Satsang de la semana
¿CON QUÉ ESTAMOS INDENTIFICADOS?
Satsang: Sat: Verdad, Ser. Sanga: unirse a.
SINTESIS SATSANG 17.01.2021
Enseñanzas de Amma, compartidas por Ânand
¿CON QUÉ ESTAMOS IDENTIFICADOS?
Pregunta: Amma me enojo mucho contigo, me pongo negativo por lo que dices, y simultáneamente creo en Ti.
AMMA: Primero hablemos sobre esto de tener vergüenza de decir tu nombre. ¿Cómo puede ayudar el Maestro a una persona que está identificada con su cuerpo? Necesitamos recordar que este nombre que tenemos, el cuerpo y sus circunstancias, no soy yo, la verdadera naturaleza está más allá de estas identificaciones temporales.
El yo, no es el nombre al que debamos aferrarnos o estar identificados, esto no nos ayuda, debemos cultivar el deseo de desprendernos de estos apegos, si no lo hacemos no progresaremos.
A veces nos enfadamos con Amma, y Ella no lo ve negativo, a veces nos enfadamos cuando Amma no nos mira, o mira a otro.
Tener el sentido de que Amma me pertenece a mí está bien desde el interior, pero externamente hay que saber que Amma nos pertenece a muchos, sino sufriremos.
Aquella que tiene 1000 ojos y ellos están continuamente en nosotros.
Ha de haber armonía entre lo que hablamos y lo que hacemos, nuestras palabras se han de reflejar en nuestras acciones.
Amma no ve equivocado que te enfades con Ella, pero debemos comprender, quién es realmente Amma. Esto nos ayudará a crecer.
Amma no espera que tengamos absoluta y total fe, es muy difícil, tenemos tendencias negativas que deben emerger una a una. Esta manifestación interna se manifestará en cada uno de nosotros, debemos verlas y estar dispuestos a trabajarlas siempre.
Historia: de un rishi parado delante de un río, recitando el Gayatri, estaba con las manos abiertas, totalmente concentrado, mientras un halcón pasaba volando con una rata en sus garras, y se le cayó el ratón en su regazo, el rishi compasivo lo convirtió en una nena, pasaron los años, la niña se hizo mayor y necesitaba casarse, el rishi invocó al Dios Sol, que vino y le contó que se la ofrecía como esposa, pero la hija le dijo que no, pues me convertiré en ceniza, es muy caliente el Sol, el santo aceptó, entonces el Sol propuso que las nubes quizás quisieran casarse con ella, y el rey de las nubes aceptó, pero la joven, dijo no, busca a alguien que me sienta mejor. La nube propuso al Dios del viento, el santo lo invocó, se lo ofreció a la hija, la cual dijo: no se me llevará como un trotamundos. El santo estaba confuso, entonces le ofreció la montaña, y la hija continuó no me casaré con este que tiene el corazón de piedra, me casaré con alguien que sea más fuerte, entonces la montaña expresó, alguien más fuerte que yo es la rata, porque puede cavarme y destruirme, vino la rata, y se enamoró de él, ella era una princesa pero su corazón era el de una rata, despreció el ser princesa.
RESUMEN
¿Con qué estamos identificados?
¿Quién soy yo?
¿Soy este cuerpo en el que estoy confinado? NO.
¿Soy esta mente que me atormenta? NO
Entonces,... quién soy verdaderamente?
Aunque no soy este cuerpo, aunque no soy la mente, la cual no para de hacerme propuestas, me cuesta muchísimo identificarme con quien de verdad soy.
Pues mi verdadera naturaleza, es un caudal inagotable de felicidad, de alegría, de paz, de gozo,....
Sabiendo que esta es la realidad, sabiendo que esta es una verdad incuestionable, pues me lo está diciendo Dios mismo, que ha tomado un cuerpo humano, el de Amma, para que me dé cuenta de esta realidad, no puedo identificarme con mi propio ser, porque hay alguien quien me lo impide.
¿Y... quién es este alguien?
¿De quién se trata?
Se trata del ego. El ego es esta otra naturaleza que yo mismo he creado, el ego es una espesa cortina que he ido confeccionando a lo largo de mi existencia, y es la cortina que me impide ver, es la cortina que me impide establecer conexión con mi naturaleza verdadera.
El ego tiene entidad propia, y nos hace creer que esto es lo que somos, y lo que somos según el ego, es este cuerpo con sus limitaciones, y esta mente que durante eones lleva al servicio del ego.
Entonces, con quien estamos identificados es con el cuerpo, y la mente al servicio del ego, nos hace creer de manera continua que es así.
Esta identificación, es la que produce el apego que tenemos hacia nuestro cuerpo.
Aunque sabemos que el cuerpo es un elemento perecedero, aunque sabemos que el cuerpo más tarde o más temprano va a terminar su misión aquí, aunque sabemos que el cuerpo nos va a dejar en algún momento, vivimos como si tuviéramos que estar eternamente en el cuerpo del que disponemos, en el cuerpo con el que Dios nos ha obsequiado. Como si esta vida en la que estamos no fuera a terminar nunca.
Y esta identificación es la causa de la aparición de nuestros malestares.
Esta identificación es la causa de que no estén presentes de manera permanente la paz y la alegría en nuestra vida.
Amma nos dice en este satsang que necesitamos recordar que este nombre que tenemos, el cuerpo y sus circunstancias, no es lo que somos, esto no soy yo, que nuestra verdadera naturaleza está más allá de nuestras identificaciones personales, y que el estar identificados con este yo falso, no nos ayuda, y que lo que debemos cultivar es el deseo de desprendernos de estos apegos, que son los que nos impiden crecer, son los que nos impiden progresar, son los que nos impiden expandir la conciencia.
Esto no quiere decir que no debamos cuidar del cuerpo, claro que sí, lo debemos mimar para que siempre esté a punto para realizar el servicio que Dios te pida en cada momento.
Deberíamos cuidar tanto el cuerpo como la mente, para que la sincronización entre estos dos elementos fueran cambiando la función del cuerpo, o del cuerpo/mente, hasta que los convirtiéramos en un instrumento de Dios.
Ahora el binomio cuerpo/mente están al servicio del ego, como lo han estado desde los principios de nuestra existencia, y de lo que se trata es de que estén al servicio del Señor.
Entonces es cuando convertimos la cárcel en donde tenemos confinada el alma, en una catedral, en un templo, donde el alma ya se encuentra como en su casa.
De hecho cuando nos escindimos de esta inmensa hoguera universal que es Dios, esta chispita, el alma, procedente de la gran hoguera, estaba en un estado puro, luego apareció el primer pensamiento, que podíamos seguir o rechazar desde nuestro libre albedrío. Decidimos seguirle y pasamos a la acción, vino otro pensamiento, también le seguimos, y así se fueron sucediendo pensamientos y acciones, así pusimos en acción la ley del karma, así se fue configurando el ego.
Pero ahora está Dios aquí entre nosotros, ahora está Amma, quien nos dice de una manera muy sencilla, nos dice de una manera muy a nuestro alcance:
Mira hija, mira hijo, esto es lo que ha ocurrido, y lo puedes subsanar, para ello has de desandar un camino recorrido de manera equivocada, y de esta manera de forma automática irás recuperando el contacto con tu verdadera esencia, irás acercándote a quien verdaderamente eres.
Y,... ¿es fácil deshacer todo este rosario de nudos?
No, no, en absoluto, la misma Amma nos lo dice, no sólo es difícil, es muy difícil, por eso Ella no espera que tengamos una absoluta y total fe, porque tenemos muchas tendencias negativas que deben emerger una a una, y no nos vamos a librar de que salgan a la superficie.
Ahí tenemos el ejemplo de la historia que Amma nos cuenta en relación al ratón que convirtió en una princesa el rishi que estaba meditando al lado de un río, y cuyo ratón cayó en sus manos, escapándose de las garras de un halcón, que pasaba volando por allí, mientras el rishi meditaba.
Por mucho que se le ofreciera a la princesa por parte del rishi, lo mejor de la tierra, por mucho que se le ofreciera a la princesa a Dioses de diferentes poderes, para casarse, en todas las ofertas que le hacía el rishi le encontraba pegas, nada le satisfacía, nadie le gustaba para casarse.
¿Porqué?
Porque a pesar de ser princesa su identificación estaba en el origen de lo que creía ser, y por esta identificación sólo aceptó como esposo, al que la montaña mencionó como poderoso, la rata macho.
Aunque se podía haber desposado con Dioses, eligió el desposarse con una rata, porque su corazón estaba identificado como rata.
Es un ejemplo que contado así nos puede parecer imposible, pero que refleja la realidad de nuestra condición humana, y nuestra identificación con el cuerpo/mente.
Amma siempre dice que Dios está dispuesto a dárnoslo todo, pero que nosotros sólo le pedimos migajas.
Nosotros en nuestra identificación con el cuerpo/mente, pedimos cosas del mundo a las que les damos mucha importancia, pero que tienen una importancia muy relativa, y Dios desea entregarnos la Felicidad, para siempre, Dios desea darnos la Alegría para que se instale en nosotros eternamente.
¿Qué podemos hacer para estar receptivos a los regalos que Dios desea hacernos?
Ya hemos visto que Amma nos ha dicho que las tendencias negativas que llevamos acumuladas a lo largo de nuestra existencia emergerán, no nos vamos a librar de ello.
Entonces la primera decisión a tomar es aceptar que estas tendencias negativas forman parte de nuestra identificación con el cuerpo/mente, y desde esta aceptación estar dispuestos a trabajarlas en todo momento.
Así es la manera que empezaremos a desandar aquello que nosotros hemos creado.
Así empezamos el camino de regreso a Casa.
La chispita que se escindió de la Hoguera anhela volver a fundirse con la Gran Hoguera desde donde procede.
Esta disposición, a emprender el camino de regreso a Casa, en el que nos vamos encontrando con todos los obstáculos que han provocado estas tendencias negativas en nosotros, ya es un gran paso.
Esta disposición es la que nos da la fortaleza para abordar estos obstáculos creadores de nuestras tendencias negativas.
En la medida que recorremos el camino hacia Casa, en la medida que nos vamos acercando a Casa, la identificación con el cuerpo/mente va perdiendo fuerza, pues la Luz que dimana de la Casa hace que la oscuridad vaya teniendo menos intensidad.
Vemos más claro el objetivo, y el anhelo por recorrer el camino va aumentando.
Cuando hay una firme disposición en regresar a Casa, ya tenemos los cimientos hechos. Esta disposición son los cimientos donde vamos a levantar un nuevo edificio, mientras el viejo se va derrumbando.
Vamos pues a empezar a poner los primeros ladrillos en el edificio nuevo.
¿Cómo hacerlo?
Debemos dotar a nuestra vida de coherencia y sentido común en todo lo que hacemos o dejamos de hacer. Todo ha de tener un sentido, y un sentido positivo.
En este satsang Amma nos dice que ha de haber armonía entre lo que hablamos y lo que hacemos, y que nuestras palabras se han de ver reflejadas en nuestras acciones.
Pues bien, no es suficiente pronunciar buenas palabras, es más importante que nuestras acciones sean un reflejo de las enseñanzas de Amma.
De no seguir este principio, la conciencia no estará de acuerdo, y nos lo hará saber, y hay que tener en cuenta que rectificar es de sabios.
En realidad lo único que verdaderamente importa es la Voluntad de Dios, por este motivo, no importa nada lo que pensemos, no importa nada lo que digamos, no importa nada lo que hagamos o dejemos de hacer, lo que importa de verdad es que lo que hagamos esté en armonía con la Voluntad del Señor.
Ahí es donde deberíamos fijarnos atentamente: Estar en armonía con la Voluntad de Amma, en todo lo que pensamos, en todo lo que decimos, en todo lo que hacemos.
El estar atento a lo que Dios te va proponiendo, te va desinteficando del cuerpo/mente, y este trabajo hasta se puede convertir en divertido, pues puedes ir viendo lo que sucede por dentro de ti, y lo que sucede por fuera, pero no te involucras en nada, es como si estuvieras disfrutando de una bella obra de teatro.
Cuando esto empieza a ocurrir, es una señal inequívoca de que la identificación con el cuerpo/mente va perdiendo fuerza, y va ganando poder la presencia de Dios en ti.
Hay una afirmación que el practicarla con concentración, conectados con el silencio interior, y mirando a lo más alto del cielo, nos ayuda a que nos vayamos instalando en la Voluntad del Señor.
TODO ES DIOS, NO HAY NADA MÁS QUE DIOS
Es una afirmación simple, que lo comprende Todo.
También puedes pensar en Amma mientras practicas esta afirmación, y así te vas identificando con quien Amma es, pues en este satsang nos recuerda que debemos comprender quien es Amma.
Nunca he podido ver a Amma como un ser humano, y cuando llegué a Amritapuri para quedarme a vivir allí, tenía un cierto regusto, porque en aquella época Amma todavía decía que Ella era una niña loca, y esto me impedía desarrollar toda mi devoción por Amma, pero un día ya la oí en un satsang: “Amma no es este pequeño cuerpo de 5 pies, Amma es la Conciencia Suprema”
Y luego ya se lo he oído en otras ocasiones.
Cuando canta bhajans, ya vemos como exclama: Amma! Amma! Amma! Amma!, como si Ella, su cuerpo no fuera Amma, sino que Amma es algo que está más allá del cuerpo, y el cuerpo se siente identificado con esto, que es ni más ni menos que la Energía de la Conciencia Suprema.
Hace unos 16 ó 17 años, en un tour que hacía con Amma por Estados Unidos, estábamos en Dallas, y en un espacio libre de tiempo, aunque corto, que tuve en el seva me quedé escuchando los bhajans de la tarde. Y en español Amma cantó: Oh! Diosa preciosa.
Allí en un lateral del stage donde estaba escuchándola, me puse a llorar, porque lo que cantaba y como lo cantaba llegaba a lo más profundo de mi ser, y mientras le decía mentalmente: Te adoras a ti misma.
Este es el ejemplo de identificación de Amma con quien verdaderamente es: El Ser Supremo.
Luego me fui al seva, y al terminar el seva de madrugada, se terminaba también el Programa, y me puse en el pasillo que formábamos la gente para despedirla, mientras se retiraba a su cuarto. Me encantaba cuando hacía tours con Amma ponerme en los pasillos cuando entraba y cuando salía de la sala de dharsan.
Y muchas veces ni siquiera la miraba, porque cerraba los ojos, para percibir más profundamente Su Energía. Y este día precisamente se paró delante de mí, me pellizcó el pómulo y se puso a cantar Oh! Diosa preciosa en español.
Esta es otra muestra de las que nos da, de quien es. No se le escapa ni uno solo de cada pensamiento que tenemos, no se le escapa ni uno de los pensamientos que pasa por nuestra mente, por la mente de cada uno.
Y Amma que está plenamente identificada con quien es, es precisamente quien nos ayuda a que cada uno de nosotros consiga la misma identificación que Ella tiene, y nos desintefiquemos de nuestro cuerpo/mente.
Pase lo que pase en tu vida, intenta que la alegría tenga una protagonismo importante en tu día a día.
Todo lo que llega a tu vida, viene de Dios, y Dios es alegría.
Una alegría que sólo pretende lo mejor para ti, lo mejor para tu alma.
Dejemos pues de estar identificados con nuestro cuerpo/mente, y centremos nuestra vida, en armonizarnos con la Voluntad del Señor, en donde no hay más que alegría.
Nos ayudará en este trabajo otra afirmación.
Es una afirmación que te mantiene de buen humor, e inyecta contentamiento a tu vida.
De la alegría vengo
En la alegría vivo
Y en alegría me convertiré
Muchas gracias.
OM NAMAH SHIVAYA