¿La nueva frontera en agricultura? La madre mar. El cultivo de algas es un negocio global floreciente, tanto como una prometedora vía para el empoderamiento de mujeres rurales que viven en pueblos costeros. Esta práctica les ofrece recursos clave y conocimientos para una labranza sostenible y su procesamiento, lo que está creando una fuente viable de ingresos. Es una industria no solo reconocida por sus beneficios económicos, sino también por su impacto ambiental positivo.
Los Laboratorios Ammaci están formando mujeres de pueblos costeros del distrito de Rameshwaram en Tamil Nadu. El proyecto apunta a alcanzar a 120 mujeres en dos años con el cultivo de algas, mediante la formación profesional integrada Amrita. Entre estas mujeres y sus familias se está facilitando el establecimiento de un negocio colectivo en la zona.
En los dos últimos meses, 24 mujeres del pueblo de Thiruppalaikudi han recibido formación y han cosechado con éxito 1.290 kilos en su primera ronda de cultivo. En una visita de campo, el equipo de los laboratorios Ammachi, encontró un nivel de mareas extremadamente bajo, lo que pone de manifiesto la naturaleza dinámica de los entornos del cultivo de algas.
Con el empeño activo en el monitoreo del cultivo de algas, las personas formadas revisan regularmente las cosechas para optimizar el rendimiento. Más aún, el tiempo dedicado a construir un plan base de investigación experimental, indica un compromiso para avanzar en su conocimiento sobre el terreno. La adquisición de especies Gracialria y Ulva del cercano pueblo de Nambuthalai, también subrayan su dedicación activa a la investigación y a estudios potencialmente comparativos.
En una visita al terreno, el equipo de Laboratorios Ammachi, tuvo la oportunidad de recoger materiales para una planta de secado, entre otros un marco de madera, redes, y láminas PVC. El equipamiento añadido ayudó a dinamizar el proceso de secado de las cosechas, esencial para la conservación y su uso o venta subsiguiente.
El 2 de mayo, los Laboratorios Ammachi llevaron a cabo una evaluación final sobre el terreno, para las mujeres en formación. Como algunas son analfabetas hubo que hacerlo oral y prácticamente para garantizar la igualdad y accesibilidad para todas. Un total de 20 alumnas se sometieron a la evaluación y su orgullo por su nueva destreza y conocimiento fue bien visible.
En general la visita de Laboratorios Ammachi y actividades complementarias subrayó su dedicación a la investigación práctica y a la formación del cultivo de algas. Equipar a las aprendizas con infraestructura esencial y fomentando una estrategia de investigación, mostraron un compromiso en avanzar en la industria y empoderar a las mujeres en prácticas con éxito.
El año pasado recibieron formación en Rameshwaran 40 mujeres de la aldea Olaikkuda. El proyecto es una asociación de financiación conjunta entre la Universidad Amrita y el Grupo de Compañías Transworld.