Después, el grupo meditó un rato y comió junto. Al terminar, se bajó caminando hasta la Santa Cova, juntos, como hermanos, charlando un rato con uno, un rato con otro, acordándose de momentos del programa, de momentos con Amma...
En la Santa Cova se meditó un rato, cada uno a su manera, ya que -al ser sábado- había también otras personas.
Bajando de la ermita de Sant Miquel a la Santa Cova, una familia nómada con 2 niños, de Canadá, se fijaron en las muñecas de Amma que llevábamos y la reconocieron: habían ido al programa de Amma en Canadá. Y la señora explicó como Amma le había salvado la vida en Ibiza, incluso antes de conocerla: estaba en Ibiza con su marido, bajó por la carretera en un sitio donde hay una curva muy mala, y justo ahí la atropelló una moto. En la esquina de la curva había una tienda, y enseguida salió el dueño de la tienda a ayudarla, y la metió en la tienda esperando al marido. Dentro, ella vio que había muchas fotos pequeñas de diversos maestros y de Amma por toda la tienda, y una muy grande de Amma mirando justo en dirección a la puerta, a la curva. Le preguntó porque tenía esa foto de Amma justo ahí, mirando a la puerta, y el hombre le dijo que esa curva era muy peligrosa, que siempre había accidentes, y que había puesto a Amma mirando hacia allí para que salvara la vida a los accidentados. Como la había salvado a ella...
Además, una devota nos contó que el viernes por la tarde, en el prasad -alimento bendecido- de merienda que está dando ahora Amma antes de la meditación de las 5, una señora italiana explicó a Amma todo el proyecto de los 9000km. de Amor, y Amma escuchó con mucha atención. La devota nos dijo..."esto que vais a hacer juntos mañana, a Amma se lo acaban de explicar esta tarde, así que va a estar pendiente". Ella ha estado en espíritu en cada paso, en cada campanada, en cada curva.