2.- Styana: Apatía, Tedio, Pereza, falta de interés y entusiasmo
-La apatía: inercia física y mental, bloqueo de nuestra mente.
-Nos encontramos sin fuerza para la Práctica Espiritual.
-Nos cansamos con la búsqueda de nuestros objetivos a medida que caen en la rutina.
-¿Cómo volver a conectar con nuestras intenciones originales?
-Nuestros estados mentales y sus fluctuaciones también pueden ir en contra del desarrollo de nuestra claridad mental.
-Ese clima interior, ese estado emocional a menudo sumergido bajo nuestra conciencia cotidiana nos influye.
-Nos da pereza conectar con nosotros mismos, con nuestra vitalidad, con nuestra capacidad de acción.
-Estamos inmersos en un saco de ideas fijas que nos dan seguridad, esa falsa seguridad en la que vive el ego, y perdemos de vista la amplitud del horizonte en el que trascurre la vida.
-Es una especie de letargo para la mente que no está dispuesta a luchar por conseguir esos objetivos deseables y nobles de los que hablan los Maestros Verdaderos.
-Si pudiéramos visualizar la torre de seguridades en la que vivimos, contemplar nítidamente los cimientos de esa guarida del ego, nos daríamos cuenta de que la vida fluye en otro sitio, que la vida es inmensamente más amplia, y que en la intemperie, lejos de las falsas seguridades, se vive muy bien.
-Si tenemos un problema que nos ocupa mentalmente sería quizás necesario ejercitar primero la relajación, a través de la respiración y una asana de descanso, como savasana (echados boca arriba con brazos y piernas semiabiertas). De esa forma bajaremos la intensidad del discurso mental.
-Esta práctica: respirar conscientemente durante unos minutos y adoptar esta postura aporta paz, lo que nos permite conectar mejor con el origen de la apatía, e ir ganando fuerza para traspasarla.
OM NAMAH SHIVAYA