Después de la charla de Swamiji, Amma llegó al escenario y saludó a un auditorio rebosante de gente. Swamiji realizó la Paduka Puja de Amma, mientras muchos jóvenes del ashram recitaban himnos védicos.

Paduka Puja de Amma


Paduka Puja de Amma


Paduka Puja de Amma


Los jóvenes del ashram recitando himnos védicos.

Amma dijo para la ocasión que sabía lo difícil que había sido para muchos devotos venir a ver a Amma durante la pandemia “Amma sabe que muchos de sus hijos se sienten tristes, porque este año, como ha ocurrido en los dos últimos años no han podido estar con Amma. Pero, Amma conoce y siente vuestra devoción y amor. Siempre estáis en el pensamiento de Amma, en mi corazón, en mi recuerdo y en mis oraciones.”

Dijo que ella sabe que muchos de ellos querían regalarle algo a Amma cuando celebraron sus propios cumpleaños. Amma sugirió tres cosas que podían hacer: “Poned una semilla en un poco de tierra con un poco de estiércol y envolvedla con papel. Enterrad estas bolas con semillas en un lugar donde puedan brotar, cerca de vuestra casa o en un bosque. Cuantos más retoños podáis plantar, mejor. Este será el mayor regalo que podéis hacer a Amma.

La segunda cosa que Amma pidió fue que todos limpien un kilómetro de tierra en sus cumpleaños.  “Barred la zona y dejadla libre de cualquier basura.” Los hijos del ashram de Amma pueden enseñaros como gestionar los residuos para que entendáis lo que se puede hacer con los desechos.

La tercera petición era en relación a compartir vehículos. Amma dijo que lleva quince años pidiendo a los devotos que se comprometan en esta práctica. “Intentad compartir vuestro coche con al menos otras dos personas cuando vayáis a trabajar. Pero por vuestra seguridad, aseguraos de que no sean desconocidos. Podéis también compartir vuestro vehículo cuando viajéis a un templo o al ashram. Amma señaló que compartir vehículo ahorra dinero, combustible, reduce la contaminación medioambiental y gradualmente reduce el tráfico e incluso accidentes de carretera.

Amma continuó. “Muchas personas carecen de dinero para comprar su medicación para enfermedades como diabetes o hipertensión, especialmente los jubilados. En una familia de cuatro miembros, al menos tres tienen alguna enfermedad que requiere medicación. Durante la pandemia del Covid mucha gente no tenía trabajo.  Por esto, una mayoría de familias no podían adquirir su medicación habitual y a causa de ello  algunos padecieron ataques e incluso algunos murieron. Un solo día sin medicación puede conducir a sucesos irreparables. Amma conoció muchos de estos casos durante la pandemia. El dinero ahorrado de compartir vehículos puede ser utilizado para ayudar a comprar medicinas para estas personas.”

 Amma señaló que en otros países muchos devotos han establecido sistemas de compartir vehículos, pero esto aún no funciona entre los devotos de India. “Intentemos todos convertirnos en ejemplo para que otros nos imiten” dijo. “Todos podemos convertirnos en el cambio que deseamos para el mundo.”

“Todo está cambiando. En este mundo cambiante, abracemos lo que no cambia.”

Amma continuó: “Amma sabe que todos sus hijos intentan realizar acciones desinteresadas. Alimentan a los pobres de acuerdo con sus posibilidades. Intentan mantener limpio su entorno. Pero Amma cree que aún se puede hacer más, como por ejemplo utilizar nuestros cumpleaños como un día de servicio al mundo.”

En su satsang, Amma también habló de la importancia de recordar que somos dependientes de la Naturaleza y como a través de la Naturaleza Dios nos bendice. “Cuando vivimos en este mundo y disfrutamos de las delicias y bondades de la naturaleza, hay un error que consciente o inconscientemente los humanos tienden a cometer. Olvidan que han recibido todo  como un regalo del poder supremo, de Dios. Olvidan la verdad de la Naturaleza, el reflejo de Dios. Olvidan el invencible poder de la Naturaleza. Y sobre todo olvidamos la verdad del amor, que es el fundamento de la vida. Podemos olvidar a Dios y a la Naturaleza en el ajetreo de la vida cotidiana. Pero nunca debemos olvidar el amor. Porque solo si tenemos amor verdadero, Dios y la Naturaleza ofrecerán sus bendiciones sobre nosotros. Pero hoy en día, toda la raza humana está atrapada en la amnesia. El hombre ha olvidado todo lo que hace que la vida sea saludable y hermosa.”

Amma también nos recordó que es imposible obtener el 100% de felicidad en este mundo. “Ningún objeto puede darnos la felicidad permanente,” dijo. “Todo depende de nuestra mente. No hagas que tu vida dependa de las palabras de los demás. Reside en tu propio Ser. El amigo de hoy puede ser el enemigo de mañana. Un hombre que hoy es bueno puede volverse malvado mañana. Todo cambia. En este mundo cambiante, abraza lo que no cambia. No eres la persona que ves externamente en el espejo. Mira hacia tu interior y utiliza el espejo interno para limpiar tus impurezas. Esto es lo que nuestra filosofía nos ha enseñado.”

 Amma continuó: “Todos queremos vivir una vida relativamente feliz y en paz. Pero para que esto sea así, debemos seguir la voluntad de Dios y ajustar nuestra vida de acuerdo a esa voluntad. Solo así podemos fluir en armonía con esa poderosa corriente. Si ignoramos esto, podemos pasar nuestra vida hundiéndonos y ascendiendo en las aguas. Lo que elegimos hacer con nuestras vidas es nuestra propia decisión.”

Amma también habló de la importancia del shraddha, -conciencia alerta y atención al detalle-. “Cualquier acción realizada con conciencia se transforma en meditación. Encendemos una linterna presionando un botón. Del mismo modo, presionando el botón del shraddha podemos encender la luz de la conciencia. El shraddha que conocemos solo significa “tened cuidado”; no contiene el elemento de la conciencia”.

 Amma continuó. “Una vez que comprendamos los principios espirituales, aceptaremos que todo en el mundo material tiene su propia naturaleza, como el día y la noche, la lluvia y el sol, el invierno y el verano. Al deseo le seguirá el dolor. Todos tenemos gustos y aversiones, de ahí que esas cosas ocurran. Cuando llegan los problemas, podemos pensar que son la consecuencia de acciones realizadas en una vida anterior o que nos avisan a tener cuidado ante cierta dificultad futura, o de que algo más grande ha sido providencialmente eliminado. Debemos aprender a sujetarnos a Dios con mayor fuerza.”    

Amma habló también acerca del amor y de cómo es necesario expandirse y crecer en el amor.  “La mayoría de nosotros estamos en el escalón más bajo del amor.  Amma no dice que este amor no sea amor, pero no debemos permanecer ahí.  Debemos subir a los peldaños superiores del amor, paso a paso, hasta alcanzar la cima más alta del amor. Este es el amor más puro. Este amor está presente en nosotros incluso ahora. Todo lo que tenemos que hacer es esforzarnos en despertarle. Que este amor despierte y se extienda a toda la humanidad como amor universal. Esta es la mayor bendición de la vida.  Deberíamos transformarnos en encarnaciones del amor. Cuando el amor despierta en el interior, despertarán espontáneamente la compasión, el sacrificio y la alegría. El amor encuentra belleza en toda fealdad. Cuando el amor se desborda en nuestro corazón, las flores de la paz florecen a nuestro alrededor. Cuando embellezcamos nuestros ojos con el delineador de la unidad, todas las diferencias desaparecerán.”

Amma terminó su satsang diciendo, “Hijos, que vuestros ojos se derritan por compasión. Que vuestras cabezas se inclinen con humildad. Que vuestras manos estén inmersas en el servicio al prójimo. Que vuestros pies caminen por la senda del dharma. Que vuestros oídos se abran a escuchar el dolor de los menos afortunados. Que vuestra lengua siempre pronuncie palabras amables y la verdad. Amma reza al Paramatma para que, de esta forma, las vidas de mis hijos se transformen en bendiciones para el mundo.”

Amma dirigió la meditación y las oraciones por la paz del mundo de todos los presentes y después dirigió a todos en el gozoso canto del bhajan Mata Rani.

Durante el resto del día, hasta bien avanzada la noche, miles de personas se acercaron a presentar sus ofrendas a Amma y ella dio darshan a todas y cada una de ellas.

Swamiji ofreciendo pétalos de flores durante el recitado de los 108 nombres de Amma.

Discípulos monásticos de Amma participando en la adoración.


Aum Amriteshwaryai Namah.


Arati de Amma.


Arati de Amma.


Amma bendiciendo a los devotos.


Amma dirigiendo la oración por la paz mundial: “Om Lokah Samastah Sukino   Bhavantu”.


“Todos podemos convertirnos en el cambio que deseamos para el mundo”.


“Ningun objeto puede darnos felicidad permanente”.


“Mata Rani Ki…”


…Jai!”