Satsang de la semana
Lo que nos entrega el maestro
Enseñanzas de Amma, compartidas por Ânand
Lo que nos entrega el Maestro
*Pregunta: Se dice que el Guru rompe el hueso mirándolo. La Madre lo mira y este se rompe. La tortuga los rompe, sólo recordando a los huevos. ¿Qué tipo de Maestro necesitamos, alguien cerca o alguien que está lejos nuestro? ¿El discípulo tiene el derecho de elegir a su Maestro? He leído en libros de Amma que los discípulos que estaban en el Himalaya recibían el dharsan de Amma y sus consejos. Se dice que necesitamos una mente preparada para recibir los mensajes del Maestro.
*La presencia del Maestro está siempre disponible para el discípulo, pero dependerá de la sintonía del discípulo con el Maestro.
*Esta cercanía interna con el Maestro es lo que hace que el Maestro lo acepte como tal.
*Si estamos en armonía interna con el Maestro, aunque el Maestro esté lejos, con toda seguridad la conexión se realizará.
*Lo primero que tenemos que descartar es el: me gusta o no me gusta.
-Descartar el : quiero o no quiero.
*El Maestro da las instrucciones y Él se ocupa de todo nuestro desarrollo espiritual.
*No podemos ser egoístas.
*Podemos ver a la luna, quien refleja el sol.
*Cuando tenemos la actitud correcta percibimos todo lo que el Maestro quiere darnos.
*Tenemos que ser un cero, con respecto al ego.
*Dejar de lado lo que me gusta y lo que no me gusta.
*Historia: Dos hijos en el cumpleaños del padre, y uno que quería que el padre le mostrara más afecto, le compró un regalo muy caro, pero... ¿con qué dinero? Con la tarjeta de crédito del padre.
*Esto es lo que nosotros hacemos, y todo lo que nos ocurre es por la Gracia Divina.
*A veces decimos: yo lo hice, pero no es así, lo haces por la Gracia Divina.
*Por nuestros propios esfuerzos, no logramos nada, si no van acompañados de la Gracia Divina.
*Es a través de la entrega a la Divinidad que conseguimos lo que nos corresponde.
*El espíritu debe estar entregado al Maestro.
*Cuando tenemos una actitud de entrega, lo que hacemos, lo hacemos dejándolo todo a los pies del Maestro, no nos quedamos en el ego: yo hago esto, yo, yo, yo,... pues así no germina la semilla de la entrega que es la que nos hace crecer espiritualmente.
*Lo beneficioso de estar cerca del Maestro es que a través de Él aprendemos muchísimo.
*En ningún lugar aprenderemos lo que se aprende al lado de Amma.
*Necesitamos pasar por situaciones que nos muestren cuanto hemos avanzado.
*Al principio necesitamos soledad, pero si continuáramos en la soledad no avanzaríamos.
*Necesitamos vivir situaciones determinadas para crecer y evolucionar.
*Recorriendo el camino espiritual logramos estar contentos y ser ecuánimes.
*El progreso se mide reflexionando:
-¿Me comporto de manera amorosa o me enfado a menudo?
*La escrituras son como un mapa.
*El conocimiento de las escrituras es importante, pero la presencia del Maestro es más importante todavía.
RESUMEN
¿Qué es lo que nos entrega el Maestro?
La respuesta sería: el Maestro nos entrega todo.
El Maestro nos lo da todo.
Pero el tema no está en lo que el Maestro nos entrega.
La cosa está en que es lo que nosotros aceptamos de lo que el Maestro nos da o de lo que nos quiere entregar.
En cada uno de nosotros, el Maestro no ve a Juan, a Pedro, a Rosa, a Cinta, o a Felipe, que es con lo que estamos identificados, con este cuerpo, con este nombre, con esta vida.
Nosotros estamos identificados con lo que somos, con lo que pensamos, con lo que nos gusta, con lo que no nos gusta.
Pero el Maestro ve toda nuestra existencia en cada uno de nosotros.
El Maestro ve que hemos disfrutado de un cuerpo humano, cientos, miles o millones de veces, y todo lo que ha ocurrido en nuestras encarnaciones, aunque en ellas haya habido o hayamos pasado por otros reinos, como el vegetal o animal.
El Maestro ve a nuestra alma, y en ella está todo registrado desde el inicio.
Nuestra alma o el aura que la acompaña tiene registrados todos los movimientos desde el momento que Dios la creó.
Y esto es lo que Amma ve.
Pero nosotros vivimos de acuerdo a lo que en este momento podemos ver con nuestros ojos, y tocar con nuestras manos.
Esta semana estuvieron en el ashram 2 empresarios, a los que invité a comer. Ya sabían que nosotros comemos vegetariano, y la comida les gustó; pero los comentarios son inevitables:
¿Y vosotros no coméis nada de carne? ¿Pescado, tampoco coméis nada?
No, le respondí de procedencia animal sólo comemos huevos y leche y sus derivados.
Vaya, pues no sabéis lo que os perdéis.
Uno de los dos me conoce desde hace años, el otro era la primera vez que lo veía, y le dije con la mejor de mis sonrisas que era un ex-empresario y que en aquellos tiempos, en ocasiones hacía viajes de varios kilómetros para llegar a un restaurante determinado, para comer un buen entrecot, o unas costillitas de cordero a la brasa, o una excelente mariscada, acompañado de un vino de tal añada, o de un cava brut de tal marca, por lo que si sabía lo que perdía, pero que esto lo dejas de tomar cuando desde dentro sientes que no es ninguna pérdida, al contrario, te sientes mejor dejándolo de comer.
No podría acostumbrarme nunca a no comer carne y pescado, me gusta demasiado Ânand, lo siento.
No pasa nada Diego, cada cual toma las decisiones que cree son las mejores par él en cada momento.
Esto es lo que nos ocurre con lo que el Maestro desea entregarnos; muchas veces lo rechazamos porque no queremos renunciar a lo que nos gusta, o vivir aquello que no nos gusta.
Por este motivo Amma nos habla así:
“Lo primero que tenemos que rechazar es el: me gusta o no me gusta, descartar el quiero o no quiero”.
“El Maestro da las instrucciones y Él se encarga de todo nuestro desarrollo espiritual”.
“No podemos ser egoístas”.
“Podemos ver la luna, que refleja el Sol”.
“Cuando tenemos la actitud correcta de entrega percibimos todo lo que el Maestro quiere darnos”.
“Tenemos que ser un cero con respecto al ego, y dejar de lado lo que me gusta y lo que no me gusta”.
“El espíritu debe estar entregado al Maestro”.
“Cuando tenemos una actitud de entrega lo que hacemos, lo hacemos dejándolo todo a los pies del Maestro, no nos quedamos con el ego, yo hago esto, yo, yo, yo..., pues entonces no germina la semilla de la entrega, que es la que nos hace crecer espiritualmente”.
El Maestro, en este caso Amma, ve nuestra alma, y la quiere liberar, y no sólo la quiere liberar, sino que sabe como sacarla de su confinamiento.
Pero tiene que ir con sumo cuidado, para que nuestros gustos y aversiones no le cierren la puerta a cal y canto, y ya no nos pueda entregar los regalos que nos tiene preparados con Su amor puro.
A veces Amma nos quiere entregar más, mucho más, pero nosotros le decimos: para, para, mi ego no acepta tanta Luz, con menos me conformo.
Y es que lo verdaderamente importante que Amma nos da, no es aquello que le gusta al ego: como una sonrisa que nos llega al corazón, un dharsan especial, una caricia, una mirada amorosa. Este amor de Madre Divina es el que nos prepara para recibir y aceptar los regalos del Guru, que son los que verdaderamente importan, y le dan buenos mordiscos al ego.
Como las situaciones que nos crea con otras personas, en las que tenemos que renunciar a lo que nos gusta y a lo que no nos gusta.
En las que tienes que renunciar a tu propia naturaleza.
En este caso nuestro trabajo estaría en aceptar estos regalos que Amma nos entrega, aún y sintiendo dolor, e intentar vivir y soportar este dolor que produce el dintel del escultor divino, con los golpes que le da a tu ego, puliendo sus impurezas, sin dejar que el dolor te lleve al sufrimiento, y aceptar el regalo que Amma te da sin rechazarlo.
Es por este motivo que Amma nos pide entrega, pues sin un mínimo de entrega rechazamos lo que Amma nos quiere entregar, bien queriendo hacer las cosas a nuestra manera, y no de la manera que Ella te propone, bien reaccionando, o bien huyendo.
¿Cómo podemos conseguir la entrega que nos permita no rechazar lo que Amma nos quiere dar, sin tener que huir?
Veamos lo que nos dice Amma:
“Si estamos en armonía interna con el Maestro, aunque el Maestro esté lejos, con toda seguridad la conexión se realizará”.
“La presencia del Maestro siempre está disponible para el discípulo, pero dependerá de la sintonía del discípulo con el Maestro”.
“Esta cercanía interna con el Maestro es lo que hace que el Maestro lo acepte”.
“Por nuestros propios esfuerzos no logramos nada, si no van acompañados de la Gracia Divina”.
“Es a través de la entrega a la Divinidad que conseguimos lo que nos corresponde”.
“Los beneficios de estar cerca del Maestro es que a través de Él aprendemos muchísimo”.
“En ningún lugar aprendemos lo que se aprende al lado de Amma”.
“Necesitamos pasar por situaciones que nos muestren cuanto hemos avanzado”.
“Al principio necesitamos soledad, pero si continuáramos en la soledad no avanzaríamos”.
“Necesitamos vivir situaciones determinadas para crecer y evolucionar”.
“En el camino espiritual logramos la ecuanimidad y el contentamiento”.
“El progreso se mide reflexionando: ¿me comporto de manera amorosa, o me enfado a menudo?”.
“Las escrituras son como un mapa”.
“El conocimiento de las escrituras es importante, pero la presencia del Maestro es más importante todavía”.
Las escrituras, y los libros de calidad espiritual es bueno leerlos, pero es más importante todavía, nos dice Amma la presencia del Maestro.
En ningún lugar podemos aprender lo que se aprende al lado del Maestro, nos dice Amma.
Y estar al lado del Maestro, o de Amma no significa estar necesariamente al lado de su cuerpo físico.
Lo importante es estar en armonía con Su Voluntad.
Y esta armonía proviene de una actitud de vida.
Esta armonía proviene de una actitud de servicio.
A través de esta actitud vamos consiguiendo entrega. La entrega necesaria para ir aceptando los regalos que Amma hace llegar a tu vida.
Cuando Amma dice que al principio necesitamos soledad, pero no debemos continuar estancados ahí, se refiere a que Ella nos lleva de la mano y va al compás de lo que podamos digerir, o lo que es lo mismo nos trata con caricias, nos trata con carantoñas, pero si ya es el momento para trabajar, hay que hacerlo y aplicarse, pues nos dice bien claro que necesitamos vivir determinadas situaciones para poder crecer y evolucionar.
Lo cierto es que Amma nos coge a cada uno de la mano, y nos va conduciendo de acuerdo a nuestro estado de conciencia. Y si en un momento determinado cree que te ha de entregar un regalo, aunque no lo aceptes, lo dejará en tus manos, para que cuando seas capaz lo abras y veas su contenido total, y no sólo que veas su contenido, sino que lo vivas.
Un regalo que Amma haya decidido entregarte no lo puedes rechazar, porque lo deja en tu vida, tanto si te gusta, como si no te gusta, para que lo disfrutes cuando tu decidas.
El progreso nos dice Amma se mide desde la reflexión:
¿Estoy huraño?
¿Lo estoy mucho tiempo del día o de la semana?
¿Estoy amoroso?
Lo estoy desde el corazón, no fingiéndolo.
En todos los casos mejor que decidas abrir el regalo que Amma te ha entregado y lo vivas.
Sólo desde la aceptación de lo que Amma te entrega serás capaz de llegar a un estado de contentamiento, a un estado ecuánime.
OM NAMAH SHIVAYA