Amma compartió su alegría al contemplar tantos hombres y mujeres tomando votos de renunciación y recalcó la importancia de seguir las palabras de su Guru y su entrega. Ella dijo: “La vida espiritual empieza y termina en la compasión. Continuad vuestra shadana y seva siguiendo las instrucciones y guía de Swamiji.” También rezó por los participantes, para que tengan la fuerza para seguir adelante en el camino de la espiritualidad y obtener la gracia de Dios.”
Amma los animó a vivir de acuerdo con los principios espirituales y a asegurarse de que ninguno levantará un dedo contra su Dharma debido a sus acciones. Babaji ya ha creado un escenario, solo tenéis que bailar sobre él, les recordó Amma.
Baba Ramdev manifestó su gratitud a Amma por sus bendiciones, refiriéndose a Ella como Madre Bhagavati Parashakti y le pidió que visite Haridvar para bendecir a los miles de jóvenes que necesitan su guía.
Baba Ramdev también prometió visitar Amritapuri con los recién iniciados Sannyasins. Amma, a petición suya, cantó el bhajan “Chod de manse dukh ki chinta”. Baba Ramdev y los brahmacharis cantaron algunas slokas de la Bhagavad Gita, y rezaron a Amma para ayudarles a inculcar y a practicar las cualidades divinas. (daivi sampads)
Amma terminó diciendo “Que todos despierten del estado de Dhritarashtra al estado de Sanjaya, que podía ver y oír todo aun estando lejos. Que escuchéis siempre la voz divina. Divya drishti significa ver a Dios en todo y en todas partes, que todos alcancen esta visión.”
La sesión terminó con la promesa de Baba Ramdev de que ellos vivirán conforme a la gracia de Amma.