Con el evento a escala reducida, Amma explicó que los fondos normalmente destinados al Amritavarsham, como es habitual en su cumpleaños, serán redirigidos a los esfuerzos del Ashram para la recuperación de Wayanad. Amma ha comprometido un paquete de ayuda de 1.8 millones de dólares en apoyo a los supervivientes y como refuerzo a la resiliencia del desastre en la región.
“En lugar de guerra y conflicto sin fin, ojalá la paciencia, amor y compromiso guíen nuestras actitudes y acciones. En lugar de la oscuridad y las guerras religiosas y genocidios, escuchemos la llamada de la generosidad y compasión desde todos los ámbitos” –dijo Amma en su discurso.
“Permanezcamos atentos a abandonar el deseo de explotar a la naturaleza, ya que ello conduce a las tragedias que afectan nuestras vidas, a los que amamos, a nuestro bienestar, a todo lo que nos preocupa. Que cada uno de nosotros tienda la mano para aliviar a los que sufren y están doloridos. Y de este modo, todos encuentren paz y felicidad.”
Swami Amritaswarupananda Puri, el más veterano de los discípulos de Amma, condujo la Puja Guru Paduka, un antiguo ritual en el que los discípulos muestran su amor, reverencia y gratitud al Guru y a todo el Guru Parampara, el linaje de los maestros.
Aunque en pequeña escala, pero con un solemne telón de fondo, el Amritavarsham 71 honró a Amma con sus tradiciones anuales, tradiciones llenas de la esperanza y optimismo que pueden aportar las oraciones dichas con el corazón. El día comenzó a las cinco de la madrugada con una Homa Maha Ganapathi, una puja con oraciones para la eliminación de los obstáculos.
A esto siguió la recitación de Lalitha Sahasranama, los mil nombres de la Madre Divina en la forma de Tripura Sundari. Como principal poder del universo, este texto sagrado ofrece un retrato detallado de sus divinos atributos y cualidades.
Swami Amritaswarupananda dio satsang, mostrando su profunda devoción a la conciencia íntegra y la pura dicha que encarnó la forma de Amma en esta tierra hace setenta y un años. Tras abrazar a más de cuarenta millones de personas, incluso un cuerpo hecho del acero más potente se habría agotado hace mucho tiempo.
“Amma dice que ella fluye como un río. No se esfuerza. El nivel de conciencia de Amma significa dar. Dar, dar y dar y nunca recibir nada a cambio. No hay dador. Amma permanece como es ella y esto es amor en su más alta forma”, dijo Swamiji.
“El amor es a la vez tangible y una presencia. Y cuando se transforma en presencia es dominante. La hermosa forma de Amma es nuestra forma de meditación. Solo Amma puede cuidar su cuerpo, protegerlo. No obstante, Amma escucha las oraciones de sus hijos. Oraciones de sus hijos sinceras, amorosas, desde el corazón.”
Otra de las tradiciones de Amritavarsham es la Amritakeerti Puraskaram que desde 2001 ha honrado a personalidades eminentes por sus considerables y estimulantes contribuciones a la literatura y cultura india y conocimiento védico. Este año, Amma ha premiado al Profesor V. Madhusoodanan Nair, distinguido académico y poeta malayalí. Él mostró su gratitud a Amma.
A continuación, Amma dirigió la Mangalyasudha, las bodas masivas anuales del ashram para familias que no pueden costearse una boda. Amma empezó la tradición en 2003, para expresar su particular preocupación por los padres de las novias que a menudo se endeudaban.
Amma se ocupa de todo, incluso del patrocinio del ashram de los collares, pendientes, pulseras y anillos de boda de oro, así como de la vestimenta de las parejas. Una de las condiciones es que la familia de la novia no pague dote a la del novio. Amma en persona dirige las ceremonias.
Este año, la felicidad de las parejas y sus familias no puede expresarse con palabras. Se los abre la puerta a una nueva vida, sin que las restricciones económicas sean un obstáculo para empezar esa vida juntos.
Una de las tradiciones arraigadas desde hace más de treinta años fue iniciada por los pescadores de las aldeas cercanas a la del nacimiento de Amma. El Parayakadav Amrita Seva Sangham y todos los Karayogams (grupos de servicios sociales) de Alappad Panchayat le presentan sus respetos en una procesión sagrada.
Comienza en el templo Pariyakkadav Sree Ponnabhagavathy y llega a su punto álgido con la ofrenda a Amma de Purnakumbhan, un tarro lleno de agua decorado con hojas de mango, coco, cúrcuma y kumkum que representan abundancia y prosperidad.
Como siempre, Amma empezó a abrazar a los miles de personas llegadas a Amritapuri para celebrar su vida y experiencia, su amor y compasión. El Darshan continuó hasta la madrugada siguiente.
Entre los más queridos estaban los grupos de comunidades tribales vestidos a su manera sencilla y única y también muchos sadhus (mendigos nómadas) que mostraron tanto reverencia como felicidad al estar en los brazos de una maestra espiritual como Amma.