22-23 Marzo, Kozhikode, Kerala – Bharata Yatra 2017

Después del éxito del programa en Kozhikode, el grupo hizo las maletas  y se dirigió a Coimbatore,  última parada  del tercer tramo de la gira por India.

El ashram de Kozhikode desbordaba de amor a la llegada de Amma. Muchos devotos estaban ahí para saludarla con los mantras “Om Amriteshwaryai Namaha” en sus labios y “Sinkari Melam” en el trasfondo. Una pura sensación de devoción inundaba el ambiente.

Amma se dirigió al estrado y sirvió prasad a todos los que habían venido a recibirla y a su grupo. Cuando todos hubieron recibido sus platos, Amma propuso una sesión de preguntas y respuestas, en la que trató de la importancia de una práctica espiritual constante y disciplinada y el papel que juega esa práctica en la continuidad del aspirante en la senda de la espiritualidad.

Al día siguiente, el primer programa. Entre las autoridades que daban a Amma la bienvenida a la ciudad, estaba el famoso arqueólogo K.K. Muhammed, antiguo Director Regional (Norte) para la inspección arqueológica de India, que ha excavado más de cien templos y es un feroz defensor del templo de Sri Rama en Ayodhya. En su discurso dijo: “Cuando veo aquí a personas de distintas nacionalidades asistiendo a este programa, veo que Amma está divulgando su mensaje de humanismo más allá de las fronteras de  países y religiones. Solo hay humanismo en la mente de Amma.
12 Marzo 2017, Amritapuri Ashram

Amma vino a compartir una meditación vespertina en la sala de bhajans con los visitantes y residentes del ashram. Aunque la mayoría de la gente ya estaba meditando antes de la llegada de Amma, el efecto de su presencia fue inconfundible, una vez que se sentó, cruzó las piernas y cerró los ojos. Toda la sala se llenó de una quietud tangible que permitió a los devotos profundizar en su interior.

Después de la meditación, Amma preguntó si alguien tenía algo que preguntar. Un hombre levantó la mano: “Amma he oído  que algunos maestros realizados llevan a cabo alguna acción (karma) para conservar su cuerpo. ¿Qué haces tú para conservar este cuerpo?”

Amma respondió:

“La autorrealización y el cuerpo no tienen conexión. Saber que el Ser significa ver a otros como tu propio Ser, que otros gocen como tu propio gozo, que otros penen como tu propio dolor. Cuando metes tu dedo en el ojo, estás consolando tanto al dedo como al ojo. Esa será tu actitud.

Perdonar el error y amar a todo el mundo, eso es la realización. La experiencia del dolor de otros como tuya, perdonar con amor y compasión, ese es el estado de realización. Como el espejo que refleja sin apegos, será tu experiencia de las emociones de otros  sin apegarte a ellas. Nadie es diferente de tí, como un millar de tarros reflejan el sol, que es un único sol a pesar de sus mil reflejos.”
19 Marzo, Coimbatore, Tamil Nadu – Bharata Yatra 2017

Los terrenos de la Amrita Vidyalayam de Coimbatore estaban repletos de asistentes a la fiesta anual de Brahmasthanam de Amma. La multitud  abarrotaba todo el espacio desde el estrado hasta la parte trasera de la escuela. Una ligera llovizna refrescaba el ambiente de la tarde del calor del día, mientras los devotos esperaban la llegada de Amma.

La música de la banda escolar señaló la entrada de Amma. Fue recibida hasta el estrado por una fila de niños pequeños en traje tradicional, bandejas de flores y lámparas encendidas. Swamini Pramananda y Swami Siddha Bohdananda del ashram Poorna Vidya estaban ahí para honrarla. Siva Janana Priyanba de Sarada Math engalanó a Amma con una guirnalda. Después de los discursos de las autoridades locales, Amma regaló saris  al grupo de autoayuda de Coimbatore. Después continuó cantando bhajans, un sátsang, meditación y una puja en lengua Tamil por la paz del mundo, antes de comenzar el darshan.
7 Marzo, Bangalore, Karnataka – Bharata Yatra 2017

En una noche lluviosa llena de relámpagos y truenos en Bangalore, Amma recién llegada de Mysore se puso a servir prasad  a su grupo y a los voluntarios locales. Preguntó si alguien tenía algo que decir. Un devoto del grupo alzó la mano y Amma le pasó el micrófono. Él empezó a leer una oración de gracias y gratitud, reconociendo el duro trabajo de todos los que contribuyen a cada programa. A los que llegan de lejos, a los anfitriones de Amma en cada ciudad, a los que gestionan todo el equipo, a los cocineros, a los transportistas, a todos los que cobntribuyen a que cada programa sea un éxito. Fue una oración reconfortante que todos disfrutaron. 

Actitud de gratitud

Cuando le tradujeron la oración, Amma sonrió y comenzó a dar su respuesta. “Tu actitud es muy inspiradora. Es muy importante tener la actitud de un principiante y respetar a todo el mundo.  El principiante tiene tres cualidades cruciales por naturaleza: sradha, paciencia y entusiasmo. Con estas cualidades, os inclinaréis ante todos de forma natural y así seréis humildes. Tener la actitud de un principiante significa encarnar estas tres cualidades. (sradha, paciencia y entusiasmo) Cuando te conviertes en cero te conviertes en un héroe.

 “Debemos intentar cultivar una actitud de gratitud. Eso nos ayudará a conocer la gracia de Dios. Amma reza para que esta actitud crezca más y más en vosotros.
El sábado 18 de marzo plantamos el tercer Bosque Sagrado Govinda en Marugán, una localidad en la provincia de Segovia.

Fue una actividad organizada por Greenfriends (movimiento creado por Amma para la preservación y la protección del medio ambiente) además del ayuntamiento de Marugán. Colaboraron también con donaciones la Fundación Caja Rural de Segovia y el vivero El Ejidillo de Valdesimonte, también de Segovia.

El lugar que fue elegido para la plantación fue una finca que hace muchos años fue utilizada como huerta, por lo que se trataba de una tierra muy adecuada para plantar. Cuenta con una  superficie de 1,7Ha y hace 3 años el ayuntamiento plantó nogales y otros árboles. Al estar la finca situada al lado de un arroyo se eligieron especies de árboles adecuadas: alisos, alamos, sauces, fresnos, entre otras…
El Devi Baba de la noche anterior había terminado a las 3 de la madrugada. Como la Madre solía comprobar que todos los devotos tuvieran un lugar dónde dormir y una alfombrilla o manta sobre la que echarse, eran ya un poco más de las 4 cuando, por fin, se retiró a su habitación.

Al día siguiente, Amma mandó llamar a unos cuantos devotos occidentales, los cuales se apresuraron a ir ante la presencia de la Madre. Uno de ellos quería saber cuál era el mejor camino espiritual para la gente de occidente.

Amma: El camino del amor, conocido también como camino de la devoción, es el más adecuado para los hijos de Occidente. Por supuesto, ésta es una afirmación general. La sociedad occidental está organizada de tal manera que, desde la tierna infancia, sus miembros son intelectuales y tienen un enfoque intelectual hacia todo. Éste es el resultado de su “moderna” educación. Se alimentan con todo tipo de información sobre el mundo empírico y el énfasis recae en la ciencia y la tecnología. Por eso, sus mentes analíticas están bien desarrolladas pero sus corazones están secos. En la mayoría de los casos, los corazones de los occidentales no llegan a desarrollarse por completo y son imperfectos. La cabeza es grande, pero el corazón está encogido y seco”

Devoto: ¿Por qué es así?

Amma: La norma social que prevalece prepara el terreno para que el corazón se seque. Los niños reciben las primeras lecciones de amor de sus madres. Pero, en la sociedad occidental, los papeles del padre y la madre se confunden. Las madres se convierten en padres y, así, pierden la cualidad del amor maternal. No sienten un verdadero amor por sus hijos. Otro factor es la inestabilidad de la vida matrimonial. La relación esposo-esposa y madre-padre es muy frágil y débil. Un niño que vive en una situación así, no puede ser cariñoso, porque esos niños ni siquiera aprenden las lecciones de amor más elementales. Es evidente que no se puede enseñar amor como se enseña a leer y escribir. Lo que la Madre quieres decir es que no se crean las circunstancias adecuadas para que ellos puedan desarrollar el amor en sus vidas. Crecen rodeados de conflictos, discusiones, riñas, odio, peleas y, finalmente, viven la separación de sus padres. Nunca experimentan el amor, que es lo que se supone que tienen que aprender del amor mutuo entre su padre y su madre. Los padres son los dos gurús que los niños ven desde que nacen hasta que entran en contacto con el mundo. Si no se siembra la semilla del amor en el hogar, ésta no puede brotar ni florecer.

El camino de Bhakti enseña amor. En primer lugar, desarrolláis un amor que está dirigido únicamente hacia Dios. Cuando ese amor se convierte en el centro de vuestra vida y las prácticas devocionales ganan en intensidad, vuestra visión cambia. Llegáis a comprender que Dios habita en vosotros mismos. A medida que esta experiencia se fortalece, el amor que hay en vosotros también crece, hasta que os convertís en Eso. El amor que hay en vuestro interior se expande y abarca al Universo entero con todos sus seres. Os convertís en la personificación del amor y ese amor se lleva consigo la sequedad de vuestro interior. Ese amor es la mejor cura que existe para cualquier bloqueo emocional y sentimiento negativo. Por lo tanto, la Madre cree que el camino del amor es el más conveniente para los buscadores occidentales.

Una de las mujeres occidentales asintió a las palabras de Amma: “Lo que la Madre nos recomienda es, sin duda, el camino perfecto para los occidentales. Sé, por experiencia propia, cuánto dolor y tensión hay dentro de mí y qué poco amor. En nuestro esfuerzo por imitar a los hombres, las mujeres occidentales hemos perdido nuestra feminidad esencial y esto es muy triste. Lo que necesitamos es una vida basada en el amor y la paciencia.”

Amma: La Madre estaba a punto de decir que otra cualidad que falta en la sociedad occidental es la paciencia. Hijos, una madre debe tener mucha paciencia para criar a sus retoños. Una madre debe modelar en la práctica el carácter del niño, pues las primeras lecciones de amor y paciencia las aprende a través de su madre. Pero ella no puede limitarse a hablar de amor y paciencia esperando que su hijo o hija adopte estas cualidades. Es imposible. Tiene que ser un ejemplo de amor y paciencia practicando estas cualidades en el trato con su

Un niño puede ser muy testarudo e intransigente, por supuesto. Pero ésa es la naturaleza de la mayoría de los niños, ya que su mente no ha alcanzado su pleno desarrollo. Son muy egoístas y tercos porque sólo se preocupan de sus propias necesidades. Aunque resulte admisible en ellos, ya que no va contra la naturaleza y sus leyes, resulta muy perjudicial que una madre sea terca e impaciente, pues creará un infierno. La madre debe ser paciente, tan paciente como la Tierra.

El padre está tan involucrado en criar a sus hijos como la madre. Un padre también debe tener paciencia. Cuando la pierde, el niño deja de tener una vida confiada e inocente y lo más probable es que llegue a ser impaciente y testarudo, ya que nunca supo qué significaba tener paciencia ni nadie le enseñó de qué se trataba. Socialmente, lo pasarán mal. Sus amigos no tendrán paciencia con ellos. Tampoco pueden pretender que sus novios o novias la tengan. La sociedad no va a ser paciente con un chico o chica impaciente. Los niños no tienen otra oportunidad de aprender paciencia y amor si no aprenden estas cualidades de sus padres. Si la madre es paciente y cariñosa con sus hijos, ellos también crecerán siendo pacientes y cariñosos. Pero si la madre no lo es, los hijos tampoco lo serán porque no sabrán qué significa ser paciente y cariñoso, y no podemos culparles por ello.

Los niños expresan lo que se les enseña y lo que han experimentado al crecer. Por ello, sed muy cuidadosos y prudentes por el bien de vuestros hijos. Tened cuidado con lo que decís. Tened cuidado con lo que hacéis, porque cada palabra que pronunciáis y cada acción que realizáis dejan una profunda huella en la mente y en el corazón de vuestros hijos, pues es lo primero que ven y escuchan. Son las primeras huellas que permanecen indelebles en sus mentes. La madre es la primera persona con la que el niño entra en contacto. Después, viene el padre. Y luego, los hermanos y hermanas mayores. Las otras relaciones llegan más tarde. Por eso, controlad bien vuestra mente delante de vuestros hijos. Cread un buen ambiente hogareño en el que puedan crecer. Si no, tendréis muchos problemas en el futuro.

Devoto: Amma, entonces, ¿estás diciendo que la vida familiar es algo que no puede tomar a la ligera, que no es algo que simplemente ocurre en el transcurso de nuestras vidas? ¿Deberíamos considerarla como una variedad de tapas?

Amma: Hijos, a la Madre no le gusta usar la palabra “tapas” porque asusta a muchos hijos occidentales. Creen que “tapas” implica una tortura física y mental. Temen que haciendo tapas van a perder todos sus deseos, y no quieren que eso suceda. Quieren disfrutar de la vida. El único problema es que su idea de “disfrutar de la vida” es equivocada. Disfrutar realmente de la vida consiste en estar relajado, no en estar en tensión. Sin embargo, muchas personas, no sólo de Occidente sino también de Oriente, están muy tensas casi todo el tiempo. Los hombres no son capaces de pasar un rato apacible con sus mujeres e hijos porque están más preocupados con su trabajo, su negocio, su posición social y lo que los demás van a pensar o a decir de ellos. Siempre están preocupados por esto o por lo otro. Quieren una casa nueva, un coche nuevo, un televisor o una nueva relación. Alguien que está inmerso en la vida mundana siempre desea algo nuevo porque está harto y aburrido de lo viejo. Nada de lo que tiene le satisface. Piensa que las cosas nuevas le traerán felicidad. Siempre fija su atención en lo que no tiene y vive en el pasado o en el futuro, pero nunca en el presente, sin dejar de perseguir todo lo que desea. Sigue adquiriendo cosas y poseyéndolas. No tiene tiempo para disfrutar, para relajarse y para vivir en el presente. Por eso, al final, se derrumba. Esto es lo que ocurre a la mayoría de la gente en la llamada “sociedad moderna”, tanto en Occidente como en Oriente.

Una familia no es un simple grupo de personas que viven juntas. Este “grupo” puede aprender a entender muchas cosas. Es otro tipo de gurukula (la familia del Gurú). Así como el Gurú espiritual trata a sus discípulos como a sus propios hijos, en este caso, el padre y la madre son los gurús y sus hijos son sus discípulos. En la gurukula existe un vínculo muy fuerte entre el Gurú y el discípulo. El maestro es como un padre o una madre para el discípulo. Por eso, no hay nada malo en comparar la vida familiar con una gurukula. En la antigüedad, en la residencia del Gurú, si este no estaba casado, a veces, realizaba el papel de padre y madre para sus discípulos. Pero si tenía una esposa, era ella la madre de los discípulos del Gurú, colmándolos de paciencia y amor, mientras el Gurú se encargaba de las enseñanzas y la disciplina. Así ocurría en las antiguas gurukulas de la India, en las que el maestro llevaba una vida normal.

En la mayoría de las familias actuales, hay un padre y una madre. Si tienen una visión adecuada de la vida familiar y de la vida en general, pueden desempeñar sus papeles correctamente. La madre puede intentar inculcar a su hijo virtudes como el amor y la paciencia, mientras que el padre puede impedir, mediante su cariño, que el niño cause daño a la sociedad, a su familia y a sí mismo. El padre puede enseñarle a obedecer y a respetar a los demás. En algunos casos, un padre soltero hace tanto de padre como de madre. Es posible, si se intenta. En cualquier caso, lo padres son los primeros en sentar el ejemplo, en mostrar a sus hijos cómo quieren que sean. Si no se pone un buen ejemplo, es importante educar a los hijos correctamente. Un padre también puede ser una buena madre y viceversa, pero resulta imposible lograr este equilibrio a no ser que uno de ellos realice la sadhana adecuada.

Por eso, la casa familiar no debería ser un lugar en el que un grupo de personas vivan juntas en conflicto, siempre peleándose y discutiendo. Tampoco es un lugar donde sólo se vaya a comer y a dormir, distinguiendo entre vida y disfrute. Eso hace que la vida familiar sea un infierno y destrozará vuestra personalidad. Una vida familiar así es la muerte y quien la vive no es más que un cadáver. Este tipo de familia es como una cárcel en las que sus ocupantes no tienen contacto personal; se limitan a estar ahí, uno al lado del otro. Sin embargo, podéis transformar vuestra familia en un refugio y vuestra casa en un hogar, en una morada de dicha y felicidad, en un lugar donde reinen la paz y el amor. Es evidente que esto requiere esfuerzo y, por ello, puede considerarse una variedad de sadhana. Está bien si deseáis llamarlo tapas, si eso os ayuda a verlo como algo importante.

Nadie quiere ser desdichado, nadie quiere sufrir. Si es posible, la gente quiere ser feliz en todo momento. Lo que ocurre es que, a menudo, el camino que eligen para conseguir este objetivo no es el apropiado. La forma en la que vivimos en la actualidad sólo nos traerá más angustia y dolor. El problema sois vosotros; el problema está en vuestro interior, no fuera. Se de verdad queréis disfrutar de la vida, probad el camino de la disciplina mental y a ver qué pasa. Esforzarse o hacer tapas no está mal, si eso ayuda a ser más felices. Por supuesto que queréis disfrutar de la vida; nadie desea sufrir. Pero recordad que ello depende de cómo viváis la vida.

Una (griham) casa es una ashram o una ermita. De ahí nació la palabra grihastasrami (propietario de una casa). Un griham se puede convertir en una ashramam. Un ashram es un lugar en que la gente dedica todo si tiempo a recordar a Dios, prestando un servicio desinteresado y desarrollando cualidades como el amor, la paciencia y el respeto por los demás. Esas personas realizan prácticas espirituales para conseguir ver la unidad en la diversidad. En primer lugar, llenan su corazón de amor y, después, hagan lo que hagan o vayan donde vayan, lo expresan en todo lo que hacen. Son capaces de ver la belleza y armonía en todas partes. Esto es lo que se pretende que sea una vida en un ashram. La vida familiar también puede ser así. De hecho, antes, en la antigüedad, era así. Si ellos lo consiguieron, nosotros también. Por eso, a un devoto que sigue con su vida seglar se le denomina grihasthasrami, alguien que vive en su propia casa dentro de un ashram. Esta persona se esfuerza por alcanzar el objetivo supremo, la felicidad, mientras sigue viviendo en su casa con su mujer e hijos. Si lo intentáis de verdad, lo conseguiréis. Un verdadero grihasthasrami es aquél que, externamente lleva una vida familiar e, internamente, una vida de sannyasin.

En una ocasión, un sannyasin viajaba en tren. Había muchos pasajeros en el mismo compartimento y todos tenían bastante equipaje. Al percatarse de que el sannyasin sólo llevaba una bolsa de tela llena de objetos, uno de los pasajeros dijo: “Nosotros somos gente de mundo. Tenemos muchas posesiones. Pero tú también tienes una bolsa llena de objetos. ¿Existe alguna diferencia entre tú y yo, aparte del color de nuestra ropa?” El sannyasin sonrió, pero no dijo nada. Unos minutos más tarde, el tren cruzaba un puente sobre un río. De repente, sonriendo abiertamente, el sannyasin cogió la bolsa de tela y algunas otras cosas que llevaba consigo y las tiró por la ventana al río. Con la misma expresión en la cara, el sannyasin se volvió hacia el pasajero y le preguntó: “Querido hermano, ¿eres capaz de hacer eso?” El pasajero exclamó: “¡Cómo! ¿Qué dices? Todos nuestros objetos de valor están en las bolsas. ¿Cómo vamos a tirarlas?” El sannyasin sonrió y respondió: “Yo también llevaba lo que tú llamas mis objetos de valor en este hatillo. Sin embargo, he renunciado a ellos sin sentir dolor ni apego, mientras que tú eres incapaz de hacerlo porque estás apegado a ellos. Esa es la diferencia que hay entre tú y yo.” Al darse cuenta de su impertinencia, el pasajero bajó la cabeza y no dijo ni una palabra más

Por otro lado, es posible que un miembro de familia no sea capaz de renunciar a las cosas con tanta facilidad como un sannyasin, pero debería intentar apaciguar su mente. La mente de un miembro de familia suele estar ocupada con los problemas que lo abordan desde cualquier dirección. Anda siempre preocupado por asuntos personales, por las quejas de su esposa, las necesidades de sus hijos, las exigencias sociales, etc. No está tranquilo. Tanto interna como externamente, corre de un lado para otro, deambulando de aquí para allá, hablando, discutiendo, calculando y resolviendo, riñendo y peleando, hasta que, al final, se hunde cada vez más. La Madre sabe que es muy difícil superar esos problemas que provocan un ruido ensordecedor tanto en la cabeza como en la mente. Pero no es imposible aprender a mantener el silencio interior. La mayoría de nuestros antiguos maestros eran miembros de familia. Ellos lo consiguieron y también eran seres humanos. Así que, si lo hicieron, nosotros también podemos. Si tuvieron el poder para conseguirlo, nosotros también lo tenemos.

Más tarde todos juntos cantaron Amritanandamayi:

No dejamos de saludar
A Mata Amritanandamayi, diosa inmortal.
Ojalá te alces como el amanecer en mi mente interior,
¡Oh Mata amritanandamyi!
 
Oh, Madre. No sé cómo cantar
Tus alabanzas inmaculadas.
Oh, Tú, que eres pura, tus palabras sagradas
Son néctar para tus hijos
Como lo son las refrescantes nubes a la vida.
 
Oh, Tú, que no tienes apegos, que concedes el destino,
Encantadora universal, sigue con tu danza,
Oh, Tú, que eres de ambrosía, gracias al resplandor
De tu gentil sonrisa
Mi corazón desborda dulce néctar.
Dissabte, 13 Mai 2017 19:57

13/05/17 DESAPEGO Y SUFRIMIENTO

DESAPEGO Y SUFRIMIENTO

Pregunta: ¿Cómo encontrar paz y serenidad?

Amma: Para lograr paz y serenidad tenemos que modificar, en primer lugar, nuestra forma de pensar errónea. Actualmente creemos que la paz nos viene “de fuera”, y esa falsa concepción nos hace buscarla en el exterior, en los objetos mundanos. Pero, de hecho, la paz verdadera procede del interior. Dentro de vosotros está la fuente eterna de paz. Hay que comprender, primero, esta verdad para ponerse a trabajar y llegar hasta ella.

                Para conseguir esa paz, la mente tiene que estar en soledad. No se trata de sentarse, sin más, en medio de un paraje natural. Un entorno así no es más que una pequeña ayuda para conseguir la auténtica soledad. La soledad verdadera es la soledad de la mente, lo que significa concentrar en un solo objetivo la mente. Si vuestra mente está alterada, ni siquiera un bello lugar os dará paz. Por tanto, hay que intentar apaciguar progresivamente la mente, controlándola e impidiendo que persiga cualquier objeto o idea

Pregunta: Amma, cuando vemos el sufrimiento del mundo, algunas veces pensamos que Dios es cruel.

Amma: “Eso es lo que dice todo el mundo. Nuestro sufrimiento está creado por nuestras propias acciones. Somos nosotros los únicos responsables. Dios no es de ningún modo responsable. Es necesario poseer algo de discernimiento para comprenderlo. Supón que te encolerizas con tu esposa y la abofeteas. Después de eso, tu mente se verá alterada. Te sientes muy triste por haber golpeado a tu esposa y, ciertamente, sufres. Pero, ¿de dónde procede la ira? Procede de ti, ¿no es cierto? ¿Por qué te has encolerizado? Tal vez porque ella no te ha traído el café a la hora. Tu deseo de beber café a la hora acostumbrada no se ha satisfecho, y te has alterado. Toda esta situación es debida a tu apego al café. Cuando el deseo no se satisface en el momento esperado, pierdes tu capacidad de discernimiento y tu equilibrio mental.

Hijos míos, Dios no es cruel. Él es la misma compasión. ¿Acaso alguien llama verdaderamente a Dios? Nadie dice: “¡Oh! Señor, sólo te quiero a ti”. Más bien, decimos: “¡Oh! Señor, dame esto, dame aquello”. Es así como rezamos. Sólo queremos satisfacer nuestros deseos. No rezamos para que venga a residir en nuestros corazones

Hijos míos, el sufrimiento surge cuando el deseo está presente. Incluso antes de la Creación, Él había dicho: “Estaréis siempre en la dicha divina si seguís este camino. Si tomáis el otro camino, sólo conseguiréis sufrimiento.” Hijos míos, habéis caído en el foso por haber desobedecido estas palabras, y ahora decía que habéis sido empujados. Dios nos había hablado de dos caminos. De vosotros depende la elección. Si queréis alcanzar la dicha eterna e infinita, el camino hacia Dios es accesible, pero hay que trabajar duro. Si sólo estáis interesados en las alegrías momentáneas, entonces tenéis abierto el camino del mundo. También deberéis realizar esfuerzos, pero menos que para alcanzar a Dios.

Pregunta: ¿Por qué hay dos caminos? ¿No bastaría con el camino de la felicidad? ¿Por qué Dios ha introducido la vía del sufrimiento?

Amma: ¿Qué quieres decir? ¿Que basta con la felicidad y no es necesario el sufrimiento? Todo está presente en la Creación. Hasta una pequeña aguja y una brizna de hierba tienen su razón de ser. Nada es innecesario. Observa atentamente. Es el sufrimiento el que ayuda a nuestro crecimiento. Los seres humanos no trabajan ni progresan si no hay sufrimiento. El miedo al sufrimiento y al dolor nos hace trabajar

Es vuestra mente la que crea el sufrimiento, no Dios. La Creación debe incluirlo todo, tanto lo bueno como lo malo. Lo uno sin lo otro no constituyen la Creación. Nuestro deber es actuar comprendiendo el lugar y la importancia de cada objeto

Dios nos ha dado instrucciones claras sobre la vía del gozo y la del sufrimiento. ¿Acaso no podemos evitar caer en los mismos errores, escuchando sus consejos?

Hijos míos, es como si preguntáramos por qué Dios ha creado el fuego, que es peligroso.

Hay un niño y hay un fuego. Un niño puede quemarse con el fuego. Pero Dios ha dado al niño una madre para advertirle de los peligros de jugar con el fuego. No podemos decir que el fuego no debería existir a causa de los numerosos niños que habitan en el mundo. ¿Cómo haríamos para cocinar nuestra comida?

. Vuestra madre os ha dicho muchas veces que el fuego quema y os ha advertido para que no os acerquéis a él. Pero si la desobedecéis, ¿de quién es la culpa?
En Marzo de 1995; Amma y los residentes del ashram regresaron a Amritapuri tras la ceremonia de consagración del templo Brahmasthanam, en Dehli. El viaje duró una semana. Durante el viaje, Amma procuró que no se interrumpieran las prácticas espirituales de sus hijos. Se viajaba todo el día pero, al atardecer, todo el grupo se detenía cerca de un río o un lago. Después de darse un baño, todos se congregaban alrededor de Amma para meditar y cantar los Bhajans.

En la tarde del tercer día, fue imposible encontrar un río o un estanque, a pesar de todos los esfuerzos. Cuando Amma vio que todos estaban inquietos por la dificultad de darse un baño aquella tarde, dijo: “¡Vamos a nadar, hijos míos! No nos privaremos. Hay bastante agua en algún sitio.” Amma hizo detener el autobús y preguntó a las gentes del lugar, que contestaron: “Por aquí no hay ningún lago o río, y el agua es escasa.” Cuando le dieron esta respuesta, Amma los consoló a todos diciendo: “No, no, la mente de Amma dice que, no muy lejos de aquí, hay agua. ¡Vamos a preguntar de nuevo!” Los brahmacharis se separaron para preguntar a los habitantes. De pronto, uno de ellos se acordó: “¡Ah, sí! Hay una cantera no lejos de aquí. Explotó y se fue llenando de agua hasta formar un pequeño lago.”

Amma y el grupo siguieron sus indicaciones. Después de un corto paseo, llegaron a la orilla de dos pequeños lagos de agua clara. Todos nadaron con Amma llenos de alegría. Luego se congregaron a su alrededor para meditar y se unieron a ella para cantar Bhajans. Entonces Amma entró en éxtasis. Alzó los brazos hacia el cielo y gritó: “¡Venid rápido, queridos hijos! ¡Venid corriendo!” Todos permanecieron un momento en silencio, inmersos en gozo. Después, un francés llamado Daniel rompió el profundo silencio: “Amma, sentimos una gran alegría cuando nadamos contigo. Es como si hubiéramos ido al Himalaya y nos bañáramos en el Ganges. Cuando se anuló la visita de Amma a Rishikesh, nos sentimos muy decepcionados al pensar que no tendríamos ocasión de bañarnos en el Ganges. Ahora ya no tenemos ese sentimiento.”

Amma: Hijos míos, los templos y las aguas sagradas, permiten que la gente se acerque a la espiritualidad, hasta que encuentren a un SatGuru. El que se entrega a un SatGuru no necesita ir en busca de un río sagrado. Un mahatma perfecto es la confluencia de todos los ríos santos. Entregarse totalmente a un maestro equivale a bañarse en todos los ríos sagrados.

Se dice que allí donde está el Gurú, está Benarés y que el agua utilizada para lavarle los pies es el Ganges. Ciertamente, el agua que toca los pies de un mahatma es “el agua del Ganges”. El agua de la Pada Puja está llena de la energía del mahatma. Si uno bebe el agua de la pada puja no necesita ir a Benarés ni a ningún otro lugar. No hay nada que purifique más que el agua de la pada puja. Ella es el auténtico Ganges.

Pregunta: Amma, ¿de dónde viene la santidad y pureza de los ríos sagrados?

Amma: Todos los ríos nacen en las montañas. No hay diferencia entre las aguas que fluyen por los diferentes ríos. ¿Qué diferencia al Ganges de los otros ríos? ¿Cómo explicar que nadie coge ninguna enfermedad cuando se baña en el Ganges?

Muchos mahatmas se bañan en ríos como el Narmada y el Ganges y numerosos ascetas meditan en sus orillas. Eso es lo que santifica a esos ríos sagrados. Un río se vuelve sagrado cuando los mahatmas se bañan en él. Sus puras vibraciones se disuelven en el agua. Bañarse en compañía de un mahatma, es como si se probase un poco de la dicha de Brahman. Bañarse en presencia de un mahatma equivale a bañarse en el Ganges.

No obstante, la fe es el fundamento de todo. Con amor y fe, cualquier cosa se convierte en sagrada. ¿Conocéis la historia de Pakkanar? Una vez, un brahmin que se disponía a ir a Benarés invitó a Pakkanar a que lo acompañara. Tenía previsto bañarse en el Ganges y recibir el Darshan del Señor Vishvanath de Benarés. Sin embargo, Pakkanar no podía partir en aquellos momentos y le dijo: “Puesto que tú vas a ir de todas formas, te estaré muy agradecido si sumerges mi bastón de peregrino en el Ganges sagrado y me lo traes.” EL brahmin aceptó y se llevó el bastón. Pero, una vez en Benarés, mientras se bañaba en el Ganges, la corriente se llevó el bastón. A su regreso, el brahmin explicó a Pakkanar cómo había perdido su bastón. Pakkanar le dijo: “No te preocupes, voy a recuperarlo.” Se sumergió entonces en una laguna que se encontraba cerca de su casa y ¡salió a la superficie con el mismo bastón que había confiado al mismo brahmin!” A continuación le dijo a éste: “Si tienes fe, cualquier agua puede convertirse en agua del Ganges sagrado; y si no tienes fe, el Ganges y el Yamuna no son más que unos ríos corrientes.”

Pregunta: Así, cuando Amma está con nosotros, todas las aguas sagradas están presentes. Algunos, sin embargo, han ido a Rishikesh y a Haridwar.

Amma: La entrega de ellos es limitada. Una vez que se conoce a un mahatma, hay que tener una fe inocente y entregarse a él como un niño. Si alguien va en busca de agua sagrada después de haber encontrado a un maestro espiritual, significa que todavía no tiene una fe firme. Podéis obtenerlo todo de un SatGuru, no hay necesidad de ir a ninguna parte en busca de algo.

¿Conocéis la historia de Ghanesa? Un día, Ghanesa y Muruga vieron que su madre Devi Parvati (La Madre Divina) sostenía en su mano un fruto maravilloso. Ambos fueron a pedírselo. La Madre Divina prometió entregar el fruto al primero que lograra dar la vuelta al mundo. Muruga montó sobre su pavo y partió veloz. Pero Ghanesa sabía que el Universo moraba dentro de sus divinos padres y se quedó. Después de dar una vuelta alrededor de sus padres, pidió el fruto a su madre. La diosa se lo dio con alegría. El que sabía que la creación entera estaba contenida en el interior de Shiva y de Parvati, recibió el fruto de la inmortalidad. Lo mismo sucede cuando os refugiáis en un SatGuru, todo se os da. En los pies sagrados del gurú están contenidas todas las divinidades, todos los mundos. Si se tiene fe en un maestro espiritual, nada nos tendría que hacer dudar de esa fe. Debería ser inmutable y constante.

No siempre resulta fácil vivir cerca de Amma. Es posible que tengáis que afrontar penalidades o superar alguna prueba. Cuando os encontréis con alguna de estas dificultades menores, tal vez tengáis ganas de marcharos. Unos desearán ir a Benarés, otros a Haridwar o al Himalaya para dedicarse a la práctica espiritual. Pero, hijos míos, no tenéis conciencia de la forma en que un mahatma trabaja en vosotros. No lo comprendéis y estáis desconcertados. Amma opera desde el interior, muy profundamente, sin hacer ninguna incisión exterior. Opera y crea profundas transformaciones. De forma sutil, suprime vuestras vasanas. No lo veis, pero es posible que tenga que eliminar muchas cosas. Amma hace salir el pus de las heridas que lleváis en vosotros y ese proceso, a veces, resulta doloroso, Hay muchas cosas que extraer. Es como un imán moviéndose bajo una mesa sobre la que estarían dispuestas partículas de hierro. Vosotros no veis más que las partículas porque el imán permanece oculto. Cuando se desplaza, las partículas que están sobre la mesa se mueven y cambian de posición, sin que comprendáis ni por qué ni cómo. Al no entender este doloroso proceso, tenéis posiblemente ganas de huir.

En presencia de un mahatma, vuestras vasanas se extinguen rápidamente. Cuando hayan desaparecido todas, se produce la realización.

Hijos míos, si hacéis práctica espiritual por vuestra cuenta, seguramente no lograréis eliminar el Prarabdha karma de 100 vidas. Pero si permanecéis junto a un SatGuru y realizáis práctica espiritual, es posible eliminar el Prarabdha karma de 1000 vidas.

Hacer práctica espiritual de acuerdo con las instrucciones de un SatGuru, es como cavar un pequeño agujero cerca de un río; seguro que encontráis agua. Mientras que practicar por vuestra cuenta, sin la guía de un maestro, es como cavar en una roca.

El discípulo que está totalmente entregado a su maestro no lo abandonará nunca. Ni siquiera la idea de marcharse, le pasará por la mente. Aunque apareciera Dios, el discípulo preferirá permanecer con el maestro antes que seguir a Dios; entre Dios y el maestro, elegirá al maestro.

Había una vez un gran sabio que tenía numerosos discípulos. Un día, los convocó a todos, y les dijo: “A causa de los frutos de mis acciones pasadas, este cuerpo va a sufrir muy pronto la lepra y la ceguera. Me voy a marchar a vivir a Benarés. ¿Alguno de vosotros está dispuesto a venir y atenderme cuando este cuerpo caiga enfermo?”

Los discípulos se miraros entre sí; sus rostros expresaban recogimiento y temor. Nadie se atrevía a decir nada. Entonces, el más joven de los discípulos se levantó y dijo: “Venerado maestro, iré con usted”.

Pero el maestro contestó: “Hijo, eres demasiado joven y aun no sabes lo que significa servir”.

El joven replicó: “¡Respetado maestro, estoy dispuesto a ir, pues lo único que deseo es acompañaros!” El maestro se esforzó en disuadirlo, pero el discípulo no cedió dada la intensidad de su deseo, Por tanto, el maestro y su joven discípulo viajaron hasta Benarés. Poco después de su llegada, el maestro contrajo la terrible enfermedad y perdió la vista. Noche y día, el discípulo sirvió a su maestro con devoción. Nunca lo dejaba solo, salvo para ir a mendigar comida o lavar las ropas del maestro. Se ocupaba contantemente de él y hacía todo lo que estuviera en sus manos para satisfacer hasta las mínimas necesidades.

A pesar de la devoción inquebrantable del joven y de su completa dedicación, el maestro le reñía a menudo con severidad y le acusaba de faltas que no había cometido. Le reprendía diciéndole que las ropas estaban mal lavadas o que la comida estaba podrida. En otras ocasiones, sin embargo, se mostraba tierno y amoroso, diciéndole que se estaba esforzando mucho.

Un día se le apareció al discípulo el Señor Shiva y le dijo: “Estoy muy contento por tu devoción y abnegación hacia el maestro, puedes pedirme un favor.” Pero el discípulo no quería pedir nada sin recibir, primero, la autorización del maestro. Entonces, se fue corriendo a buscar al maestro y le dijo: “Mi gurú reverenciado, ¿puedo pedir al Señor Shiva que cure vuestra enfermedad?”

El maestro respondió encolerizado: “¡Tú no eres mi discípulo, sino mi enemigo! ¿Deseas que sufra todavía más en mis próximas vidas? ¿No deseas que se consuma mi prarabdha karma ahora y me libere en esta vida?”

EL discípulo regresó todo triste y le dijo a Shiva: “Señor, perdóname, pero mi maestro no deja que te pida la única cosa que deseo. Por lo que a mí respecta, no deseo nada en particular.”

Así pasaron los años y el discípulo, encarnación de la devoción, continuó sirviendo al maestro con el mismo amor e inquebrantable entrega. Un día, en que se dirigía al ciudad para mendigar comida, el Señor Vishnu se le apareció y le dijo: “Hijo mío, estoy muy contento por tu devoción y abnegación hacia tu maestro. Estoy dispuesto a concederte cualquier favor. Sé que no le pediste nada al Señor Shiva, pero espero que no me decepciones también a mí.”

El discípulo preguntó al Señor: “¿Cómo puedes estar contento de mi servicio, si yo no te he servido, ni siquiera me he acordado de ti?” El Señor Vishnu le sonrió y contestó: “No hay diferencia entre el maestro y Dios. Dios y el Gurú no son más que uno. Lo que me complace es ver cómo sirves a tu maestro.”

De nuevo, el discípulo fue a ver a su maestro para que le permitiera solicitar una gracia. El maestro le contestó: “Si tú deseas algo, pídelo, pero no pidas nada para mí.” EL discípulo regresó al lado de Vishnu y le dijo: “¡Oh, Señor, dame más conocimiento y sabiduría para que pueda servir mejor a mi maestro, de acuerdo con sus deseos! Por mi ignorancia, no llego a comprender qué es lo que realmente desea. ¡Oh, Señor, concédeme el conocimiento necesario para servir a mi maestro como mejor convenga!” Su petición complació al Señor Vishnu y afirmó: “¡Que así sea¡”

Cuando el discípulo regresó a su maestro, éste le preguntó qué favor había pedido al Señor. El discípulo le explicó lo sucedido.

De pronto, todos los síntomas de la lepra desaparecieron del cuerpo del maestro y recuperó la vista. Sonrió a su discípulo y lo estrechó entre sus brazos.

El mahatma se había causado voluntariamente la lepra y la ceguera para poner a prueba la devoción y la abnegación del más joven de sus discípulos. Establecido en la Verdad Suprema, no tenía que consumir ningún Prarabdha karma. Bendijo a su discípulo concediéndole el conocimiento supremo y dijo: “Estoy muy satisfecho de tu devoción. Los discípulos que sirven a su maestro con tanta devoción y abnegación están a salvo de cualquier peligro. Que todos tus discípulos y sus discípulos futuros sean benditos gracias a ti.”

Hijos mío, actualmente sois como bebés; jugáis y reís con Amma disfrutando de su compañía. Pero no comprendéis lo que hace Amma, ni quién es realmente. Vosotros no veis más que a la Madre exterior; y casi nadie se interesa por la Conciencia Suprema, por la Madre interior. No anheláis conocer al Ser que habita dentro de vosotros, no deseáis realmente a la verdadera Madre.

Cuando un bebé llora, su madre le pone un chupete en la boca y el bebé se entretiene con él. Pero en realidad, un bebé hambriento lo que necesita es leche. Algunos bebés se entretienen con un chupete que no da leche. El mundo exterior es como un chupete. Vosotros, hijos, os contentáis con reír y jugar. Os divertís con los objetos sensoriales. Amma va allí donde estáis jugando y os pone la comida en la boca. Pero estáis tan absortos en vuestro juego, que no apreciáis el valor del alimento que Amma os da. No progresaréis si os contentáis con visitar los templos y lugares santos.

Hijos mío, cultivad la inocencia. La inocencia y la pureza de vuestro corazón os salvarán. Todo es posible con la fe y la confianza de un niño.
Dissabte, 01 abril 2017 10:57

01-04-2017 Apego al Guru – 1ª parte

*Creen más en su imaginación que en las palabras de Amma.

*No puede ser que una flor vuele.

*Nuestra imaginación, es una creación de nuestra mente.

*Se imaginan una flor, su olor y su fragancia, y se envuelven en ella, es la actitud con nuestra mente.

*Pero no es lo que hacemos con las palabras de Amma, que no somos capaces de sentirlas en nuestro corazón, y ver qué es lo que Amma quiere que hagamos.

*Amma es como un río que siempre está fluyendo, va por todo el mundo esparciendo Su mensaje de amor y de paz.

*El río nunca está en el mismo lugar.

*La naturaleza de Amma, adentro y afuera es como la de un río, que siempre fluye.

*Fluye como el Ganges, el Guru es como el Ganges, aunque lo puede parecer, el agua nunca está estancada.

*El agua del Ganges aunque la pongas en una botella durante años, siempre tiene efectos curativos.

*Lo mismo el Guru.

*El Guru nunca se queda estancado, el discípulo sí.

*Si pasan mucho tiempo juntos, surge el apego a su forma física. Este Guru es mío.

*Pero, no, el Guru no se queda en el mismo lugar, fluye como el río para que no se produzca el apego al Guru, para el crecimiento espiritual del discípulo, y para que no tenga este apego y egoísmo.

*Amma no tiene un verdadero apego al ashram, aunque tiene apego a los hijos que están en el ashram.

*Amma hoy está aquí y mañana en otro lugar.

*Amma está apegada a sus hijos, porque ellos tienen un amor, una entrega por Amma, y se siente atraída.

*Aunque Amma no está apegada al ashram, esta es una tierra sagrada. Es un sitio sagrado.

*Ha habido muchas grandes almas aquí, que han conseguido el samadhi en este lugar.

*El amor a Sus hijos, es por el amor y la entrega de estos, especialmente a los que viven aquí, porque han dejado todo atrás.

*Amma ama a todos, pero de manera especial a los que viven aquí,

*Amma siente que todos aquí tienen entrega.

*Aunque deben preguntarse cada uno, pues a veces Amma siente dolor porque bramacharis que están fuera del ashram no vengan a verla cuando regresa de un tour. Y Amma los quiere ver.

*Y lo mismo siente hacia todos los residentes y devotos que vienen al ashram.

*Nosotros debemos desarrollar: Amor y Entrega.

*Mientras estuvo fuera Amma encargó a pandits dar charlas, y al swami que se quedó aquí le dejó encargado que dijera a la gente que vive fuera del ashram que acudiera; pero muchos no lo hicieron, y deberían ser obedientes, pues es como si la misma Amma se lo dijera.

*El apego al Guru, nos ayuda a deshacer los apegos al mundo.

RESUMEN DE ANAND

¿Cuántos son los apegos que tenemos a las cosas, y a los seres en el mundo?

¿Cuál es el resultado de los apegos al mundo?

Todos los sabemos: sufrimiento.

Amma termina la primera parte de este satsang con este mensaje:

“El apego al Guru nos ayuda a deshacer los apegos al mundo”.

Lo que Amma nos está diciendo es que cambiemos de apegos, que vayamos adquiriendo conciencia de que los apegos al mundo no nos aportarán la paz, que supone sentir apego hacia el Guru.

Se trata de evolucionar, de no quedarnos estancados en los mensajes que nos ha transmitido el mundo, e ir aplicando los que nos va diciendo Amma.

“El Guru nunca se queda estancado, el discípulo sí”.

“Debemos desarrollar amor y entrega”.

Nosotros somos los que nos quedamos estancados, porque no sabemos desarrollar el amor y la entrega que el Guru nos pide, a pesar de que lo tenemos en grandes cantidades en nuestro interior. La imaginación nos aparta de nuestro potencial interno.

Así nos lo dice Amma:

“Creen más en su imaginación que en las palabras de Amma”.

“Nuestra imaginación es una creación de la mente”.

“No somos capaces de sentir las palabras de Amma en nuestro corazón, y ver qué es lo que Amma quiere de nosotros”.

El no poder hacer lo que nosotros imaginamos, que es lo que creemos más conveniente para nosotros, es lo que nos impide conectar con nuestro verdadero potencial.

Tenemos miedo.

El miedo es el que nos impide sentir las palabras de Amma en nuestro corazón y poderlas seguir.

Si traspasamos este miedo, el apego al Guru se irá potenciando paulatinamente.

Estamos conduciendo el vehículo de nuestra vida, y nos resistimos a ceder el volante del vehículo para que lo conduzca el Guru.

Tenemos miedo de estrellarnos.

Ceder el volante para que conduzca el Guru nuestra vida, es apego al Guru, y este apego se come el miedo a estrellarnos.

Hay épocas, o situaciones en nuestra vida más delicados que otros, en los que nos parece como si estuviéramos pasando por un alambre, el alambre de un trapecio, nos sentimos como un trapecista que anda por lo alto pasando por el alambre y tenemos miedo de caernos al vacío.

Pues hay que traspasar este miedo con apego al Guru.

El Guru es la red, y aunque te caigas no pasa nada, te puedes levantar y continuar andando.

El apego al Guru nos da la fuerza necesaria para plantarle cara al miedo.

No hay nadie que tenga más miedo que el propio miedo, y el apego al Guru nos da la fuerza para mirar de frente al miedo y preguntarle: ¿qué haces aquí? ¿Qué quieres de mí?

Y entonces entra la paz, porque el miedo se va.

El apego al Guru lo vamos desarrollando escuchando Sus palabras, intentando seguirlas; así es como se van integrando en el corazón.

Para ello necesitamos tener una absoluta confianza en el Guru.

El Guru nos da muchas muestras de que le podemos ceder el volante, de que podemos confiar en Él.

Me explicaba una persona en el ashram esta semana, que había tomado una decisión que le había dejado sin dinero, estaba en números rojos, y claro tenía el agobio, sentía miedo por lo que le pudiera pasar si no le salía trabajo, esto ocurría después de que ya se había endeudado. La situación no le dejaba dormir. Estuvo una noche sin conciliar el sueño.

Y al día siguiente le llamaron ofreciéndole el trabajo que necesitaba, y que además a él le gustaba. Un trabajo bien remunerado, y para empezar justo en el momento adecuado.

Lo cual indica que la decisión que tomó estaba bien tomada.

La confianza en el Guru la podemos practicar de muchas maneras, en el caso que nos ocupa, una podría ser esta: Al tomar la decisión de endeudarme, hablar sinceramente, desde el corazón con el Guru, y decirle: Amma, Madre, tomo esta decisión porque lo necesito, o porque creo que es la más conveniente para mí; voy a actuar para salirme de ella, ayúdame por favor.

Y no quedarse estático, tocar todas las teclas que tenemos a nuestro alcance, con la confianza de que el Guru enviará a nuestra vida aquello que necesitamos, y que puede ser algo que nos guste o algo que no nos guste.

En la aceptación de lo que el Guru nos envía, encontraremos la paz interna.

Esto es apego al Guru.

Amma nos ama a todos, y nos ama a todos por igual, aunque hay que tener presente que el amor de la Madre Divina, puede fluir con mayor facilidad hacia aquellos que se muestran más apegados al Guru.

Así lo expresa Amma:

“Amma ama a todos, y de manera especial a los que viven en el ashram y han dejado todo atrás”.

“A veces Amma siente dolor porque los bramacharis que viven fuera no vienen a verla”.

“Amma no está apegada dl ashram, pero siente apego por sus hijos”.

“Amma es como un río que siempre está fluyendo, va por todo el mundo esparciendo su mensaje de paz y de amor”.

Aquellos que viven en uno de sus ashrams, y dejan todo atrás, aquellos que viven lejos y tienen apego al Guru, tienen apego a Amma, les es más fácil superar las dificultades kármicas, que la propia vida les presenta para que vivan determinadas experiencias.

Hay una persona de las que viven lejos de Amma, que hace mucho seva, seva que comparte con su trabajo laboral, un trabajo laboral que no le gusta, y lleva años pidiéndole a Amma que le dé otro empleo. Es un trabajo que le deja mucho espacio libre para él, y muy bien remunerado, pero no le gusta el tener que realizarlo.

Ha estudiado para liberarse de este trabajo, y poder ejercer otras actividades diferentes, pero finalmente se ha dado cuenta que aunque no le guste, Amma desea que siga ahí, y obedece.

Y como su apego al Guru es tan fuerte, ya ha logrado atender la parte laboral con una aceptación que le evita sufrimiento. 

El apego al Guru le conecta con la paz inherente en él, que es la misma que está en cada uno de nosotros.

Amma es un río que fluye continuamente, deseando que nos bañemos en las divinas aguas de Su fluir, deseando mostrarnos el apego que siente hacia todos nosotros, Sus hijos, y para ello nos pide que dejemos que sea Ella quien conduzca nuestra vida.

Cedámosle el volante, tocando las teclas que nos corresponden y trabajándonos una absoluta confianza y una total aceptación.

Hace unos meses se dio el caso de una persona que se quería divorciar de su esposa, se sentía divorciado ya, para nada aceptaba la relación tal como funcionaba, de hecho los dos son buscadores de la Verdad, cada uno en su nivel, por lo que llevan años trabajando la relación matrimonial para quemar karma mutuo. 

Este hombre envió la pregunta a una persona de Amritapuri con la foto para que se le preguntara a Amma si era correcta la decisión de separarse.

Su actitud estaba en aceptar lo que Amma dijera.

La pregunta no pudo llegar a Amma.

Esto ocurre a veces cuando se le quiere preguntar a Amma, y Ella crea las circunstancias para que esto no ocurra, para que no le llegue la pregunta. Y en este caso hay que interpretar que esta es la verdadera respuesta de Amma.

Como esta persona tiene un gran apego al Guru, aceptó el que no pudiera llegar la pregunta a Amma como la Voluntad de Amma, y continuó.

Pero ocurrieron otras circunstancias en su relación con Amma que propiciaron que esta misma persona, le hiciera una pregunta más personal a Amma, y esta pregunta si le llegó a Amma y Amma la respondió. 

A través de esta respuesta de Amma, ha habido cambios de actitud en su pareja, a consecuencia de los cuales ha comprendido que Amma quiere que continúen juntos para que sigan solventando experiencias de sus almas en el pasado.

Es un claro ejemplo de que la confianza y la aceptación en lo que el Guru quiere que vivas te hacer mantener en la actitud correcta.

Son estos ejemplos que nos ayudan a despertar y potenciar el apego al Guru.

Como el de un empresario que ya lleva algunos años queriendo dejar la empresa, tiene empresa y familia, y le pregunta a Amma a veces:

¿Amma, puedo dejar la empresa ya?

No es todavía el momento, hijo, le dice Amma.

Y él sigue con entusiasmo, porque Amma se lo dice.

Son los ejemplos que nos muestran adonde nos lleva el apego al Guru.

El apego al Guru nos libera de los apegos a las cosas y personas del mundo.

El apego al Guru nos va liberando de sufrimiento.

OM NAMAH SHIVA

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