Finalmente, los presos están recaudando fondos para ayudar a niños con cáncer. Recaudan dinero haciendo y vendiendo pulseras y coleccionando chapas de botellas que se venden al centro de reciclaje. Los presos han establecido puntos de recogida en lugares clave por toda la prisión y con el tiempo han conseguido que todos los internos adquieran el hábito de recoger las chapas y depositarlas en los puntos de recogida. Los amigos y familias de los presos, incluso los trabajadores sociales y otros funcionarios de la prisión, traen las chapas de casa para depositarlas en los puntos clave. Esta práctica ha producido algo hermoso y es que muchos grupos de presos se han comprometido a recolectar chapas, lo que ha construido un puente entre distintos grupos que de otro modo no tendrían nada en común. El programa de recolección de chapas fue diseñado para implicar a la mayoría de la población interna en la creación de una práctica fácil y positiva para aquellos que no son receptivos a actividades más estructuradas o comprometidas con servicios. Cuando escuchan que pueden ayudar a niños con cáncer, solo cambiando de lugar sus chapas usadas, se comprometen fácilmente. Una de nuestras voluntarias explica que estas cosas son como pequeños puntos de luz para los presos. Un acto de compasión fácil de alcanzar, que abre sus corazones y produce cambios positivos en otros aspectos de sus vidas.
Durante la reciente visita de Amma a Granollers, España, diez internos que han estado participando en programas de Embracing the World en el centro Quatre Camins, recibieron permiso para pasar el día en el programa de Amma, realizando servicios de apoyo al mismo y también tener la oportunidad de conocer a Amma personalmente. Tras recibir su abrazo, uno de los presos comentó sobre cómo recibe Amma a todo el mundo, sin tener en cuenta quienes son. Sintió que Amma solo vio la bondad en su corazón y describió su abrazo como una experiencia inestimable que abrió su corazón. Otro comentó que no hay palabras para describir a Amma, que se necesita la experiencia de su presencia para entenderla. Otro declaró que Amma puede cambiar el odio y la guerra en el mundo a través de su amor infinito y que la mayor lección que ha aprendido de Amma es que debería abrazar más y expresar mejor sus sentimientos.
Nuestras voluntarias están considerando dar un paso más, crear un programa de ayuda para facilitar la transición a la vida normal a los que salen de la prisión. Para muchos, salir puede ser una experiencia muy difícil. Sin los servicios y apoyo de la prisión, reintegrarse en la sociedad puede ser muy complicado. Las voluntarias están programando cursos de meditación para los presos recién liberados.
Amma comentó el trabajo de las voluntarias en la prisión Quatre Camins: “Amma está muy, muy feliz de que sus hijas sirvan al mundo. Cuando morimos, el cuerpo se corrompe y lo único que queda es lo que hemos hecho por los demás. Es como plantar una flor o un árbol en el desierto. Amma está muy feliz con sus hijas.”
El día que vinieron a ver a Amma, los presos trajeron un poema que habían escrito para ella, así como un bonito altar de madera tallada por uno de los internos. He aquí el poema original:
DE LA ENIGMÁTICA INDIA LLEGARON TUS AMOROSOS ABRAZOS
Amma, escuchaste la llamada de tus hijos,
nuestros corazones se debatían entre el bien y el mal
y se empequeñecían bajo el peso del odio,
hasta que llegaste tú, con tus cálidos abrazos,
transmitiéndonos un amor que es libertad,
libertad para los encarcelados en cárceles de ladrillos
y en cárceles de la mente.
Creando con tu templada mirada
un áshram de protección serena en nuestros corazones.
Y desde entonces, estamos felizmente desconcertados.
Y es un sueño cumplido viajar contigo por tu compasivo reinado,
tranquilo sosiego .
En este feliz desvarío nos sentimos colmados a tu lado
Internos y profesionales de 4 Camins Solidario