Pregunta: Acerca de la paz mental. El problema es, lo que yo experimento cuando te veo riendo AMMA. ¿Dios es divertido como Tú? Pues yo lo imagino serio. Dices que debemos imaginar que somos uno con la Naturaleza. ¿Es correcto imaginar que somos uno con terroristas y violadores?

AMMA: La sensación no viene por algo exterior, sino que la expresión de amor que sientes por Amma, es una forma de estar calmado, porque te olvidas del mundo y permaneces en el Amor Divino.

De manera similar el gozo y la alegría es como la madre y el hijo en una feria.

En una feria con muchísima gente la madre se da cuenta de repente que su hijo no está con ella, se desespera buscándolo, y luego lo encuentra. La madre estaba focalizada solamente en encontrar al hijo, y cuando aparece se llena de gozo.

Cuando tenemos esta  focalización en la Meta, nada nos distraerá.

Un aspirante espiritual necesita la concentración de un ladrón.

Necesitamos tener nuestra conciencia focalizada en lo Divino: Sólo Dios es mi compañero.

Dios es eterno, y todo lo demás es sólo temporal.

Mientras hacemos este esfuerzo nos vamos llenando de cualidades divinas.

Todos tenemos estas cualidades en nuestro interior, pero no las hemos desarrollado totalmente.

La semilla y el árbol son Conciencia Divina, pero la semilla no nos da ni sombra ni fruta, primero ha de germinar y crecer hasta hacerse un gran árbol.

De manera similar tenemos esta Conciencia Divina en forma de esta semilla en nuestro interior, que debe crecer hasta hacerse un gran árbol.

Entonces trascenderemos nuestro ego y nos podremos experimentar a nosotros mismos como seres divinos.

Creceremos en este amor y lo compartiremos con los demás.

Ahora, nuestra identificación  con el ego no nos deja ver este aspecto.

Nosotros cerramos las puertas y ventanas, si las abrimos la Luz entrará.

Es el camino del amor y la devoción, si lo seguimos nos sintonizaremos con el Amor Divino.

No importa cuánto esfuerzo hagamos, o estemos en presencia del Maestro, si no sintonizamos con la emisora, con Amma, no alcanzaremos esta experiencia.

Historia: Una mujer se sienta frente al músico, para asistir a un concierto, se da la vuelta y ve a otra mujer que está igual que ella, le estorba y pelea. ¿Cómo se atreve a sentarse aquí, igual que yo? Es una pordiosera, es la hija de nuestra sirvienta, etc., etc., así estuvo todo el concierto con esta pelea mental. Finalmente despertó de este estado justo en el momento que había terminado el concierto.

Lo mismo ocurre con Amma, aunque estemos a Su lado, nuestra mente no está focalizada en Ella, con lo que no tenemos ningún beneficio.

Esto es lo que nos pasa cuando permitimos que los pensamientos nos distraigan y nos invadan. Debemos cortarlos y sintonizarnos con Amma.

La mente es como un río que va en muchas direcciones, si lo canalizamos bien se potencia.

Cuando logremos cortar estos pensamientos, y nos focalicemos en Dios, la alegría que recibiremos es muy profunda.

Los pensamientos hay que tratarlos como a una visita que no está invitada. Tomar distancia, y dejemos que estos pensamientos pasen, no prestar atención, y seguir con lo que estemos haciendo, así se irán.

Tratemos de tomar conciencia de que estamos en una trampa, y no prestar atención a cada pensamiento que entra en nuestra mente, pues es lo que crea insatisfacción y alteración en nuestro interior.

Los pensamientos no deseados podemos verlos como pájaros volando, dejarlos pasar, antes de que construyan su nido en nuestra cabeza.

Un devoto piensa que Dios nos cuida en todo momento, así no se quedarán los pensamientos que no deseamos.

Todo lo que penetra en nuestra mente se lo debemos de ofrecer a la Divinidad, de esta manera se irán.

Dios nos cuida de todo, lo que venga a mi mente se lo entrego a la Divinidad, nada me afectará.

Historia: Era una persona sentada en el tren y con la maleta en su cabeza, y hacía todo el trayecto llorando. Alguien le preguntó: ¿por qué lloras?  Es que tengo pasaje para mí, pero no tengo pasaje para mi maleta.

Nosotros prensamos que todo está en y sobre nosotros, si se lo entregamos a Dios, la vida se hace más llevadera y armoniosa.

RESUMEN

¿Con qué nos identificamos?

¿Con quién nos identificamos?

Son buenas preguntas a hacernos.

Si somos sinceros al respondernos nos daremos cuenta que nuestra identificación está básicamente centrada en nosotros mismos, y en todo lo que hay, en todo lo que pasa en el mundo de nuestro alrededor humano, en el entorno de nuestra vida humana.

Estamos identificados con nuestro cuerpo. Cuando decimos yo estoy estudiando, yo ahora trabajo de contable, yo voy a ir de vacaciones este invierno, porque quiero evitar las multitudes del verano.

En nuestra mente mientras nos referimos a nosotros mismos está presente el cuerpo,  porque el cuerpo es lo que vemos, el cuerpo es lo que tocamos, y es mucho más fácil que nos identifiquemos con lo que vemos, con lo que tocamos, con la materia.

Y esta identificación se extiende a todos los seres humanos con los que nos relacionamos, interpretamos que Rosa es este cuerpo humano que estoy viendo, con la que estoy hablando.

Esta identificación se extiende a todos los objetos que hay o no a nuestro alcance, y nos identificamos hasta tal punto con estos objetos que en esta identificación hacemos depender nuestra felicidad de los objetos que podemos tener o no en nuestro poder.

No es necesario decir que todas estas identificaciones que las valoramos como algo real y verdadero son falsas.

¿Por qué?

Porque tu cuerpo, porque el cuerpo de las personas con las que te relacionas no son eternos, tienen un límite en su existencia en este plano en el que nos movemos. Ni tampoco ninguna de estas personas te puede dar la felicidad que estás buscando, porque sus identificaciones son las mismas que las tuyas.

Porque todos los objetos que crees te van a hacer feliz al poseerlos, en algún momento por un motivo o por otro van a desaparecer, no son eternos.

Entonces...

¿Con qué o con quién tendríamos que identificarnos?

Sin ninguna duda, con nuestra alma, esta parte infinitesimal de Dios que cada uno, que cada una llevamos incorporada en nosotros mismos y que es precisamente el motor que permite que nuestro cuerpo se mueva y tenga vida.

Lo que ocurre es que nuestra alma es energía, y como tal no la podemos ver, no la podemos tocar. Pero debemos tener la certeza de que es lo único real.

Es lo único real porque nuestra alma no se estropea, ni perece, es eterna.

Y nuestra alma siempre nos pedirá cosas diferentes a las que nos pide el cuerpo, o la mente al servicio de lo que creemos que somos, al servicio del ego.

Igual que el cuerpo necesita tomar alimento para mantenerse, y se lo facilitamos de manera regular varias veces al día.

El alma también necesita alimento y cuando nos identificamos con el alma estamos en disposición de facilitarle el tipo de alimentos que ella nos pide.

Cuando a través de la identificación con el alma, entramos en esta disposición de alimentarla de acuerdo a sus deseos, el propio cuerpo se convierte en un instrumento a su servicio, la propia mente pasa a depender de los deseos del alma.

Ahí es donde nos lleva el cambio de identificación con el cuerpo y con la mente, porque comprendemos que no son reales, a la identificación con el alma que sí que es lo verdadero, que sí que es lo real, que sí que es lo eterno.

Y esta identificación nos hace dar cuenta, que esto es lo que realmente somos.

Esta convicción, este cambio de identificación produce cambios profundos en nuestras vidas, en nuestra manera de leer la vida y todo lo que va ocurriendo en el día a día.

La identificación con el alma cambia nuestro sistema de valores.

No le damos el mismo valor que le dábamos a nuestras apetencias personales procedentes de la mente y del propio cuerpo. Y estas apetencias de la mente van perdiendo fuerza.

Le damos un valor diferente a nuestras relaciones personales con otros seres humanos. Ayudamos en todo lo que podemos pero caen nuestras dependencias de otras personas.

El alma nos pide que nuestra dependencia sea única y exclusivamente de Dios, de AMMA.

Tengo una casa en la playa, que se encarga de alquilarla mi hija la menor.

Esta última quincena de agosto no salieron inquilinos, por lo que la ocupa mi hija la mayor, quien me llamó esta semana para decirme que estaban en l'Ametlla y que podía ir a pasar unos días con ellos.

Es un lugar donde ha habido vivencias familiares especiales a lo largo de nuestras vidas, sobre todo en las épocas estivales.

Y le respondí NO, para nada voy a venir. No me veo pasando unos días, por pasar unos días aquí. Voy a servir, a servir, a servir. Así es como me siento feliz.

Fue una respuesta sin pensar.

Fue una respuesta que comprendía muy bien mi hija la mayor que también es devota de AMMA.

¿De dónde salió esta respuesta?

Sin ninguna duda es una respuesta que procedía del alma.

Es un deseo del alma.

Es una apetencia del alma.

Es el alma la que reclama este alimento.

Y sentí verdadera alegría de que saliera esta respuesta de manera espontánea, pues indica que el alma va ganando protagonismo al reclamar el alimento que necesita y pasa por encima de la mente, y del cuerpo.

Sin ninguna duda lo que más importa es mantener bien alimentada al alma, con esta ansia que tiene de liberarse para toda la eternidad.

AMMA nos dice en este satsang que una de las maneras de alimentar a nuestra alma es armonizarnos con Ella, armonizarnos con la Voluntad de AMMA, y que nos podemos armonizar con AMMA desde cualquier lugar que estemos, no es necesario estar al lado de Su cuerpo, pues muchas personas están a Su lado pero no se armonizan con Su Emisora, la Emisora Divina que AMMA es.

Una de las maneras que nos sugiere AMMA de alimentar a nuestra ALMA es que tomemos conciencia de que estamos en una trampa, la trampa que hemos comentado antes del cuerpo y de la mente, y que una manera de tomar esta conciencia es dejar pasar a los pensamientos como si fueran pájaros volando, pues son los pensamientos son una pesada carga.

Entonces si nos desenganchamos de ellos y se los ofrecemos a la Divinidad, tomará la carga Dios y nos liberaremos de esta carga.

Esta es una buena manera de alimentar a nuestra alma.

Y el alimento al alma cambia la identificación con el cuerpo y con la mente, y aparece la identificación con Dios, aparece la identificación con AMMA.

Muchas gracias.

OM  NAMAH  SHIVAYA