Satsang de la semana
YOGA Y DHARMA
YOGA Y DHARMA
Imparte: Bramacharini Amritapriya
Primero intentemos reflexionar sobre el significado de estas dos palabras. Yoga significa "unión", y en las Escrituras se refiere a "unión con lo Divino". Un yoga es un método, uno entre otros muchos, mediante el cual un individuo puede unirse a Dios, a la Realidad que subyace bajo este universo aparente y efímero. Para lograr tal unión hay que alcanzar el estado de yoga perfecto.
Dharma tiene muchos significados. Significa "la ley del universo", "la ley divina", "justicia", "lo que es correcto" o también "deber". La definición de Dharma que nos da Amma es: "La acción correcta, en el momento correcto, en el lugar correcto".
Amma dijo recientemente (2015) en uno de sus satsangs que conocerse a uno mismo es nuestro paramadharma como seres humanos, eso significa nuestro supremo dharma. Amma dijo que este dharma es eterno, que nunca cambia. En las Escrituras se dice que es muy raro obtener un nacimiento humano y que solo los seres humanos pueden lograr el conocimiento del Ser. Solo los seres humanos han recibido el don del intelecto que sabe discernir, pueden por tanto, discernir entre lo Eterno y lo que no es eterno. Solo los seres humanos pueden conocer la Realidad, el Ser supremo o Dios. Este es el objetivo de la vida humana, este es nuestro dharma. Este es también el estado del Yoga, por lo que ya podemos ver que el Yoga es nuestro último dharma, el yoga, y el dharma conducen a una y la misma cosa.
¿Acaso no es una buena nueva las palabras del evangelio cuando anuncian que "El Reino de Dios está dentro de nosotros"? Recuerdo que en mi juventud buscaba un sentido para la vida. ¿Cuál podría ser el significado de esta vida, de máximo unos cien años en esta tierra, entre el nacimiento y la muerte? ¿Por qué tanto sufrimiento? Las guerras, el hambre y las enfermedades eran lo que les había tocado en suerte a muchas personas. No podía entender, no podía aceptar el concepto de Dios en ese momento, porque no sabía acerca de la ley del karma. De acuerdo con esta ley, cosechamos aquello que hicimos; hacer buenas acciones y seguir el dharma es una gran ayuda para la vida espiritual. Y el objetivo supremo de la vida humana es realizar nuestra Divinidad innata. Es bueno leer o escuchar sobre eso, pero personalmente, me ayudó mucho conocer a Amma. Ella encarna la Verdad, Ella es la prueba viviente de que existe tal estado de Yoga divino. Y cuando percibimos la dicha que ella irradia, nos sentimos más inclinados a hacer prácticas espirituales y tratar de alcanzar ese estado. Amma es también la encarnación del dharma. Ella siempre cumplió su dharma hacia su familia y, por ejemplo, se ocupó de su hermano menor, Satish, que sufría de asma; Ella lo llevó en sus hombros al hospital cuando se estaba ahogando.
¿Cuál es la forma de alcanzar el estado supremo del yoga? Es hacer bien nuestro propio dharma (nuestro deber), hacerlo con la actitud correcta. Este es en realidad todo el tema del Bhagavad Gita, que los sabios consideran la Esencia de todas las Escrituras. Al comienzo del BG, en el primer capítulo, Arjuna, que se supone que lucha por el reino, se siente deprimido al ver a sus oponentes: la gente con la que se supone que debe luchar son sus primos, con sus queridos y respetados maestros, y con Bhishma, el “el abuelo" de la dinastía. Sin sentir apego, Arjuna siente que no tiene sentido matar a estas personas para recuperar su reino. Él quiere convertirse en un sannyasi, un monje. La verdad es que los primos, los Kauravas, eran personas injustas, a quienes no les importaba el dharma, y habían intentado muchas veces matar a Arjuna y a sus hermanos. También los engañaron en un juego de dados para quitarles su reino, y los obligaron a pasar 12 años en el bosque y un año más en el exilio, y cuando los Pandavas regresaron para reclamar el reino, habiendo cumplido todas las condiciones exigidas por sus oponentes, éstos se negaron a darles incluso 5 casas para ellos. (Duryodhana dice que incluso ni una aguja.) Uno de los propósitos del BG es convencer a Arjuna de que debe cumplir su dharma, y luchar. Al tratarse de un kshatriya (un príncipe, un guerrero), su deber era establecer la rectitud, el dharma, para proteger al reino y a los súbditos de la injusticia (adharma). Si desea convertirse en un sannyasin, en ese momento, no es por desapego, como debería ser, sino por apego a su familia y parientes. Tal paso hubiera sido solo para escapar de su deber y hubiera sido totalmente erróneo.
Nuestro propio dharma o swadharma varía de acuerdo con las personas, el lugar y el momento. Amma siempre dice que un cirujano en el hospital debe concentrarse en sus pacientes, y en su casa en su familia, debe ser un buen esposo y padre. Un maestro o maestra en la escuela es un maestro o maestra, mientras que en casa es una madre o un padre.
En el Mahabharata, la epopeya que narra el BG, el sabio Markandeya cuenta la historia de Savitri, quien salva a su esposo Satyavan de una muerte segura. Se supone que debe morir un año después de su boda, pero Savitri, a través de su amor, fe y austeridades, logra salvarlo de las garras de Yama, el dios de la muerte. Ella sigue a Yama, y habla tan bellamente sobre el dharma, que Yama finalmente le concede la vida a su esposo. Uno de los versos que ella dice es el siguiente:
"Quien no tiene autocontrol no practica el dharma. Solo aquellos que poseen autocontrol practican el dharma, y hay tres formas de hacerlo: como cabeza de familia (grihastashrami), como brahmachari (estudiante de un guru) o como sannyasi (monje). Todos ellos practican el dharma para obtener sabiduría, vijnana, conocimiento, auto-realización. Es por eso, que los sabios dicen que la importancia del dharma es suprema. Según los sabios, si uno sigue correctamente el dharma de uno de estos ashramas (estados), uno obtiene la liberación (moksha)". Así que estas son las palabras de Savitri sobre el poder del dharma: conduce al yoga, a la unión con el Supremo.
Interesante es también este punto: sin autocontrol, uno no puede practicar dharma.
Amma a menudo dice que necesitamos disciplina, que todos hemos venido aquí para superar los gustos y las aversiones, la atracción y la repulsión. Por ejemplo, si nos levantamos para la archana, superamos nuestra atracción y apego al sueño. Cuando hacemos seva de reciclaje, superamos nuestra repulsión hacia el manejo de residuos. Amma nos brinda muchas oportunidades para trabajar en lo que nos gusta y lo que no nos gusta. ¿Por qué? Porque esas tendencias podrían impedir que practiquemos el dharma. Por ejemplo, las personas demasiado apegadas al dinero, pueden llegar a aceptar sobornos.
Además, los gustos y aversiones pertenecen al ego, y tenemos que rendir el ego para alcanzar el estado del yoga.
Por ejemplo, recuerdo que en la víspera de Navidad solo comí kanji, las gachas de arroz con verduras picantes. Era una noche de Devi Bhava. Estaba recordando la cena navideña que solíamos tener, pero luego pensé: "Bueno, todo está en la mente, ¿por qué no kanji en Nochebuena?" Es por eso que Amma nos hace reciclar, a través del proyecto Amala Bharatam, de recogida de basura, limpiando el lugar de peregrinación de Shabarimala o el cercano río Pampa. Recuerdo una vez que Amma nos llamó para cargar estiércol de vaca en baldes (era muy líquido y salpicaba) porque había sido puesto en un tanque equivocado. Amma se reía y cargaba con nosotros, luego se sentó y lo mezcló con paja para secarlo y que sirviera como combustible. También solíamos llevar ladrillos, arena o grava, un trabajo que a la gente normalmente no le gusta hacer. Para mí, también fue difícil al principio ir a enseñar francés en la Escuela Superior de Ingeniería. Tenía miedo de enseñar a estudiantes de una cultura diferente, sentía que era difícil combinarlo con mi sadhana o práctica espiritual, pues tenía que enseñar a jóvenes que se preparaban para llevar una vida mundana. Al final, solo a través de la gracia y la entrega podemos alcanzar la meta. Pero como preparación, necesitamos disciplina.
El sabio Patanjali, que compuso los famosos sutras del Yoga, resume en dos de sus sutras la disciplina que debe seguir un buscador espiritual. Lo que un sadhak debe evitar se llama yama YS II, 30 dice: "Yama es la abstención de dañar a los demás, de la falsedad, del robo, de la incontinencia y de la avaricia".
Por lo tanto, un sadhak no debe dañar a ningún ser, ya sea a través de hechos, palabras o pensamientos.
Un sadhak no debería mentir, pero tampoco decir una verdad que sea cruel (Amma da el ejemplo de decir: pareces un mono). No se debería robar ni codiciar lo que pertenece a los demás. Deberíamos tomar del mundo solo lo que realmente necesitamos. De lo contrario, lo robamos al resto de la humanidad. Este es un punto muy relevante en una sociedad materialista, donde los deseos se multiplican artificialmente.
Continencia significa no solo celibato, sino también control de los sentidos. Por supuesto, la lujuria es una emoción muy poderosa, pero debemos tener cuidado con lo que comemos, vemos y escuchamos, porque nutre la mente y los pensamientos que tenemos. Es por eso, que la televisión es tan peligrosa, especialmente para los niños; influye en su mente, sus pensamientos y luego en sus palabras y acciones. Incluso Internet es peligroso, conozco a un brahmachari que se casó con una chica con la que había comenzado a chatear en Internet... Así que deberíamos tener cuidado de no perder el enfoque en el objetivo del yoga. Deberíamos hablar solo de lo que se necesita y recordar siempre a Dios, hablar sobre Dios.
Los niyamas, u observancias, se dan en el sutra II, 32: "Los niyamas son pureza, satisfacción, mortificación, estudio y devoción a Dios".
Pureza significa limpieza física y mental. De nuevo significa estar alerta, mantener pensamientos nobles y evitar los dañinos, no perder el enfoque en Dios. El contentamiento significa que aceptamos lo que la vida nos trae, ya sea bueno o malo. Esta es una expresión de devoción. De nuevo, no es tan fácil de practicar... a menos que tengas fe.
Las palabras de Savitri también insisten en el poder de cumplir el propio dharma, cualquiera que sea nuestra posición en la sociedad.
Hay una buena historia ilustra este punto. Había un buscador espiritual que estaba haciendo austeridades, meditando bajo un árbol e intentando enfocarse en Dios. De repente, una grulla sentada en el árbol defeca sobre la cabeza del buscador. Él se enoja mucho y mira al pájaro. El pájaro cae, reducido a cenizas por el poder de su ira. El sadhak (buscador espiritual) está asombrado y se siente un poco orgulloso de su logro. Después va a la ciudad a pedir su comida y llega hasta una casa. La señora de la casa le dice que espere, pues su esposo acaba de regresar y ella debe servirle primero la comida a él, ya que ese es tradicionalmente su dharma. El sadhak se siente molesto porque tiene que esperar. Pero ella puede percibir su estado mental y le dice: "No soy una grulla, a la que puedas quemar con el poder de tu ira". Entonces él se queda totalmente sorprendido, porque no hay manera de que ella sepa lo que le acaba de pasar. Está tan impresionado que le pide perdón; al mismo tiempo siente algo de miedo por su poder. Él le pregunta cómo puede progresar y ella le aconseja que vaya a ver a su maestro. Entonces busca por la ciudad a este maestro, pero cuando finalmente lo encuentra, descubre que es un carnicero. Esta profesión se suele considerar de bajo rango y bastante impura. El objetivo de la historia es mostrar que la acción en sí misma no es importante. Es la actitud con la que se realiza la acción, lo que la hace pura o impura. El carnicero es un cabeza de familia, tiene que cuidar a su familia, él pertenece al sector grihastashrama, pero al cumplir su deber desinteresadamente, como una ofrenda a Dios, alcanzó el estado de Yoga. Entonces, aunque el sadhak pudo llegar a pensar que era más "espiritual" que el carnicero, ya que era un brahmachari que buscaba a Dios, la historia le enseña que no lo era.
Lo importante es la pureza del pensamiento, las palabras y las acciones. No puede haber progreso espiritual sin pureza interna. No podemos seguir el dharma sin pureza; por lo tanto, nunca podemos alcanzar el estado de Yoga sin pureza interna.
Jesús dice en el Evangelio: "Bienaventurados los que tienen corazón puro, porque ellos verán a Dios"
Patanjali, Y.S. II, 28: "Tan pronto como todas las impurezas han sido eliminadas por la práctica de las disciplinas espirituales (las partes del yoga), la visión espiritual de un ser humano se abre a la luz que le da el conocimiento del atman".
Amma da la siguiente definición de impureza: "La impureza es el sentimiento yo y mío", el sentimiento de separación, de división. Es muy difícil para nosotros deshacernos de este ego. El camino es la rendición total del cuerpo, la mente y el intelecto, dice Amma, es extremadamente difícil, pero podemos alcanzarlo si establecemos una conexión de amor con el maestro. El maestro nos guiará pacientemente hacia ese objetivo. Pero depende de nosotros rendir el ego o no.
Hay una bonita historia sobre Kabir, el santo. Algunas personas vienen y le preguntan a San Kabir: "¿Qué es rendirse?" Kabir no responde de inmediato, pero poco después le pide a un discípulo que traiga una vela aunque sea de día y haya mucha luz. El discípulo obedece implícitamente, demostrando su rendición, pero la gente no comprende y vuelve a hacer la misma pregunta. Entonces Kabir le pide al mismo discípulo que traiga dulces, gulab jamun, estas bolas muy dulces que se encuentran en el norte de la India; luego le pide que ponga sal en los gulab jamuns y nuevamente, el discípulo obedece. Kabir luego ofrece estos gulab jamun salados a todos, pero la gente se niega a comer. ¡Están molestos de que Kabir haya mezclado sal con estos dulces y pida luego que se los coman! Solo el discípulo acepta comerlo. Cuando se le hizo la misma pregunta por tercera vez, Kabir responde que el discípulo acaba de demostrar lo que es la rendición. Rendirse significa rendir nuestro ego y nuestra propia voluntad.
Las Escrituras dicen que el conocimiento del Ser amanecerá automáticamente en alguien cuyo corazón sea puro. BG IV, 38: "En la tierra no hay purificador tan grande como el conocimiento; aquel que ha alcanzado la pureza del corazón a través de una práctica prolongada de karma yoga, automáticamente ve la luz de la Verdad en el ser en el curso del tiempo".
El Chandogya Upanishad narra la historia de Satyakama y vemos allí un ejemplo de obtención de pureza a través del karma yoga. "Después de iniciar a Satyakama, el sabio le dio cuatrocientas reses magras y enfermizas, diciendo:" Cuida bien de estas, muchacho". El muchacho las condujo rápidamente hacia el bosque, prometiéndose a sí mismo que no regresaría hasta que fueran mil. Vivió en el bosque por muchos años, y cuando el ganado aumentó a mil, el toro de la manada se le acercó y le dijo: "Satyakama, nos hemos convertido en una manada de mil. Condúcenos a la casa de tu maestro y te mostraré un pie de Brahman" Así que el toro ayudó y enseñó a Satyakama, luego fue el fuego, luego un cisne, luego un somorgujo (una gran ave acuática).
"Finalmente, el joven llegó a la casa de su maestro y se presentó reverentemente ante él. Tan pronto como Gautama lo vio, exclamó: "Hijo mío, tu rostro brilla como un conocedor de Brahman. ¿A través de quiénes aprendiste? Satyakama respondió: "A través de seres que no son humanos", pero deseo que tú también me enseñes. Porque he oído de los sabios que solo el conocimiento que imparte el Gurú conducirá al bien supremo."
Entonces el sabio le enseñó ese conocimiento y no se dejó nada."
Aquí podemos ver primero la actitud humilde de Satyakama. Él sabe que es ignorante y viene a pedir el conocimiento supremo. Cuando el maestro lo envía al bosque, no protesta diciendo que quiere estudiar las Escrituras o estar con el maestro. Él obedece de inmediato. Luego, durante años, trabaja muy duro, haciendo karma yoga, cuidando él solo de cientos de vacas. Vive en el bosque, lo que significa una vida de renuncia, sin comodidades. Él rinde culto todos los días, postrándose y mirando hacia el este, dice el Upanishad. En la India, el Este es tradicionalmente la dirección hacia la que mira el sacerdote durante un ritual. Después de muchos años de llevar esta vida, su mente se ha vuelto tan sutil que puede ser enseñada por el toro, el fuego, el cisne y el ave acuática.
Pero él sabe que solo un maestro auto-realizado puede dar el conocimiento supremo, y lo pide con toda humildad. Esto muestra la importancia de la gracia. Para alcanzar el estado de yoga, se necesita gracia.
Importancia de la gracia
Nuestros esfuerzos son limitados. No podemos alcanzar el infinito con nuestros esfuerzos limitados. La gracia es necesaria, pero la forma de conseguirlo es la sinceridad. BG Ch IV, 34: "Comprende la verdadera naturaleza de ese Conocimiento acercándote al alma iluminada. Si te postras a sus pies, les prestas servicio y los interrogas con un corazón abierto e inocente, esos sabios videntes de la Verdad te instruirán en ese Conocimiento". Esto es exactamente lo que vemos en la historia de Satyakama.
El camino de Amma (visto como una imagen de pájaro): karma yoga, bhakti yoga, jnana yoga. Las dos alas y la cola, los 3 son necesarios.
Karma yoga ayuda a superar lo que te gusta y lo que no te gusta; si se hace con la actitud correcta conduce a moksha. Actitud: como una ofrenda a Dios, con concentración y devoción, solo soy un instrumento, no soy el hacedor.
Bhakti yoga: da dulzura, ayuda a conectar con el Supremo en el corazón. Los místicos cristianos y los místicos hindúes hablan de la cueva del corazón, donde Dios habita. Amma a menudo dice que el lugar donde Dios habita es el corazón, y tenemos que dejar caer la cabeza (el asiento del ego) en el corazón. Ayuda a obtener concentración. Donde hay amor, hay concentración.
Jnana yoga es la cola que le da dirección al pájaro. Estudiamos las Escrituras o las palabras de un mahatma para recordar el objetivo de la vida humana, para saber hacia dónde vamos. Amma a menudo cuenta la historia de un famoso escritor que viaja en tren y no puede encontrar su billete cuando llega el inspector del tren. Como es tan famoso, el inspector dice que no hay problema, pues sabe que seguramente habrá comprado el billete. Pero el hombre continúa buscando el billete porque ha olvidado cuál es su destino. Él no sabe a dónde va. Amma dice que somos iguales a este escritor, y es cierto en nuestra sociedad materialista, hemos olvidado completamente el objetivo, y éste no se enseña.
Pero somos muy afortunados por tener la Presencia de Amma. Hagamos lo que hagamos, el camino es la rendición, y mostrar una actitud de gratitud. Historia de los 2 sadhaks que hacen austeridades debajo de un árbol baniano. Narada va hacia Vaikunta para preguntar al Señor cuántos años se necesitan para alcanzar moksha. Contestación: tantos como hojas hay en este baniano. El 1º se va, mientras que el 2º baila con alegría y alcanza la liberación al instante.
Como conclusión, me gustaría citar estas palabras del Chandogya Upanishad, sobre las que podemos meditar, ya que describen nuestro objetivo: "Al igual que aquí en la tierra toda la riqueza que uno gana es transitoria, así también son transitorios los disfrutes celestiales adquiridos por la realización de sacrificios". Por lo tanto, aquellos que mueren sin haberse percatado del Ser y sus deseos correctos no encuentran felicidad permanente en ningún mundo al que vayan; mientras que aquellos que se han percatado del Ser y sus deseos correctos encuentran la felicidad permanente en todas partes".
El estado del Yoga es incalculable.
Como conclusión, me gustaría citar las palabras de Amma. Amma comienza cada Satsang con la misma frase: "Amma se inclina ante todos vosotros, que sois la encarnación del Amor Divino y la Conciencia Suprema. Premaswaruupikalum, aatmaswaruupikalum, ellavarkum namaskaaram. Esta plegaria contiene toda la sabiduría de las Escrituras de la India; también se parece mucho a las palabras de Cristo: el Reino de los Cielos está dentro de vosotros. Por la gracia de Amma, que todos podamos pronto percatarnos de esta Verdad y alcanzar el estado de Yoga.