluminio, lo precintas muy bien, abres la puerta y lo echas fuera, a la calle. Y cuando vas a cerrar diciéndote que alegría me he deshecho de él, me he liberado del ego, y das el portazo para dejarlo fuera, te das cuenta de que no puedes cerrar, pues el ego ha puesto el pie entre la puerta y el marco de la puerta. Así de listo es el ego.

Deberíamos observar el ego, como algo diferente a nosotros mismos. Esto no es mío. Este no soy yo.

Deberíamos desintificarnos del ego. Sí, es difícil, pero no se encuentra ni todos los días, ni cada vida de las que llevamos viviendo, un Maestro de la magnitud de Amma. Es momento de aprovecharlo.

Y cada vez que no nos sintamos a gusto con nosotros mismos, cada vez que no nos sintamos a gusto con alguien determinado, cada vez que la vida nos envíe algún tipo de malestar o enfermedad, reflexionar, reflexionar para pedirle a la enfermedad, para que está aquí, que mensaje nos trae, hacernos amigos de la enfermedad que a lo mejor se ha producido a consecuencia o de temas kármicos o provocadas por el ego. Reflexionar para decirnos a nosotros mismos: ¿de qué me beneficia el enfadarme? Y el enfado está en el ego. Voy a intentar comprender a la otra persona, aunque no esté de acuerdo con su actitud. Si la comprendes a lo mejor le puedes decir con el mejor de los tonos: te comprendo, no puedo estar de acuerdo con lo que tu piensas o haces, pero te comprendo.

Esta es la compasión que nos invita Amma a tener para podernos liberar del dichoso ego.

Y mientras nos vayamos liberando del ego, ganaremos en alegría. Nuestra vida estará más conectada con la alegría.

Con lo que podremos decir desde lo más profundo de nuestro corazón:

-De la alegría vengo. -En la alegría vivo,... y en alegría me convertiré.

Muchas gracias.

OM NAMAH SHIVAYA