“Esta es mi oración:

Oh Madre Divina que bendijiste a Swami Vivekananda.

Oh Madre Divina  que hiciste intensa penitencia, apoyándote solo en una pierna.

Haz por favor tu Santa Morada en este distrito.

Amma! Por favor adopta al distrito de  Kanyakumari. Protege a su gente. Te pido que inicies un hospital y una facultad de medicina en  nuestra región”.

También estaban Swami Chaitanyananda ji Maharaj del Ashram Vellimalai quien afirmó que Amma se ha encarnado para inspirarnos espiritualmente y liberarnos del ciclo de nacimiento y muerte. En su discurso para honrar la presencia de Amma en Kanyakumari dijo: “Si la espiritualidad perece, La India (Bharath) perecerá. Ninguna otra nación podrá otorgar paz en este mundo, salvo India. Si India perece el mundo perecerá. Para que el mundo no perezca hay que salvar a India. Si India debe ser salvada la espiritualidad debe ser salvada. Amma viaja por el mundo y difunde la espiritualidad y así salva a todo el mundo.”

Swami Sivachandran también presente en el programa, tuvo sus propias palabras de alabanza para Amma. “Nada en el universo puede igualar el amor de Amma. Tú no discriminas a nadie por su casta o creencia. Abrazas imparcialmente a todos. Nadie puede hacer lo que Amma está haciendo. Veo a Dios frente a mí en la forma de Amma. Estamos con gente que habla de paz, amor y ecuanimidad  y aquí Amma demuestra todos esos nobles valores”.

Amma distribuyó saris, pensiones, capital para financiar trabajo para miembros del grupo de auto ayuda Amrita Sree de la región. Los dignatarios ayudaron en la distribución a beneficiarios.

Después del cálido saludo Amma dio su sátsang, cantó una serie de bhajans, algunos en Tamil, antes de dirigir a los devotos en una puja manasa por la paz del mundo  y una meditación guiada en Tamil.

La muchedumbre reunida para escuchar a Amma  se quedó toda la noche, hasta las 8.30 de la mañana siguiente, esperando pacientemente para recibir su darshan. Entre los invitados había mensajeros del Kendra de Vivekananda venidos a recibir las bendiciones de Amma.

Y los niños de Amrita  Vidyalayam presentaron varios programas culturales durante la noche, hasta la mañana.

Durante el darshan un perro perdido deambuló hasta el estrado  y se sentó en el peetham de Amma. Amma acarició amorosamente su cabeza. Momentos después se fue del estrado  pero volvió de nuevo al final del darshan.

Tras una larga noche, Amma dijo adiós a los devotos de Kanyakumari y siguió viaje a Madurai.