“Llegamos al umbral de un nuevo año. Este simple pensamiento despierta vibraciones de expectativas, felicidad y celebración. Que las flores de la paz y la felicidad florezcan en vuestros corazones. Que la fragancia de esas flores impregne al mundo mediante vuestras buenas acciones.
“Durante el pasado año nos han herido profundamente muchos sucesos. Guerras, conflictos, desastres naturales, explotación de mujeres...la lista continúa. La guerra en Siria, el huracán de Filipinas, la destrucción de Uttarakhand...Las terribles imágenes de esas tragedias siguen presentes en nuestra mente. Tenemos discusiones, escribimos acerca de los retos que afronta la humanidad, pero aún no estamos realmente conscientes de ellos. Se habla mucho de la conservación del medio ambiente, pero la gran verdad reside en poner en práctica estos principios, hacer algo realmente. Durante el año pasado se han destruido más de 5.000.000 de hectáreas de bosque. ¿Cuánto tiempo llevará regenerar estos bosques? ¿Es posible hacerlo? Los científicos llaman a los bosques “los pulmones del planeta”. Deberíamos ser conscientes de que contaminar ríos, océanos y bosques no es diferente a inyectar veneno en nuestro sistema circulatorio. Los mismos individuos supuestamente responsables de la protección de la naturaleza se encargan de destruirla. Amma tiene una petición: Cuando hagamos nuestros propósitos para el nuevo año, hagamos el de mostrar compasión hacia la naturaleza. Cada pequeño esfuerzo que hagamos por la conservación medioambiental es precioso porque ayuda al mantenimiento de la vida. Es más precioso que cualquier clase de bienestar material. En nuestras escuelas, podemos despertar en los niños el interés por la protección de la naturaleza, como el interés que hemos despertado en ellos de amasar dinero.
“Nada va a cambiar solamente con el paso de las hojas del calendario. Las impurezas de la ira, codicia y envidia en nosotros, son las que tornan los “buenos tiempos” en “malos tiempos”. Necesitamos un objetivo más alto en nuestras vidas. Imaginad un barco navegando en el océano, con sus velas perfectamente alineadas para aprovechar el viento. Pero si el capitán no sabe en qué puerto debe anclar, navegará sin un destino y sin un destino, una navegación perfecta, será en vano. Son las metas las que nos causan entusiasmo, fuerza y energía. Nos dan la vida.
“Necesitamos una rutina diaria que nos lleve a nuestro objetivo. Si éste es la espiritualidad, procuraremos nutrirnos de buenos pensamientos. Procuraremos realizar buenas acciones. No daremos vueltas a pensamientos innecesarios. No estaremos celosos del éxito ajeno. En lugar de preocuparnos por las cosas, trataremos de hacer lo que podamos. Leeremos libros espirituales y asistiremos a satsangs.
“La muerte está siempre enfrente y detrás de nosotros, como una sombra. Nuestro cuerpo es como una casa alquilada. En cualquier momento nos pueden pedir que la dejemos. En lugar de vivir pateando y gritando, deberíamos estar siempre dispuestos a marcharnos con alegría y risa. Antes de que la muerte nos lleve, tenemos muchas tareas que completar. La vida es una oportunidad para mirar atrás y valorar nuestro progreso y también para mirar hacia adelante y decidir nuestras acciones. ¿Por qué nos hemos embarcado en el viaje de la vida? ¿Cuál es nuestro objetivo? ¿Estamos caminando en la dirección correcta? O ¿hemos perdido nuestro camino? El alba de un nuevo año es un tiempo de introspección y resoluciones firmes.
“Nos bañamos cada día para estar limpios. El entusiasmo es como un baño para la mente. Sentir alegría y entusiasmo el día de Año Nuevo no es suficiente. Tenemos que mantener este sentimiento a lo largo del año. Cuando nos despertamos por la mañana, nos lavamos la cara y nos preparamos para el día. Nadie quiere aparecer sucio o feo. Este es habitualmente el primer pensamiento del día. Pero también necesitamos limpiar nuestra mente. Necesitamos limpiar el polvo de nuestras negatividades. Así, no solo nuestras vidas, también las vidas de quienes nos rodean serán hermosas. Si esta es nuestra actitud, el mundo entero crecerá como el despertar de una nueva primavera.
“Que los hijos de Amma sean mensajeros de paz y amor. Amma reza para que las vidas de sus hijos estén llenas de paz y felicidad. Que la gracia os bendiga a todos. Recitemos “Om Lokah Samastah Sukhino Bhavantu” — Que todos los seres en todos los mundos sean felices — juntos. Es difícil alejar la oscuridad, pero en la presencia de la luz, la oscuridad desaparece espontáneamente. Así, que las lámparas del amor y la compasión ardan brillantes en los corazones de todos los hijos de Amma. Que el Paramatman (Supremo) nos conceda la fuerza.”
El mensaje concluyó con la oración ‘que todo el mundo contribuya a un 2014 en paz.’ Amma comenzó a cantar Khusiyom Ki Bahar. Todos cantaron con Amma en un espíritu de oración que culminó en el coro final ‘Lokah Samastha Sukhino Bhavanthu.’
Después el ánimo se puso alegre con el canto de Meri Jhopadhi De dirigido por Amma, mientras un mar de cuerpos se balanceaba de un lado a otro y aplaudía al ritmo de la canción. En la última canción, muchos ya no podían contener su alegría y puestos en pie danzaron mientras Amma cantaba Tannana Tannana. Toda la sala balanceándose hasta que la canción alcanzó su apogeo y ya todo el mundo estaba en pie, saltando y bailando alegremente. Tras el Mata Rani Ki final, trajeron a Amma el payasam que ella distribuyó a todos y cada uno.