Satsang de Swami Dhayamritananda Puri
Om Amriteshwaryai Namah
Satsang de Swami Dhayamritananda Puri - Amritapuri, 3 de abril de 2020
Mis más humildes saludos a todos vosotros.
Me gustaría disculparme por la tardanza de esta retransmisión. No ha sido por motivos de salud física o mental. Se me pidió permanecer en cuarentena debido a las duras críticas que afirmaban que el ashram tenía escondidos a extranjeros recién llegados con el coronavirus. Primero, tuvimos que demostrar que aquí no había nadie escondido. Después de eso, fuimos al hospital a que nos hicieran pruebas, que dieron negativo, para demostrar que no teníamos el virus. El gobierno nos impuso un aislamiento de 28 días, que ha concluido esta mañana. Por eso se ha retrasado esta retransmisión. Ruego aceptéis mis disculpas.
Para empezar, me gustaría compartir el último mensaje de Amma. Hoy, Amma nos ha dicho a todos, en especial a sus devotos de todo el mundo, que nos quedemos en casa tanto como sea posible. Nos ha dicho que si deseamos hablar con alguien le llamemos por teléfono o le enviemos mensajes, en vez de quedar. Si queremos salir a comprar, utilicemos nuestros coches, nuestras bolsas de compra y llevemos mascarilla. Al terminar de comprar, volvamos a casa lo antes posible. Luego comentaré más cosas en las que Amma hoy ha querido poner especial énfasis.
En mi última retransmisión, en el último satsang, algunos no entendieron bien mi comentario sobre las fechas del tour de Amma. Mis plegarias iban dirigidas a que Amma hiciera el tour de este verano tal y como estaba previsto, y que los casos del coronavirus se redujeran en pocas semanas. No eran las palabras de Amma, era mi deseo. Le rezaba a Amma que el tour se hiciese en las fechas previstas. Sin embargo, parece que no sucederá como deseamos puesto que la voluntad de Dios o de Amma es distinta. Aunque Amma venga a América, habrá muchas restricciones para dar su darshan. Desconozco lo que ocurrirá. En cuanto se sepa algo, os informaremos a través de la página web y de Facebook.
El confinamiento ha sido muy duro para todos y algunos me han comentado cuánto les ha afectado. En todo el mundo, el 80% de los países se ha confinado. La buena noticia es que, a pesar de esto, mucha gente ha decidido dedicarse al servicio desinteresado: repartidores, personal de correos, empleados de limpieza, tiendas de alimentación, voluntarios... todos están trabajando.
Imaginad si estas personas se desmotivaran y dejaran de trabajar ¿qué pasaría? En especial, deseo agradecer la labor del personal sanitario: médicos, enfermeras y asistentes sanitarios. He oído casos en los que los médicos han donado sus mascarillas a personas con alto riesgo de contagio, como pacientes con cáncer o niños con bajo sistema de defensas, dado que el suministro de mascarillas es intermitente. Saben que contraer el virus es solo cuestión de tiempo y, con este gesto, salvan las vidas de los más vulnerables. Cumplen así con su dharma y con los principios de su profesión.
Algunos habréis visto el último vídeo en el que Amma nos habla de este tema. Amma sabe que sus hijos viven con temor al coronavirus. Amma nos dice: “Amma piensa en vosotros y reza por todos. Es momento de actuar con suma precaución y alerta. Es momento de responder con coraje, auto control y unidad. Amma sabe que sus hijos tienen miedo, pero el miedo no nos ayuda. Lo que se necesita ahora es precaución y alerta. El coraje es lo principal para superar cualquier situación. Abandonad el miedo y llenaros de coraje. El antivirus que vence este virus es el coraje. El coraje es el antivirus de nuestra mente. Si te haces amigo de Dhairya Lakshmi, la diosa del coraje, obtendrás la fuerza para afrontar y superar cualquier situación”.
Esto es lo que Amma dijo. Tan solo he tomado una parte de su mensaje. El mensaje se puede encontrar en Facebook y en todas las webs oficiales junto con su vídeo. Tan solo he mencionado una pequeña parte en la que Amma habla en especial del coraje y he decidido centrarme en esto, ya que, según ella, el coraje es el antivirus del virus. Es su antídoto.
¿Cuál es la diferencia entre el coraje y la valentía? Siempre hemos oído hablar del coraje y de la valentía, y mi intención es profundizar en la definición de coraje. El coraje implica firmeza, resistencia, fuerza, constancia, estabilidad, fortaleza, calma, serenidad, compostura, paciencia, inflexibilidad. Todas estas son definiciones de coraje o sus sinónimos.
Al hablar de la diferencia entre coraje y valentía, el segundo término se refiere en cierto sentido a la ausencia de miedo. No hay miedo a morir o el miedo es mínimo. Habréis visto alguna vez a gente en las alturas caminando por una cuerda o realizando actividades de riesgo. Esta gente, al no tener miedo o tener muy poco, pueden realizar estas acciones.
Existe una sutil diferencia entre coraje y valentía, y de eso es de lo que voy a hablar a continuación. Como he dicho, el coraje va más allá de la valentía. Es algo más complejo e incluye diferentes cualidades, entre ellas: firmeza, fuerza, constancia, fortaleza, calma, serenidad...
Amma en su mensaje habló de Dhairya Lakshmi, la Diosa del coraje, y Swamiji (Swami Amritaswarupananda Puri) dijo que Dhairya Lakshmi es la madre divina del coraje. Así pues, el coraje es una cualidad femenina, aunque se creía que era un rasgo masculino. Dhairya Lakshmi es la diosa del coraje y Lakshmi es la diosa de la prosperidad, tanto material como espiritual. La madre divina Lakshmi tiene ocho formas, todas diferentes:
La primera es Maha Lakshmi, la diosa o madre divina. La segunda es Dhana Lakshmi, la diosa de la riqueza. La tercera es Dhanya Lakshmi, la diosa de la prosperidad material y de la abundancia de la madre tierra. Gaja Lakshmi, Gaja significa elefante, pero también representa a todos los animales. Y Santhana Lakshmi, la diosa que nos da hijos o descendientes. Dhairya Lakshmi, la diosa del coraje, y Vijaya Lakshmi, la diosa de la victoria. Por último, Vidya Lakshmi, la diosa de la sabiduría, la que nos concede el conocimiento. De entre estas ocho formas de la madre divina, Amma pone énfasis en Dhairya Lakshmi, la madre del coraje, y la razón de ello queda explicada en la siguiente historia.
Había una vez un rey que era un ferviente devoto de Lakshmi Devi en sus ocho formas, Ashtalakshmi. Cada día la adoraba y le ofrendaba comida. Tal era su devoción que las diosas lo bendijeron con su visión siempre que lo necesitara. Con esta bendición, el rey pudo cumplir con todas sus obligaciones del reinado a la perfección. Su reino y habitantes disfrutaron de abundancia y prosperidad.
Un día, las ocho Lakshmis aparecieron ante el rey en un sueño y le dijeron: “Hemos decidido abandonar el reino, pero antes de partir, queremos ofrecerte un don por tu gran devoción: puedes elegir a una de nosotras para que se quede contigo”. Al día siguiente, el rey reunió a su corte y les preguntó su opinión. Un ministro dijo: “Necesitamos dinero para gestionar bien el reino. Debemos conservar a Dhana Lakshmi, la diosa de la riqueza”. Tras él, los agricultores dijeron: “¡Quedémonos con Dhanya Lakshmi, la diosa de las cosechas! Otro continuó: ¡No, necesitamos hijos para que continúen nuestra labor, conservaremos a Santhana Lakshmi!". Tras escuchar la opinión de sus súbditos, el rey hizo una adoración (puja) a las diosas. Ellas se le aparecieron y le preguntaron su decisión. El rey con suma reverencia dijo: “Deseo conservar a la diosa del coraje, Dhairya Lakshmi”. Todos querían saber el motivo de la decisión del rey, a lo que él contestó: "Aquel que posee coraje es capaz de realizar cualquier tarea y cumplir con sus responsabilidades. De nada sirve tener las bendiciones de las otras Lakshmis sin el don de la diosa del coraje". Tras la decisión del rey, el resto de Lakshmis decidieron quedarse puesto que su destino era permanecer allá donde estuviera Dhairya Lakshmi, la diosa del coraje. Todos los habitantes agradecieron recibir esa valiosa enseñanza del rey: "la buena suerte acompaña a aquellos que tienen coraje". Este es el motivo por el cual Amma pone énfasis en Dhairya Lakshmi, la diosa del coraje.
La siguiente pregunta sería: ¿Cómo logro tener coraje? En su mensaje del Covid-19, Amma dice que para tener coraje primero tenemos que ser conscientes de lo que está ocurriendo. ¿Qué hacer entonces? Tenemos que leer y aprender sobre el virus, sus síntomas, cómo se contagia y cómo evitar contagiarnos.
Otra cosa a saber es qué hacer en el caso de contraer el virus. ¿Cómo actuar? Amma dice: “Mis hijos deben seguir rigurosamente todos los consejos e instrucciones dadas por el gobierno y los organismos oficiales. Además, deben rezar intensamente con todo su corazón por la gracia divina. Nuestras abuelas solían decir: “Hay que tomar la medicina y a la vez recitar el mantra”. Del mismo modo, dadas las circunstancias, nuestro esfuerzo perseverante y la gracia divina son necesarios.
“Cada ciudadano debe aplicar el mismo grado de atención y alerta (shraddha) como si fuera un soldado en el campo de batalla”. Esto es lo que Amma dijo. Y aquí lo repito: todo el mundo debe aplicar shraddha, atención, como si fuera un soldado. Este ha sido el mensaje de casi todos los líderes mundiales. Os voy a leer el mensaje de una líder mundial, Ellen Johnson Sirleaf, ex-presidenta de Liberia y premiada con el Nobel de la Paz. En su mensaje, Ellen Johnson afirma:
"Cada ciudadano debe cumplir con su parte. Esta afirmación supuso un antes y un después en la lucha contra enfermedades en el África Occidental. Tengo fe absoluta en el incansable espíritu del ser humano. Esta misma convicción es usada por los líderes en los momentos críticos de la sociedad, haciendo que cualquier diferencia, comunitaria o religiosa, pierda fuerza frente al poder de la oración y la fe en Dios. Tenemos que resguardarnos durante las próximas semanas. Rezo por la salud y el bienestar de todos los ciudadanos, y para que todos recuerden que la verdadera esencia de la humanidad reside en el servicio a los demás”.
Podemos observar que, a pesar de que las fronteras de la mayoría de los países están cerradas, los límites mentales de muchas personas están desapareciendo ante esta lucha contra un enemigo común, el virus. La ciencia, la religión y muchas profesiones están unidas para hacer frente a este reto. Recemos para que el mundo se una en la lucha contra el hambre, la pobreza y la miseria, y así conseguir un mundo mucho mejor.
El segundo paso que tenemos que dar para reunir coraje es permanecer en calma si detectamos que tenemos cualquier síntoma del virus. Mucha gente que ha empezado a toser o a tener secreción nasal, tras consultar los síntomas en internet, han pensado que la muerte estaba llamando a su puerta. No tengáis miedo y tened en mente que tener el virus no significa que te vas a morir, tan sólo un pequeño porcentaje ha muerto. Hay que tener en cuenta que cada año muere la misma cantidad o más de gente por la gripe. Por tanto, si estamos atentos, en alerta, y si conocemos los síntomas, nos daremos cuenta de que no tenemos el virus, o si lo tenemos, por favor, mantengamos la calma y vayamos al médico.
Otra cosa que me preocupa es ver que la gente, dominada por el pánico, ha salido corriendo hacia las tiendas de alimentación. Algo que me sorprende es ver que la gente se preocupa más por su trasero que por la totalidad de su cuerpo, o por su alma. ¿Qué prisa hay en comprar papel higiénico? ¿Para qué existen las duchas o los bidets? ¿Por qué olvidamos el resto del cuerpo y nuestra alma? ¡La gente solo piensa en ir corriendo a la tienda y pelearse por un rollo de papel higiénico! Debemos comprender que tenemos que darle más importancia a nuestra alma y a nuestra mente que al cuerpo, y encontrar el equilibrio.
La tercera cualidad es el pensamiento. La mente tiene la tendencia de pensar que nos espera un futuro terrible y siempre lo pinta oscuro. Os doy unos cuantos ejemplos. Mucha gente está ahora sola en sus casas y si por ejemplo están en la ducha, algunos me han llegado a comentar que miran detrás de la cortina por si hubiera un asesino en serie. Otros están aterrorizados cayendo en depresión, por si el mercado de valores se colapsa, causando una crisis financiera. Y se han puesto a almacenar provisiones.
Debemos entender que lo que hay que reunir es coraje, en especial en nuestra alma, puesto que el coraje se origina en el alma y de ahí va a la mente. Como Krishna dice en la Bhagavad-Gita: “El alma encarnada pasa de la niñez a la juventud y luego a la vejez. De forma similar, cuando llega la muerte, el alma pasa a otro cuerpo. Pero el alma autorrealizada no se confunde ante esta transición”. Aquella alma que no está confundida se la conoce como dhairya, la que está llena de coraje. Cuando el alma pasa por diversas experiencias se la conoce como adhira, inconstante, por lo que se siente confundida por tales experiencias, por la transición.
Swami Vivekananda, un gran santo, dijo: "No hay lugar para los débiles en esta vida o en cualquier otra. La debilidad conduce a la esclavitud. La debilidad conlleva miseria tanto física como mental. La debilidad conduce a la muerte. Hay cientos de miles de microbios a nuestro alrededor que no nos afectan a menos que estemos débiles, sólo entrarán si el cuerpo los acoge. De la misma manera, quizás hay millones de microbios de miseria mental flotando a nuestro alrededor, pero no tendrán el poder de acercarse a no ser que la mente esté debilitada. Este es el gran hecho: la fortaleza es felicidad, es vida eterna; la debilidad es lucha constante y miseria, la debilidad es la muerte".
Esto es lo que Amma nos está diciendo. Este es el antídoto. Amma dice que el coraje nace de la comprensión de que somos el ser supremo. Esta comprensión espiritual nos permite adquirir coraje. Tenemos que comprender que somos hijos de Amma y que Amma está con nosotros. El coraje nace de este amor que tenemos por Amma.
Os contaré una historia para ilustrar esto. Uno de los grandes emperadores de la India, conocido como Shivaji o Chhatrapati Maharsh, adquirió una fortaleza y logró que fuera inaccesible para cualquiera de sus enemigos. Su fortaleza tenía una muralla de mármol y estaba en la cima de una montaña muy rocosa. Contenía una ciudad en ella. Nadie podía entrar o salir de la fortaleza sin el conocimiento y el permiso del guardián.
Las enormes puertas de la fortaleza se abrían solamente a la salida del sol, para que las personas que vivían a los pies de la montaña pudieran entrar. Pero tenían que salir antes de que las puertas se cerraran a la puesta del sol. Una vez las puertas se cerraban no se abrían hasta la mañana siguiente sin excepción. Solamente si el emperador Shivaji lo ordenaba.
Había una mujer llamada Hirakani, que se ganaba la vida vendiendo leche a los residentes de la fortaleza. Vivía a los pies de la montaña. Tenía unas pocas vacas que le daban la leche que ella vendía. Hirakani era madre de un pequeño bebé.Su suegra se quedaba cuidando del bebé mientras ella se iba a vender la leche. El bebé aún mamaba. La suegra era muy mayor y cuidaba del bebé con harta dificultad durante el día. El esposo de Hira (o Hirakani) trabajaba en el ejército de Shivaji el rey y la mayoría de los días estaba ocupado, dejando a Hira sola con las tareas de la casa y con el bebé. Un día, como de costumbre, Hira ordeñó las vacas y se llevó la leche a la fortaleza para venderla. Pero durante ese día en particular, tuvo que ayudar al nacimiento de un bebé de una de sus amigas que vivía dentro de la fortaleza. En esos días los bebés nacían en casa y las madres recibían ayuda por parte de otras mujeres durante el parto. Hira se entretuvo allí, y cuando inició su camino de vuelta a casa, se dio cuenta que se le había hecho tarde, que el sol estaba a punto de ponerse. Pensó: "¡Oh Dios, las puertas de la fortaleza se van a cerrar! ¿Qué voy a hacer si no logro regresar a casa a tiempo? ¿Qué le sucederá a mi hijo? ¡Mi bebé estará llorando de hambre! Tengo que correr". Se fue a la puerta y le suplicó al guardián: "Abre las puertas, tengo a mi bebé en casa, está solo". El guardián le respondió: "Lo lamento mucho, pero no puedo abrir las puertas a no ser que me lo ordene el rey. Si no lo ordena, abriré las puertas únicamente mañana por la mañana. Llevas muchos años viniendo, las normas no son nuevas para ti. Tendrías que haberte ido antes. Lo siento mucho, no puedo abrir las puertas de ninguna manera".
Hira se sentía indefensa. Todos sus pensamientos estaban volcados en su hijo, pensaba en la sonrisa de su bebé cuando se reencontrara con ella. Esa sonrisa le haría olvidar todos los problemas del día. El mismo recuerdo de esa cara sonriente ahora llorando de hambre y ansiedad por la ausencia de su madre era inaceptable para Hira. En su desesperación, Hira corrió de vuelta en la dirección de la que había venido. Estaba determinada a salir de la fortaleza. Caminó sola a lo largo de toda la muralla. Hasta llegar a un punto en particular en el que se dio cuenta de que no había muralla. Ese era el punto más alto de la montaña y justo al otro lado había un precipicio muy profundo, con arbustos llenos de espinas. Nadie pensó que fuera posible trepar por allí y acceder a la fortaleza. Por ello, no se había construido muralla en ese lugar. Hira miró hacia abajo. El sol ya se había puesto por completo. Era oscuro, Hira no veía nada más que sombras de arbustos espinosos. Pero el pensamiento de su hijo era tan intenso en su mente, que decidió saltar al otro lado ayudándose con los arbustos. Dejó las vasijas de acero en el suelo, por miedo a que cualquier ruido pudiera despertar sospecha en los soldados de alrededor. Miró en todas direcciones con mucha atención y afortunadamente no vio a ningún soldado. En un instante Hira saltó y se dejó caer hacia el otro lado de la montaña. Las espinas de los arbustos se clavaron en su piel y en sus manos, ahora ensangrentadas. Su vestido se enganchó en uno de los arbustos espinosos. Con dificultad recuperó partes de su vestido, medio roto. Sus brazos, sus piernas, su cara y todo su cuerpo se llenaron de moratones y sangraban. Aquí y allá los búhos volaban encima de su cabeza. Pero la imagen de su hijo llorando solo incrementaba su ritmo. Y en poco tiempo alcanzó el suelo. Finalmente Hira logró llegar a su casa y, como se imaginaba, su hijo estaba llorando desconsoladamente. Su suegra estaba desesperada, pues no podía entender por qué Hira no había regresado. En el momento en el que Hira llamó a su bebé y lo tomó en sus brazos, el llanto cedió. Mientras se limpiaba las heridas, Hira amamantó a su hijo con su leche. Su mente se calmó, y ambos durmieron pacíficamente. A la mañana siguiente, como de costumbre, Hira ordeñó las vacas y se dirigió a lo alto de la fortaleza para vender la leche. El guardián de las puertas era el mismo que el de la noche anterior, pues aún no se había ido. Cuando la vio no se lo podía creer: "¿No estabas dentro de la fortaleza ayer por la noche? ¿Cómo saliste?" Ella simplemente sonrió, y cuando estaba a punto de entrar, el soldado la paró y le dijo: "¿De dónde vienes?". Hira respondió: "Para serte franca, vengo de fuera". El soldado exclamó: "Es imposible. Nadie ha sido capaz de salir de esta fortaleza. Tengo que llevarte ante el emperador. Me estás mintiendo". Hira le preguntó: "¿Por qué tendría que mentirte? ¿No me ves cargando la leche? Quiero entregar esta leche. No te estoy mintiendo". Pero el guardián no estaba convencido y le dijo: "Te tengo que llevar al emperador". Cuando el rey Shivaji Maharash oyó la historia, se quedó perplejo y le dijo a Hira: "Muéstrame por donde te escapaste". Hira lo llevó a ese lugar desde el que saltó. El rey y el guardián tomaron a Hira hasta el borde del precipicio. Cuando Hira miró hacia abajo, se mareó y sintió que se iba a caer. Al ver los arbustos espinosos se le pusieron todos los pelos de punta.
Por primera vez se dio cuenta de lo peligroso que era lo que había hecho. Y le dijo al rey: "Perdóneme mi majestad, no me había dado cuenta de la profundidad de este precipicio. Fue únicamente mi instinto maternal y la necesidad de amamantar a mi hijo que lloraba hambriento, lo que me cegó de ver el peligro. Pero no te he mentido. Por ello, estoy dispuesta a aceptar cualquier castigo". El gran emperador sonrió y le dijo: "Sí, he decidido castigarte, construyendo una torre de vigilancia aquí mismo. Le voy a dar tu nombre, como ejemplo del gran coraje que solo tú has demostrado tener. Eres un ejemplo único de coraje".
Como dije anteriormente, vemos este coraje ejemplar en el amor. En el momento del amor. Lo que tenemos que comprender es que nuestro amor por Amma es lo que nos dará el coraje y el valor para caminar hacia delante. Permitamos que el amor por Amma nos empuje hacia delante en estos tiempos críticos.
Y como Amma nos ha aconsejado, por favor no salgáis afuera. Solamente para comprar lo necesario, pero no os entretengáis hablando con la gente. Utilizad vuestro auto, llevad vuestra propia mascarilla y bolsa de compra. Y cuando regreséis, poned la ropa a lavar, ducharos o limpiaros bien las manos y los pies. Estas son las mismas instrucciones que nuestros sabios y ancestros nos indicaron en el pasado. Hagámoslo así, por favor.
También podemos decir que estos días la naturaleza ha estado regocijándose, pues hay menos contaminación, menos coches, menos fábricas funcionando. La naturaleza está feliz.
También, aunque el confinamiento ha sido muy duro para algunas personas, muchos durante el confinamiento han intentado hacer todo tipo de actos beneficiosos. Ahora tenemos que establecer nuevos objetivos, roles o títulos para estas personas. Como educadores desde el hogar, organizadores o colaboradores familiares, cocineros para los ancianos, facilitadores para la prevención del virus, proveedores de necesidades básicas.
Muchos me han dicho que han recibido comunicados del departamento psiquiátrico y psicológico de su localidad: "Queridos ciudadanos, durante el período de cuarentena se considera normal hablar a las plantas, a las macetas y animales domésticos. Por favor, no nos contactéis si vuestros animales domésticos o plantas os hablan. Pero contactarnos inmediatamente si entendéis lo que os dicen y empezáis a dialogar con ellos".
Es importante seguir una disciplina, hacer mucho yoga y, como Amma siempre nos dice, el manejo del tiempo es muy importante. Caminad, haced ejercicio dentro de la casa. Si tenéis escaleras subidlas y bajadlas. Y aún más importante, nunca abandonéis vuestra práctica espiritual.
También, como decía, tenemos que recordar a aquellos que nos han estado ayudando, especialmente los doctores, enfermeras o trabajadores sanitarios.
También tenemos que recordar a aquellos que viven en constante confinamiento, incluso sin virus. Una persona que considero un gran ejemplo de confinamiento es Swamini Sri Lakshmi, la asistente personal de Amma. Día y noche está en la habitación de Amma. Casi nunca sale. Imaginémonos la cantidad de servicio que ella hace para Amma, sin el cual quizás Amma no tendría la oportunidad de salir y bendecirnos. Es por ello que me postro ante su constante servicio desinteresado y entrega los 365 días del año.
Para terminar, quisiera mencionar que ha habido diferentes predicciones. Algo muy bello que ha atraído mi atención es la aportación de un astrólogo, que afirma que el verdadero antídoto para superar el momento actual es la oración y la acción desinteresada. También dice que tenemos que ir más allá de las diferencias entre castas, religiones, género, etc. Es muy importante que recemos desinteresadamente y que nuestras acciones sean también desinteresadas. Nuestras oraciones y acciones no deberían ser solo para nuestro beneficio. ¿Por qué? Porque durante este tiempo lo que sea que hagas de forma egoísta volverá a ti con una fuerza como mínimo diez veces más intensa. Y si actúas de forma altruista, esa acción también regresará a ti de forma desinteresada. Por ello es muy importante, en este tiempo, la oración y el servicio desinteresado. Intentémoslo.
Y sigamos también los consejos que Amma nos da, permaneciendo en nuestros hogares. Por favor no os preocupéis. Amma os envía su amor. Amma está con cada uno de vosotros. Y como nos dice en su mensaje, Amma quiere que nos llenemos de coraje y avancemos con el objetivo del desinterés, la práctica espiritual, el amor y el coraje.
Lokah samastah sukhino bhavanthu
Om shanti shanti shanti
Om sri gurbyo namah hari om
PASADO 2ª PARTE
Enseñanzas de Amma, compartidas por Ânand
PASADO 2ª PARTE
Cómo podemos entender que tantísima gente muera en un solo evento?
Hay cosas que son imposibles de entender desde la mente, Amma intenta decirlo bajando a nuestro nivel, pero solo puede darnos una parte, un aspecto de toda la dimensión, y nosotros intentar entenderlo de acuerdo a nuestro alcance.
No tienen recuperación las muertes que han ocurrido, deberíamos tratar de consolar a los que lo necesitan, y pensar que es cuestión del destino. El destino viene o es el resultado de nuestras acciones presentes, de ahí la importancia de aplicar el esfuerzo correcto en el presente. No tiene ningún sentido el dormirse en los laureles, o el dar las cosas por hechas o entendidas, sino que hay que practicar el esfuerzo de manera continúa.
Las leyes kármicas no se pueden calificar de racionales: Supongamos que vamos por la carretera, conduciendo bien, pero viene un camión de frente y nos atropella. Solo nos queda aceptar la ley del karma. Estos sucesos no se pueden entender, pero se aceptan en la sociedad.
Por ejemplo: Pudiera ocurrir que en vidas anteriores los afectados por el tsunami, formaran parte de un ejército de un rey justo, que entabló una guerra injusta y salieron victoriosos y mataron a muchos del otro bando, pero tenían que pagar, por eso a lo mejor ahora han muerto todos juntos.
Otro ejemplo: Llega el otoño y todo cambia de color, las hojas de los árboles están secas, llega un águila y se posa en el árbol, por lo que todas las hojas del árbol caen. El águila es una excusa. Las hojas son los fallecidos.
El tsunami era la excusa, pero todo esto es muy difícil de comprender con la mente. AMMA sólo trata de explicar la ley kármica. En caso de que AMMA esté equivocada, por favor perdónenLa.
No tiene ningún sentido pensar en los que han muerto. Eso sí, tratemos de ayudar a los que sufren.
Estas calamidades se pueden repetir en el futuro, y en lugar de darle vueltas a lo ocurrido, debemos tratar de ayudar a los supervivientes.
Corremos detrás de la fama y el reconocimiento, y la muerte aparece inesperadamente, y debemos irnos.
Deberíamos tratar de llevar una vida correcta, cuidando la acción, seguir el camino del dharma.
En Kerala, tienen el panchami, que significa que si alguien de la familia muere en un día determinado, pueden ocurrir 5 muertes de la familia en un plazo de entre uno y tres años, y lo ven tan natural.
En la astrología, en determinada conjunción planetaria, pueden poner a alguien inocente en la prisión, o que una familia enferme, y esto está más allá de la comprensión humana.
Los sabios antiguos hicieron muchas averiguaciones interiores, y desde allí nos hablaron del karma. Debemos aceptar sus declaraciones como válidas, porque fueron experiencias vividas.
Un médico puede examinar a un paciente, y si le encuentra glóbulos blancos, le dirá al paciente que puede contraer cáncer y le recetará.
Así como el médico puede diagnosticar, los rishis nos entregaron la sabiduría astrológica, y además conocían el presente, pasado y futuro.
Puede ser que el rey y su sirviente, tengan puntos en común en su carta astral, la misma estrella, la misma hora de nacimiento,... pero a lo mejor lo que los diferencia es su karma.
El lugar de nacimiento es muy importante en la vida de una persona.
Todo lo que se dice en la astrología no lo podemos saber mentalmente. Tiene muchos significados distintos.
Los días de luna llena, el nivel del mar aumenta, los enfermos psiquiátricos empeoran, la menstruación de las mujeres es más abundante.
Durante ciertos períodos los hospitales tienen más pacientes, y otros menos.
Sigan poniendo esfuerzo, esto es lo que cuenta, esto les dará resultado.
No sólo ocurren las calamidades en los países pobres, en Japón también ocurren, Estados Unidos estuvo afectado por un tornado, el verano pasado, y otros lugares, pero estos países tienen un sistema de alerta más desarrollado, y las víctimas son menos.
En la India, no están tan desarrollados los sistemas de detección y por eso hay más víctimas.
No culpemos a DIOS, de las víctimas.
Si hubiera habido más puentes desde esta zona al otro lado de canal, hubiera habido menos víctimas.
Una familia estaba entera en la barca que cruzaba el canal, y otra familia les avisó de que fueran a buscar el padre que lo dejaron en casa, pero no lo hicieron, fue un bramachari a hacerlo, AMMA no culpa a nadie, sólo indica la naturaleza del mundo.
Altos y bajos, alegría y dolor, como un péndulo que tiene en los extremos la alegría y el dolor, pero cuando para las oscilaciones, lo hace en el centro. Debemos pensar en ello, y procurar que nuestra mente se pare y alcance el centro, que se pare, y lo podemos hacer a través de la sadhana.
Ejemplo: Hay mucha gente que se hace seguros de vida, pero nunca piensan, ni tienen conciencia de que se van a morir. Entonces, si piensan que no se van a morir, porque se hacen seguros de vida?. Y si se hacen seguros de vida, porque piensan que no se van a morir, y se entregan a los placeres del mundo?.
RESUMEN
No es necesario mencionar lo que Amma y los swamis nos están recordando cada día.
Desde hace muchos años Amma nos está avisando que debemos cambiar nuestra manera de vivir, nuestra manera de relacionarnos con la naturaleza.
También nos ha estado recordando Amma que se estaban perdiendo los valores, y que algunos se habían perdido ya.
La crisis que está atravesando el mundo ahora, a consecuencia del virus que nos azota, es la consecuencia de que no hemos hecho caso ni a las recomendaciones de Amma, ni a otros avisos importantes y muy importantes que la Naturaleza nos ha ido dando.
Como fue el tsunami del 2003, que originó la pregunta que le hice a Amma, y otros que ha habido anterior y posteriormente.
Pero este ya es un aviso a todo el planeta, no a una zona en concreto ni a otra, sino a todo el planeta conjuntamente, nadie se libra.
Lo que quiere decir que la toma de conciencia ha de ser a nivel de todas las personas: ricos, pobres, jóvenes, adultos, ancianos, personas enfermas, personas sanas, sin distinción de sexo, o raza. TODOS LOS SERES HUMANOS estamos involucrados en este despertar que se nos pide por parte de la Naturaleza.
Personalmente creo que lo más importante para avanzar en la dirección que se nos está pidiendo es que no adoptemos ninguna actitud de culpabilidad, es decir no sentirnos culpables, ni tampoco hacer sentir culpable a nadie.
Es un momento de arrimar el hombro todos y cada uno, para restaurar la armonía que le hemos hecho perder a la Madre Naturaleza.
Y la mejor manera de arrimar el hombro es pensar en primer lugar en nosotros mismos.
¿Qué puedo hacer yo en esta situación?
¿Cómo puedo colaborar?
¿Cuáles son los cambios que la vida me está pidiendo?
Pues como Amma nos dice, en la medida que te entregas a hacer los cambios que a ti se te piden, emites la energía que propicia el ayudar a que los otros tomen conciencia de los cambios que les toca afrontar.
Ahora más que nunca se ve lo pequeño que es el planeta, hablamos de Rusia, de China o de Asia, como si estuvieran en la calle de abajo de donde vivimos, aún y estando a miles y miles de kilómetros de distancia.
De la misma manera, como Amma nos dice todo está absolutamente conectado, todos estamos inter relacionados, y lo que haga cada uno, afecta al conjunto.
Si yo estoy haciendo desde el lugar que ocupo en la Tierra, lo que me toca y de la manera que Dios me pide, estaré aportando Luz, al espacio que compartimos los miles de millones de seres humanos que habitamos aquí, con lo que estaré colaborando a que la oscuridad tenga menos fuerza.
En la medida que la oscuridad pierda fuerza, todos los habitantes del planeta nos beneficiaremos, pero yo seré el primer beneficiado, pues la Luz que Dios me envía para que llegue al mundo, primero pasa por mí.
Por ejemplo si en un cuarto a oscuras estamos 20 personas, cada una alumbramos al cuarto de acuerdo a nuestro estado de conciencia. En la medida en que tu estado de conciencia cambie a más positivo, le permitirás a Dios que te convierta en una bombilla de más potencia y que te pueda enviar más Luz que hasta ahora, lo que significa que estás emitiendo más Luz al cuarto, el cuarto está más iluminado, pero tú te has convertido en una bombilla más potente.
Este es el beneficio personal, así favorecemos al mundo.
En la medida que los demás perciben está Luz, les es más fácil llegar a conclusiones que les ayudan a tomar decisiones en la dirección adecuada, con lo que cada uno/a en su medida se va convirtiendo en una bombilla más potente, y en el cuarto se ven las cosas más claras, porque cada vez está más iluminado.
Amma cuenta una historia de un pueblo muy pequeño, que estaba dominado por la violencia y el bandolerismo, a consecuencia de que no disponía de luz, y por las noches los delincuentes campaban a sus anchas.
Un vecino del pueblo fue a hablar con el alcalde para que iluminara el pueblo, y el alcalde le mostró las arcas del Ayuntamiento, estaban vacías no había ni un céntimo, pero el alcalde quedó concienciado del mensaje del vecino del pueblo.
El alcalde de este pueblo fue a hablar con el político-director del departamento provincial, para pedir que iluminara el pueblo y acabar con la delincuencia, pero el jefe provincial le dijo que no tenía presupuesto.
No se dio por vencido y fue hablar con el Presidente regional, para que iluminara el pueblo, y el Presidente le dijo que esta inversión no estaba dentro de las prioridades del gobierno regional.
El vecino y el alcalde del pueblo pidieron audiencia al Jefe del Gobierno del país, quien les recibió y respondiendo a su petición, les dijo que ni sabía que este pueblo existía dentro del país.
De vuelta a casa, el vecino del pueblo que inició la gestión, le dijo al alcalde que iba a reunir todos sus ahorros y pondría delante mismo de su casa una farola.
El día de la inauguración invitó para que asistieran todos los vecinos del pueblo, y acudieron la mayoría.
De los asistentes hubo uno que dijo: vaya cambio que se observa en todo el entorno con esta farola, la semana que viene voy a hacer un esfuerzo económico y colocará una farola como esta delante de mi casa.
Y así lo hizo, y volvió a invitar a todo el pueblo a la inauguración.
En esta inauguración salieron dos vecinos más dispuestos a hacer el esfuerzo e instalar una farola delante de sus casas.
Poco a poco un vecino tras otro, fueron instalando una farola delante de su casa.
El pueblo quedó iluminado, y la delincuencia y el bandolerismo desaparecieron.
Esta es la actitud que Amma nos pide:
Instala una farola dentro de ti, la farola de la acción correcta, la farola de la actitud adecuada, esta es la manera en que ayudarás al mundo.
Y esta es la manera que te ayudarás a ti mismo, en primer lugar.
Si reflexionamos nos daremos cuenta de cuanta positividad podemos aportar al mundo, cada uno/a desde el lugar que ocupamos en el planeta.
Así lo podemos ver en algunas de las cosas que Amma nos dice en la segunda parte de este satsang:
“Deberíamos tratar de llevar una vida correcta, cuidando la acción, seguir en el camino del dharma”.
“Estas calamidades se pueden repetir en el futuro, y en lugar de darle vueltas a lo ocurrido, debemos tratar de ayudar a los supervivientes”.
“Corremos detrás de la fama y el reconocimiento, y la muerte aparece inesperadamente, y debemos irnos”.
“Sigan poniendo esfuerzo, esto es lo que cuenta, esto les dará resultado”.
“No culpemos a Dios de las víctimas”.
“Altos y bajos, alegría y dolor, como un péndulo que tiene en los extremos la alegría y el dolor, pero cuando paran las oscilaciones, lo hace en el centro”.
“Debemos pensar en ello, y procurar que nuestra mente se pare y alcance el centro, que se pare, y lo podemos hacer a través de la sadhana”.
“Ejemplo: Hay mucha gente que se hace seguros de vida, pero nunca piensan, ni tienen conciencia de que se van a morir. Entonces, si piensan que no se van a morir, porque se hacen seguros de vida?. Y si se hacen seguros de vida, porque piensan que no se van a morir, y se entregan a los placeres del mundo”.
Podríamos resumir esta segunda parte del satsang que hace referencia al pasado, un pasado en el que Amma nos anunciaba lo que pasaría, en el que Amma nos anunciaba el presente que estamos viviendo, si no cambiábamos en nuestra actitud, y la podríamos resumir centrándonos en el mensaje que Amma ya nos dio cuando el tsunami en Sri Lanka y en India.
En estos momentos de dolor, ayudemos al mundo, haciendo el esfuerzo en realizar rigurosamente nuestra sadhana, hagamos el esfuerzo de situarnos en la acción correcta, en la actitud adecuada en el día a día, y no nos enfoquemos en los placeres que la mente nos pueda proponer.
OM NAMAH SHIVAYA
Satsang virtual con Swami Shantamritananda Puri
Satsang virtual con Swami Shantamritananda Puri – 8 de abril de 2020
Om Amriteshwaryai Namah
Este es el momento que todos hemos estado esperando. El momento que virtualmente todos en este planeta hemos estado esperando. Todos y cada uno de nosotros hemos estado esperando: el futuro. Siempre estamos esperando el futuro. Nunca estamos en el momento presente. El problema es que lo que está sucediendo en todo el mundo en este momento, no es el futuro que esperábamos. No es el futuro que deseábamos, o con el que soñábamos, así que nos resulta bastante incómodo, francamente inoportuno, vivir en este momento presente. Sin embargo, es una realidad innegable.
Ahora bien, ¿quién es el responsable de que el futuro en el que nuestra mente se proyectaba todo el tiempo no se haya manifestado? ¿A quién vamos a quejarnos amargamente por todos los inconvenientes que tenemos que soportar estos días? No podemos culpar a nadie más que a nosotros mismos, pues como dice Amma “los humanos y la naturaleza siempre se reflejan mutuamente”. Hace 26 años Amma dijo: “Incluso un pequeño cambio en la naturaleza, como un organismo unicelular, afectará nuestras vidas en este planeta. De igual manera, nuestros pensamientos y actos tienen efecto en la naturaleza. Si se pierde el equilibrio de la naturaleza, la armonía de la vida humana también se perderá y viceversa”.
Recientemente, en su mensaje sobre la Covid-19, Amma dijo: "Las cosas egoístas que el hombre le ha hecho a la naturaleza están volviendo ahora en forma de epidemias como ésta". Pensad en todo el sufrimiento que hemos causado a la naturaleza. Por ejemplo, cada año, bajo la influencia humana, un área del tamaño de Costa Rica es deforestada. La desertificación consume áreas del tamaño de Grecia e Irlanda juntas. ¿No es la madre naturaleza la que debería considerarnos incómodos? ¿No debería ser ella la que se quejara de nosotros? Quizás nos preguntemos ¿nos ama la madre naturaleza? Por supuesto que sí. Siente mucho más amor por nosotros que nosotros por ella.
Imagina que eres un padre y te despiertas en mitad de la noche, tosiendo. Hay humo por toda la casa y te das cuenta de que hay un incendio. Inmediatamente te apresuras a la habitación de tus hijos y gritas:"¡Niños, despertad, despertad!" Si tus hijos están profundamente dormidos y no responden, ¿dejarás que sigan durmiendo? No, los sacudirás con más fuerza. Si se quejan diciendo: "No nos queremos despertar", harás todo lo posible para que recuperen el sentido, aunque tengas que sacudirlos violentamente. No porque los rechaces, sino porque los amas.
De la misma manera, hemos estado profundamente dormidos en nuestra inconsciente y egoísta vida. Hemos incendiado el mundo con el fuego del egoísmo y luego nos hemos echado a dormir en medio de todo ello. La madre naturaleza sólo está llamando compasivamente nuestra atención, para que podamos escapar del fuego antes de que sea demasiado tarde.
En la actual situación mundial, podemos considerar que muchos acontecimientos inesperados están creando obstáculos en nuestro camino, obligándonos a cambiar nuestros planes. De hecho, esto debería enseñarnos a no apegarnos a nuestros planes, porque no podemos controlar realmente todo lo que sucede a nuestro alrededor. Pensad en las 230.000 personas que murieron en el tsunami de diciembre de 2004. Con toda seguridad tenían muchos planes para el día, el mes, el año, toda su vida. Ninguno de los cuales nunca se cumplió.
Por eso Amma dijo en su reciente mensaje: “Ahora mis hijos han comprendido que nuestra vida existe tan sólo en el momento presente. Ni el próximo aliento está en nuestras manos. Nuestra existencia está determinada por cómo utilizamos el momento presente, porque es ahí donde reside nuestra vida".
Por tanto, en lugar de quejarnos por esta crisis, quizá podamos usarla sabiamente para aprender de ella. ¿Qué nos está enseñando esta crisis sobre nosotros mismos, nuestro mundo y nuestra conciencia colectiva?
Bueno, ciertamente el coronavirus se está cobrando su cuota: cerca de 1,5 millones de casos confirmados y 85.000 muertes. Estas estadísticas asustan a mucha gente en todo el mundo. En su mensaje, Amma dice: "No es un momento para tener miedo, es un momento para despertar el coraje dentro de nosotros". Y no olvidemos que cada año más de 3,4 millones de personas mueren debido a enfermedades relacionadas con el agua. También cerca de 9 millones de personas mueren de hambre cada año. Tal vez no conozcamos personalmente a ninguno de estos 12,4 millones de personas, pero el coronavirus nos asusta más porque nos afecta directamente. ¿Es esto justo?
Lo que estamos viendo es que la adversidad se revela bajo la superficie de nuestra individualidad. Es otra de las consecuencias del coronavirus. En los buenos tiempos es fácil proyectar la imagen de nosotros mismos que queremos que vean los demás. Pero en tiempos como estos ya no podemos ocultar lo que llevamos dentro, incluyendo nuestro egoísmo. ¿No es este el motivo por el cual la gente se está peleando en las tiendas por objetos como el papel higiénico y la leche? Verdaderamente podemos considerar todo lo que está pasando como una enseñanza.
Es una prueba de estrés para toda la humanidad que nos enseña dónde debemos centrarnos y en qué debemos trabajar. Si aprovechamos esta oportunidad a fondo, está garantizado un acelerado crecimiento espiritual. Así que ha llegado el momento de llevar la teoría a la práctica. Es la prueba de cuánto hemos aprendido acerca de la espiritualidad. Hoy más que nunca, necesitamos una espiritualidad que pueda ser aplicada en la vida diaria. A medida que el virus nos obliga a enfocarnos, nuestras debilidades se van revelando una a una y, finalmente, podemos hacer algo al respecto.
Lo que hubiera llevado años, tal vez vidas, hoy en día puede alcanzarse en poco tiempo. Así que estudiemos las enseñanzas del coronavirus. Tuvimos al Señor Krishna transmitiendo la Bhagavad Gita a Arjuna; ahora tenemos el Covid-19 transmitiendo la Corona Gita a toda la humanidad. En este sentido, hay tres puntos que quisiera remarcar.
Comenzaré con una pregunta: ¿Es este un buen o un mal momento? Diría que depende de lo que quieras en la vida. Normalmente cuando es un "buen momento" para las actividades materiales, no es un "buen momento" para la espiritualidad. Porque un "buen momento" en lo material suele significar que el éxito llega más fácilmente, pero en esos momentos la tendencia general es a olvidarnos de la espiritualidad. Olvidamos a Dios. Olvidamos nuestro verdadero Ser. El sabor del éxito nos hace desear más y más, y aumentan nuestras ocupaciones en la búsqueda de bienes materiales. Esto consume nuestro tiempo y energía, normalmente a expensas de nuestra vida espiritual. Y digo normalmente porque, por supuesto, hay excepciones. Estoy seguro de que ninguno de vosotros tiene este problema. Sólo personas como yo lo tenemos, así que evidentemente, hay excepciones.
Pero cuando, inevitablemente, las cosas se mueven hacia el otro extremo, como ahora, nuestra reacción inicial suele ser: “Vaya, ¡qué mal momento!” Tales afirmaciones asumen que nuestra prioridad es el bienestar material.
¿Y si dejáramos de lado esta suposición, sólo por un momento? Quizá haya otros objetivos en la vida. Si dejáramos de lado esta suposición por un momento, quizás podríamos encontrarnos aquí en Amritapuri, el ashram principal de Amma en el sur de la India. Ahora aquí se está como en el cielo. No podría ser mejor, pues este es un momento maravilloso para la búsqueda espiritual.
Permitidme, por favor, compartir algo un poco personal. Algunos de vosotros sabréis que en la astrología védica de la India existen importantes períodos astrológicos. Duran entre seis y veinte años y una persona con una longevidad promedio experimentará alrededor de cinco o siete de esos períodos, por lo que no son muy frecuentes. En mi caso, la última vez que sucedió un período astrológico importante, fue a mediados de 2000, y desde entonces supe que el próximo cambio importante vendría en algún momento de la primavera de 2020. Amma dice a menudo que tales dasha sandhi o cambios de tiempo astrológico pueden suponer desafíos en nuestra vida. Pero raramente miro mi horóscopo personal, así que me olvidé por completo de cuándo iba a tener lugar.
Por alguna razón, sin embargo, la noche antes de la ceremonia en que tantos discípulos de Amma fueron iniciados en sannyasa -las túnicas ocres- y en brahmacharya -las túnicas amarillas-, recordé que se suponía que pronto iba a tener lugar un nuevo período astrológico. Así que decidí comprobar mi carta para confirmar lo que recordaba, que tal vez a mediados de abril iba a empezar. Me equivoqué, ya había empezado. ¿Cuándo empezó? El día exacto en que aterricé en la India con el propósito de la iniciación formal en una vida de renuncia total. Fue una confirmación tan firme de la gracia y la protección de Amma, que no podía dejar de llorar.
No eran lágrimas de tristeza, sino de alegría espiritual. Pensaba: "¿Qué mejor momento para recibir la iniciación? ¿Qué mejor lugar? Amritapuri es el mejor lugar del mundo para mí. ¿Qué Gurú más grande que Amma? ¿Qué mejor manera de pasar el resto de mi vida?". De hecho, el actual período astrológico no es bueno en absoluto para el éxito mundano, pero se convirtió en el momento ideal para reafirmar mi enfoque en la vida espiritual.
En realidad, todos podemos usar la situación actual para ese propósito, para reafirmar nuestro enfoque en la vida espiritual. No os preocupéis. No debéis renunciar al mundo, sólo tener esta misma intención en mente: "Que todas mis acciones sean por el bien del mundo".
Ayer Amma respondió a una pregunta sobre nuestras necesidades físicas y emocionales. Nos dijo: "La vida en el mundo es como tomar un baño en un río". La mayoría de nosotros no había oído tal analogía. Ella dijo: "Nos damos un baño en el río sólo para purificar nuestro cuerpo. Pero desde el principio nuestra intención es volver a salir y regresar a nuestro hogar".
Fue una hermosa analogía porque las acciones desinteresadas que realizamos en el mundo purifican nuestra mente. Pero lo que Amma puso en evidencia es que nuestro objetivo final debe ser volver a nuestro hogar, que es el Atman o el verdadero Ser. Este es el enfoque en la espiritualidad: mientras vivimos en el mundo deberíamos tratar de ver el significado espiritual de todo lo que nos pasa, incluso en el coronavirus.
Entonces, estos malos tiempos de hoy, estos supuestos malos tiempos, ¿para qué son buenos? Siendo imparciales, nos encontramos en un ambiente global preparado para la espiritualidad y sus prácticas. Tenemos el confinamiento, las cuarentenas impuestas, las órdenes de quedarse en casa y el distanciamiento social. Ahora el mundo entero está probando la vida en un ashram, la vida en una comunidad espiritual. Las circunstancias que mantenían nuestras mentes fragmentadas, difusas, inquietas y agitadas se han desvanecido en su mayoría, al menos temporalmente. Sin las excusas usuales y con mucho más tiempo libre en nuestras manos, podemos finalmente hacer nuestras prácticas espirituales de la manera que soñamos. Sin embargo, para aquellos cuyo interés principal es el materialismo, sí puede resultar bastante difícil. Eso también explicaría que la tasa de divorcios y los abusos en el hogar estén aumentando considerablemente en muchos países. Estamos obligados a sufrir si buscamos lo equivocado en el momento equivocado. ¿No sería más adecuado descubrir las oportunidades espirituales que existen ahora mismo y aprovecharlas?
Para preparar la ceremonia donde fuimos iniciados en una vida de renuncia total, compilé las citas de Amma sobre la renuncia. Y siento que una de ellas es particularmente relevante aquí. Amma dice: "Ya seas un cabeza de familia o un sannyasi, un renunciante, la renuncia sigue siendo el medio para un fin. Internamente, también los cabezas de familia deben tener una actitud de renuncia." En realidad, tiene mucho sentido, porque cuando te casas tienes que hacer algunos sacrificios por el bien de tu pareja. Cuando tienes hijos tienes que hacer aún mayores sacrificios; en cierta manera, debes renunciar a tus propios placeres por el bien de los demás. Ella dice: "Deberían tener esa actitud de renuncia incluso si están casados. Externamente pueden ser activos, cumplir con sus deberes; pueden tener deseos y necesidades que cumplir, pueden necesitar alcanzar una posición. Pero al mismo tiempo deben prepararse para dejarlo todo en cualquier momento, si fuera necesario. Si no es antes, en el momento de la muerte todos tendremos que dejarlo todo".
Amma dice: "Un sannyasi, un renunciante que vive en el mundo también debería ser así". Mirad los discípulos de Amma, incluso Amma misma, tienen que lidiar con tantas instituciones, con los problemas de tantas personas. A nuestra pequeña manera, nosotros tenemos que ayudar a la gente a compartir sus problemas y vivir en el mundo, allí donde estén los ashrams de Amma. Ellos están en sociedad. Tenemos que manejar todas estas cosas. Ella dice: "Tenemos que ser dinámicos en nuestras acciones, pero desapegados en nuestro interior". Intentando, intentando... Pero ese es el secreto. Ella dice: "Tienes que ser activo en el mundo, pero desapegado en el interior". Dice: "Un sannyasi, un renunciante, es alguien que dedica toda su vida tanto externa como interna para el bien del mundo. Mientras que un cabeza de familia que renuncia" --Ella anima a renunciar a todos los cabezas de familia-- "vive externamente una vida familiar, pero internamente una vida de renunciante". Eso significa que tienes una familia, pero que sigues viviendo por el bien del mundo.
Ahora tenemos la oportunidad perfecta para que todos nosotros seamos conscientes y practiquemos estos aspectos. Cuando la mente se opone a todas las reglas y regulaciones que rodean al coronavirus: quédate en casa y usa una mascarilla --y siento no estar usando una mascarilla en este momento aquí-- (se refiere a que mientras está dando el satsang no está usando una mascarilla ante la cámara), trata sólo de recordar que no son por nuestro propio bien sino por el de todos los seres. Podemos decidir que a través de este pequeño sacrificio mío, se reduzcan en alguna pequeña medida los sufrimientos del mundo. Podemos hacer esto todos los días.
El siguiente punto es que es un muy buen momento para sentir gratitud. No debemos olvidar nuestro sentido de la gratitud en momentos como este porque siempre hay algo por lo que estar agradecidos. Siempre hay alguien que se enfrenta a retos mayores que los nuestros. Cuando recordamos a esas personas, se despierta en nosotros la compasión latente y espontáneamente también sentimos gratitud.
Un día, un niño fue a un centro comercial con su madre y cuando pasaron por la zapatería gritó: "¡Mamá! ¡Mamá! Cómprame estos zapatos nuevos". Y su madre dijo pacientemente: "No cariño, sabes que mamá no lleva suficiente dinero ahora mismo y tenemos muchas otras compras que hacer, así que tal vez la próxima vez las compremos". El niño lloró y gritó cada vez más fuerte y se puso de tal manera que su madre tuvo que salir precipitadamente del centro comercial. El chico seguía con su berrinche cuando se fueron, pero justo en la acera vio a otro chico que no tenía zapatos. Así que dejó de llorar. Se dijo: "Bueno, al menos tengo un par de zapatos". Cuando el chico sin zapatos vio que el otro chico tenía un par de zapatos muy bonitos, se entristeció. Así que empezó a llorar porque no tenía ni un solo par de zapatos. Salió del centro comercial y bajó por la calle llorando todo el camino y pensó "Debo ser el chico más desafortunado del mundo"...hasta que vio a otro chico que no tenía pies. Pensó "vaya, al menos tengo dos pies" y dejó de llorar. Del mismo modo, a menudo sentimos lástima de nosotros mismos y damos las cosas por sentadas olvidando que tenemos mucho por lo que estar agradecidos.
Os contaré una historia sobre algo que ocurrió aquí hace mucho tiempo. La primera vez que vine a este ashram de Amritapuri fue en enero de 1991 y en esos días, especialmente para los visitantes occidentales, era muy fácil conseguir darshan. Podíamos tener darshan todos los días y, debo confesar, empezamos a darlo por sentado. Al menos yo lo hice. Pensábamos: ¿Qué le voy a preguntar a Amma hoy? Porque podíamos tener darshan tan fácilmente que se podía hacer preguntas. Incluso si no tenía una pregunta, pensaba en una que hacerle a Amma. Era una gran pérdida del tiempo de Amma. Un día, cuando fui al darshan, Amma me miró y dijo: "Hijo, no te preocupes, no tienes que venir al darshan todos los días. Dije: "¿No? ¿No me extrañarás, si no vengo todos los días al darshan?" "Oh ... eso es un problema para mí, no para Amma". Después de eso me di cuenta de lo precioso que era el darshan de Amma, porque ya no podía tenerlo todos los días. Ahora nunca consigo un darshan, así que me resulta aún más valioso... Sin embargo, he viajado con Amma y después de algunos años, especialmente a partir de 1999 y hasta 2003, tuve la enorme bendición de poder viajar con Ella casi a todas partes.
Pero en 2003, antes de la gira europea, me acerqué a Amma aquí en Amritapuri, y le hice una pregunta, suponiendo que Ella respondería rápidamente con un "sí". Le dije: "Amma, voy a ir a Europa, ¿verdad? Esperando que Ella dijera "sí", me sonrió y dijo: "No te preocupes, Amma se adaptará, Amma se las arreglará..." "¿Quieres decir... que te las arreglarás sin mí? ¿Te adaptarás sin mí? ¿En serio? ¿Cómo puedes hacer tal cosa?" Así es como me sentía en ese momento... Pero por supuesto, ¡yo la necesito! ¡Lo olvidamos! Ella no necesita de ninguno de nosotros, y por supuesto, la gira por Europa fue bien sin mí. Más adelante Ella me dijo que podía ir, pero durante algunas semanas sentí realmente el dolor de no poder ir con Amma. Y sabéis, fue muy bueno, estoy contento de que Ella me dijera que no podría tener darshan todos los días, estoy contento de que Ella dijera: "Puedo organizarme sin ti". Porque de esa manera siento aún más gratitud ante su presencia.
Incluso esta vez, después de llegar, fue parecido en cierto sentido, ya que todos los extranjeros, que no llevaban aquí un cierto número de días, debieron ponerse en cuarentena. A pesar de estar aquí, a sólo unos cientos de metros de Amma, ni siquiera podíamos verla. Qué terrible destino experimentamos, pero eso te hace estar aún más agradecido por su presencia.
Así pues, hagamos un balance de todas las cosas por las que podemos estar agradecidos en la situación actual. Probablemente tenéis vuestra lista, pero estoy pensando... no hay tráfico, no hay colas, he oído que quizá se abaraten los combustibles... hay tiempo para la familia y los niños, o si no tienes familia y niños puedes estar solo y en silencio, que también es raro; puedes comer comidas caseras, hay mejor calidad de aire debido a la disminución de la actividad. Hay tiempo para disfrutar de placeres simples; hacer algo de yoga, leer libros espirituales, respirar profundamente, recitar tu mantra si lo tienes, reflexionar sobre el significado de la vida - ¿con qué frecuencia hacemos eso?
Y meditar; meditar en Dios, en tu verdadero Ser, en Amma, en lo que quieras.
Hay otra recomendación a poner en práctica cuando se obtiene algo que se necesita, especialmente en este difícil momento. Puede ser difícil conseguir las cosas que se necesitan. Así que cuando finalmente conseguimos eso que necesitamos, demos las gracias. Podemos agradecer a Dios, podemos agradecer al Universo, podemos agradecer a la madre naturaleza. Podemos agradecer a la gente que lo hizo, podemos agradecer a la persona que nos lo entregó e incluso a la gente que va a procesar los residuos después. Necesitamos las bendiciones de toda esta gente para disfrutar de estas cosas del mundo. Así que la gratitud es fundamental en nuestra vida, y esta es una hermosa enseñanza que estamos recibiendo ahora. No desperdiciemos esta oportunidad.
También es un momento maravilloso para practicar la rendición. Bien, sé que la palabra rendición es un poco delicada para los occidentales. Tenemos este concepto de la victoria, "No me voy a rendir, voy a ganar". No es ese el significado de rendición. Es una palabra importante en la espiritualidad. Llegaremos a eso. Permitidme usar esa palabra y no tengáis miedo de usarla, por favor. Amma siempre dice que "nuestro esfuerzo es sólo uno de los innumerables factores que determinan el resultado de nuestras acciones", como lo demuestra la situación actual. Así que, si queremos que nuestros esfuerzos sean fructíferos, lo que realmente necesitamos es la gracia divina. La rendición incluye el propio esfuerzo. De manera que la rendición no significa que te sientes sin hacer nada. Significa que te esfuerces, pero recordar que eso no es suficiente. Tenemos que poner un fuerte énfasis en rezar por la gracia.
Por eso Amma dijo en su mensaje del 11 de marzo: "La espiritualidad nos enseña a no huir de los desafíos de la vida, sino a afrontarlos con valentía". Sin embargo, se preguntaba: "¿Cómo lo hacemos en la situación actual?" Es como si un terrorista estuviera esperando justo fuera de tu casa. En el momento en que abres la puerta, él te ataca. La situación con este virus es similar. Así que no nos queda otra opción. En las circunstancias actuales sólo podemos tomar las precauciones necesarias y rezar por la gracia divina. Prevenir con el propio esfuerzo y sumarle la gracia divina. Está en manos de la gracia divina.
Pero cuando rezamos, nuestras oraciones pueden ser de varios tipos. Podemos rezar por miedo. Este se considera un nivel muy elemental de oración; no es en absoluto una espiritualidad madura. Lo siguiente es que la gente tiende a rezar para que se cumplan sus deseos. Todavía es inmaduro porque está centrado en sí mismo. La verdadera espiritualidad comienza cuando abrazamos la oración desinteresada, por el amor a Dios o por la compasión hacia todos los seres o por el deseo de conocer a Dios, de conocer nuestro verdadero Ser.
Así que cuando practicamos la rendición rezando por la gracia, no deberíamos hacerlo sólo por nosotros mismos. Incluyamos en nuestras oraciones a todas las personas que están sufriendo más que nosotros. Recordemos a los que ahora mismo están inmersos en el sufrimiento, las personas que están muriendo sin sus seres queridos a su lado porque se infectarían; aquellos familiares que no pueden aliviar los sufrimientos de sus miembros en las últimas horas de su vida. Podemos rezar también por toda esa gente.
Los que vinimos del extranjero a Amritapuri, podríamos decir que estamos todos atrapados aquí, al menos hasta finales de abril, y es probable que sea mucho más tiempo. No hay vuelos a ninguna parte. No podemos salir en absoluto al exterior En cierto sentido no tenemos libertad física. Pero si nos rendimos a esta situación, que es la única opción que nos queda, descubriremos un mundo de libertad interior, totalmente distinto. Cuando dejamos de preocuparnos por proteger nuestra salud física, abrimos la puerta a mejorar nuestra salud interior. Cuando dejamos de preocuparnos por nuestra riqueza material, podemos empezar a acumular riqueza espiritual. Cuando ya no echamos de menos pasar físicamente el rato con nuestro círculo de amigos, podemos finalmente pasar el rato con los amigos internos, nuestros pensamientos espirituales y el recuerdo divino de Dios, del gurú, de Amma, de tu verdadero Ser...lo que quieras. La rendición no nos hace débiles, libera la verdadera fuerza dentro de nosotros. Nos permite desbloquear esa fuerza.
Este ashram, Amritapuri, siempre ha sido el campo de entrenamiento de Amma para enseñarnos cómo enfrentar y superar todos los desafíos de la vida. Confieso que cuando llegué aquí, a veces me volvía loco. "Sí" no significaba necesariamente afirmativo o negativo, y "mañana" significaba algo entre un día más tarde y el infinito. A mi mente occidental le llevó mucho tiempo darse cuenta de que no estaba aquí para cumplir con el trabajo o, al menos, no con el trabajo en que estaba pensando. En última instancia, mi mente occidental tuvo que rendirse a la realidad de que el único trabajo en el que tenía que centrarme era superar los desafíos que planteaban las negatividades de mi mente, mis vasanas. Y eso resultó ser mucho más difícil que cualquier tarea física.
De hecho, la propia Amma dijo una vez: "Este ashram es un muy buen campo de batalla. Quienquiera que venga a este campo debe luchar. Algunos resultarán heridos. Otros se retirarán y huirán. Pero si tienes éxito aquí puedes conquistar el mundo entero. Amma está esperando a ver cuántos saldrán victoriosos".
Ahora es el momento de que nos empapemos de estas palabras de Amma y las pongamos en práctica porque cada una de nuestras vidas constituye el campo de actividad del que habla. No significa que sólo aquí se pueda hacer esto. El campo de batalla que prueba nuestra madurez espiritual es nuestra vida. Y aceptar las actuales circunstancias de nuestra vida como esa prueba, es el primer paso hacia el éxito al que Amma se refiere. No la hagamos esperar demasiado tiempo.
Una forma de poner esto en práctica es llevar un diario de lo que aprendemos cada día. No como una redacción: "Hoy hice esto, lavé un poco de ropa, hice mi cama"...no ese tipo de cosas. Debería ser lo que aprendimos, incluyendo las cosas que no salieron como queríamos, los miedos que teníamos y que nunca ocurrieron. Pues todo lo que podemos hacer es esforzarnos. Los resultados están en las manos de Dios. Eso es lo que este diario nos enseñará.
Os daré un ejemplo. Tuvimos que ir a hacernos un análisis de sangre en un hospital cercano. Los funcionarios de salud querían ver si alguno de los extranjeros tenía el coronavirus. Incluso antes de ir, Amma estaba cien por cien segura de que todo estaría bien. Por supuesto, Ella lo sabía. Por supuesto también, tenía razón. Pero dejadme decir que estuve en pánico durante tres días hasta que llegaron los resultados. Tuvimos que esperar tres días. Para algunas personas fueron tres días terriblemente estresantes. Al mismo tiempo, esta llamada cuarentena en la que estábamos -Swami Dayamritananda Puri y yo juntos- la pasamos en una hermosa habitación en la playa con vistas al océano. Podíamos oír el sonido de las olas todo el día, sentíamos la suave brisa, las hojas de coco moverse, un atardecer rojo rubí cada día... ¡Era como el paraíso! Pero de estar estresados, no hubiéramos podido disfrutar ni un momento de ello.
Nuestras expectativas, deseos y miedos no son solo los obstáculos para la rendición y la aceptación. También son los obstáculos para disfrutar del momento presente. Esta es la razón por la que realmente necesitamos abrazar la rendición, no como una debilidad, sino como una oportunidad para desbloquear la fuerza oculta en nuestro interior.
En resumen, los tres puntos que quería compartir hoy eran:
- Cualquier llamado mal momento puede convertirse en un buen momento a través de un cambio de enfoque, a través de un cambio en nuestro objetivo de vida. Y ahora es ciertamente un buen momento para las búsquedas espirituales.
- El segundo punto era sobre la gratitud. Tenemos muchísimas cosas por las que estar agradecidos, incluso ahora.
- Y el tercero era que, desde el coronavirus, también se nos ha mostrado la importancia del empoderamiento y de la rendición.
Me gustaría concluir con un extracto del mensaje más reciente de Amma sobre la epidemia.
Ella ha dicho: "Durante este tiempo, cuando el mundo entero se tambalea en la oscuridad de la pandemia de Covid-19, unámonos para encender la lámpara de la esperanza, la compasión y la unidad. El virus nos está llenando interna y externamente con el veneno del miedo y la ansiedad. Para destruirlo, tenemos que encender nuestra llama interior, nuestra luz interior. Encendamos la lámpara de la nueva luz, la luz de la bondad, la luz del conocimiento que disipa la oscuridad de la ignorancia. Eliminemos este veneno con la panacea de la acción y el pensamiento correctos, en el momento adecuado. Que nuestras acciones desinteresadas combinadas con la gracia divina protejan al mundo. Entonces, definitivamente, tendremos éxito y saldremos de esta oscuridad".
Así como Amma sabía el resultado de nuestros análisis de sangre antes de que llegaran, Amma nos está dando la seguridad de que definitivamente saldremos de esta oscuridad. Como siempre, Amma capta la esencia de la cuestión. Ahora sólo tenemos que ponerla en práctica.
Om Namah Shivaya.
Om Lokah Samastah Sukhino Bhavantu...
Segundo Mensaje de Amma sobre el COVID-19
Venciendo al COVID19
5 de Abril del 2020
Swami Purnamritananda Puri. Secretario General Mata Amritanandamayi Math Amritapuri.
Om Amriteswaryai NamahOm Namah Sivaya
Mis saludos a todos los hijos de Amma.
El mundo está atravesando una crisis sin precedentes.
En su mensaje para esta ocasión, Amma dijo a sus hijos que no debemos desalentarnos delante de las adversidades. Por el contrario, debemos ganar fuerza para superarlas, y rezar por el bienestar del mundo. Debemos intentar pensar qué podemos hacer. El egoísmo del hombre perturba el ritmo de la Madre Naturaleza.
Un virus tan pequeño, invisible para el ojo humano, está quitando el sueño a gigantes intelectuales.
Ha suspendido las actividades del mundo moderno. Aquellos que sostenían que no creen en nada que no pueden ver han empezado a rezar, sentados en sus casas. Aquellos que pasaban horas en los centros comerciales, se han retirado a sus pequeños hogares.
¿El virus tiene vida? La respuesta es sí, y no. Siendo esta una especialidad que nadie más en la superficie de la Tierra puede proclamar. Cuando el virus penetra una célula viva, toma vida. Cuando sale de la célula, pierde vida. No respira ni come nada. Los tsunamis y las inundaciones nos dieron muchas lecciones. El coronavirus ahora también ha venido a enseñarnos algo.
Incluso si no hubiera ningún ser humano en la Tierra, el universo continuaría funcionando. No está claro si realmente hemos aprendido alguna lección, a pesar de la cantidad de evidencias que muestran las limitaciones humanas. En esta era tecnológica, el mundo de la ciencia se encuentra impotente, incapaz de encontrar una solución. Los médicos dicen que la solución se halla permaneciendo en casa. Y a menudo Amma nos recuerda que tenemos que obedecer.
La higiene física, mental y del medio ambiente es necesaria. Para la limpieza corporal nos duchamos cada mañana. Para purificar la mente recitamos mantras. Podemos incrementar la inmunidad del cuerpo mediante la oración, la meditación y el yoga.
Hay una anécdota del Mahabharata que vale la pena recordar aquí. Ashwathama enloqueció de ira cuando su padre Dronacharya fue asesinado. Sacó de su aljaba la última y más poderosa arma. Los cielos se estremecieron y se produjo una secuencia explosiva de rayos y truenos. Toda la naturaleza tembló. Los océanos oscilaron. Atemorizado, el mundo se paralizó.
La humanidad pareció quedarse sin aliento. Sí, era el Narayanastra. El arma suprema, la más poderosa, cuyo poder es indescriptible. Y que una vez lanzada ya no se puede recuperar. No hay nada que pueda frenar la fuerza de este arma
invencible.
Aswathama la lanzó con toda su fuerza en dirección al Aswathama la lanzó con toda su fuerza en dirección al ejército Pándava.
El ejército Pándava, desconcertado, miró al Señor Sri Krishna. Una vez más, los labios de Krishna dibujaron una sonrisa. Levantando su mano derecha, el Señor dijo a los Pándavas: -"Bajad las armas. Abandonad todo pensamiento de guerra. Juntad las manos y mostrad reverencia ante el Narayanastra. Que la corona del ego que considera que la victoria se conquista peleando, se postre. El Narayanastra solo destruye a aquellos que creen que la conquista se logra peleando o matando.”
El ejército Pándava abandonó las armas, se inclinó y mostró sus respetos. El Narayanastra redirigió su dirección, dió media vuelta y encontró su camino hacia las manos de Sri Krishna.
En el Mahabhárata quedó claramente dicho lo que hay que hacer cuando las medicinas y los antídotos fallan. Debemos permanecer en paz para erradicar el poder destructivo del corona virus. Si no somos capaces de realizar acciones justas, como mínimo tenemos que abstenernos de realizar acciones injustas. Cualquier adversidad puede convertirse en una bendición.
Aquellos que, en medio del ajetreo y el bullicio del trabajo, no podían cuidar de sus familias quizás logran ver esta situación como una oportunidad. Nuestras prácticas diarias nos aportan la pureza que necesitamos para superar cualquier crisis. No tengáis miedo. Amma está aquí para guiarnos y podemos vivir según Sus instrucciones. Obedeced las directrices según Sus instrucciones. Obedeced las directrices dadas por el Gobierno. Todo tiene un lado positivo.
Preocupémonos de la limpieza del cuerpo, de la mente y del medio ambiente. Esta es una gran oportunidad para reforzar los lazos familiares. Los padres pueden estar disponibles para sus hijos y contarles historias.
Podemos aprender cómo llevar a la práctica las enseñanzas del Bhagavad Gita a nuestra vida diaria, y transmitirles este mensaje a nuestros hijos.
Que los hijos de Amma recen por el bienestar en el mundo. Intentad recitar el gurumantra, los nombres de la Madre Divina, practicar meditación, etc, y así adquiriremos fortaleza. Y veremos esta crisis convertirse en una bendición.
Que esta experiencia se vuelva un entrenamiento que lleve el mundo hacia la bondad. Rezando por ello y postrándome ante todos.
Om Lokah Samastah Sukhino Bhavantu...
Lo que comienza debe terminar
Om Amriteshwaryai Namah
El mensaje de Swamiji en estos tiempos difíciles de la pandemia #COVID19
Satsang de Sw. Amritaswarupananda Puri, 9 de abril 2020
Mis postraciones a los sagrados pies de loto de Amma y saludos amorosos a los hijos de Amma. Covid19, la infección del virus Corona, ha acabado con la vida de miles de personas en todo el mundo. Abramos nuestros corazones y oremos juntos por la transición pacífica de los fallecidos, por la paz mental de sus familiares y seres queridos, por la pronta recuperación de los infectados por la enfermedad, y por la fortaleza espiritual y autoconfianza del resto de la humanidad. Permitidme también que me incline ante los desinteresados trabajadores de la salud de todo el mundo por su entrega y dedicación en la lucha contra este virus mortal que ha afectado a casi un millón y medio de personas en 211 países de todo el mundo y se ha llevado las preciosas vidas de 82.000 personas hasta ahora.
Parece que esta pandemia no tiene fin. Nuestro mundo está pasando por una fase crítica. Las personas se ven atrapadas por intenso miedo y ansiedad. En todo el mundo la gente probablemente piense de la misma manera: ¿Está llegando este mundo a su fin? ¿Está llamando la muerte a nuestra puerta? ¿Me infectaré? ¿Qué me espera? ¿Perderé mi trabajo? ¿Qué pasa si pierdo todos mis ahorros? Pensamientos terroríficos como estos nos pueden petrificar. Aunque tales temores son comprensibles, no debemos dejarnos vencer por ellos. Debemos avanzar con la máxima precaución, no sólo física, sino también emocional, intelectual y espiritualmente. No debemos permitir los pensamientos autodestructivos que penetran profundamente en nuestra mente. Si lo hacen podemos caer presos en la depresión y la enfermedad mental. Por tanto, preparémonos manteniéndonos en alerta y atentos.
¿Cómo podemos pasar nuestro tiempo durante este confinamiento de una manera productiva y creativa?
Uno: no pensar de manera innecesaria, no permitir que pensamientos insanos y dañinos entren y ocupen la mente. En esta situación, la lógica y el intelecto son menos importantes que la fe. Se debe dar prioridad a la fe, me refiero a la fe en nosotros mismos, la fe en el poder de Dios, fe en la ley de la naturaleza, del universo, fe en las leyes y ordenanzas de nuestro gobierno y administración, y en sus instrucciones. Dos: La ansiedad y el pensamiento que intensifican la atención en el conflicto interno no son respuestas ante cualquier problema. Ellos solo disiparán la fuerza mental que tenéis. Recordad las palabras de Amma de que solo hay dos situaciones en la vida: problemas o situaciones que pueden resolverse y problemas o situaciones que no pueden resolverse. Nadie se preocupa por las situaciones que pueden resolverse y no tiene sentido preocuparse por una situación que no se puede resolver. Avanzad y preocuparos por cualquier otra cosa que no sean estas dos.
Tres: Tratad de ver el Covid19 de acuerdo con la ley de la naturaleza o verlo como un emisario que nos recuerda una de las más importantes lecciones que hemos olvidado. Tal como dice Amma la naturaleza es más poderosa que cualquier fuerza en la tierra, salvo Dios. Si declaramos la guerra contra ella, nuestra derrota está garantizada. Por tanto, postrémonos con reverencia y adoremos ese poder. Aceptemos la derrota y rindámonos a ese poder. Las herramientas que necesitamos practicar son auto-entrega, meditación, recitar el mantra del Guru, recitar los nombres divinos, orar, yoga, comer alimentos sátvicos, etc. Estas prácticas aumentarán nuestra fortaleza mental, autoconfianza y nos darán paz.
Cuatro: considerar este período como una ocasión para pasar tiempo de calidad con la familia, aprendiendo las lecciones de amor genuino y compasión, intentando comprendernos los unos y los otros, los gustos y aversiones. Vista desde esta perspectiva, comprobaremos que esta situación no es una maldición, sino una bendición para volvernos introspectivamente hacia nuestro interior, para evaluar nuestros pensamientos y acciones. Por tanto, para fomentar una mayor conciencia sobre el propósito de la vida, de nuestro entorno, de la naturaleza, de las fuerzas naturales, del poder más allá de los seres humanos y de otros seres. Tal como dice Amma no somos islas aisladas, sino eslabones de una cadena, la cadena universal. Ya seamos conscientes o no, todas nuestras acciones impactan en los demás. Por tanto, generan un cambio en nosotros que es más importante que tratar de hacer que cambien los demás. Una vez cambiemos nosotros, los demás cambiarán automáticamente en nuestra presencia. Recordad siempre esto.
Cinco: aquellos que tengan atracción o talento por lo artístico, la literatura, la lectura o la cocina pueden dedicar estos días a explorar aún más su potencial interno. Los empresarios pueden pensar en ideas innovadoras para mejorar su posición competitiva en sus negocios o incluso ampliar sus habilidades empresariales y extenderlas hacia otros campos. Estos son momentos preciosos para pulir y refinar nuestro talento a través de la práctica constante y la contemplación.
Seis: Por favor, abstenerse de ver películas, telenovelas y programas de televisión que sean violentas o espeluznantes. No involucrarse en videojuegos violentos, no perder el tiempo leyendo libros superficiales de autor desconocido. Ellos no nos ayudan en nada, más bien estimularán solo vuestras emociones. En su lugar, leed textos sagrados, libros de Amma, libros sobre la vida y las enseñanzas de grandes maestros espirituales o libros que fortalezcan vuestra moral, que inspiren y estimulen vuestro potencial interno. También podéis escuchar charlas y participar en debates que mejoren vuestra autoconfianza, que despierten el amor que hay en ti, mantengan la fe y te hagan sentir alegre.
La fe hindú recomienda chaturmasya vrata, un voto que dura cuatro meses, en el que uno se involucra en tapas, en práctica espiritual intensa. Esto lo siguen todos los buscadores espirituales y sannyasis (monjes). Comienza en junio o julio y termina en octubre o noviembre, más o menos. Todos deberíamos considerar este período de bloqueo como nuestro propio ekamasya vrata y dedicar un mes a la práctica espiritual. Ojalá no se convierta en dvimasya vrata, en voto de dos meses, pero realmente no lo sabemos. No tenemos otra elección que la de rendirnos y esperar a ver lo que sucede. Así que esforcémonos para ver este tiempo de confinamiento del Covid19 como una maravillosa oportunidad que la naturaleza ha creado para ayudarnos a enfocarnos en nuestras prácticas espirituales. La vida es, de hecho, tapas. Tapas son necesarias para sumergirse profundamente en cualquier aspecto de la vida.
Sigamos adelante con la fe de que este encierro es algo que nos envía Dios para aprender las más duras realidades de la vida a través de tapas. En lugar de aceptar una única verdad, la verdad sobre la unidad de Dios, los seres humanos han creado divisiones y polarizaciones en nuestro interior y fuera de nosotros. Hemos estado luchando en nombre de las diferencias, la codicia, y los motivos egoístas. Veamos esta oportunidad como un aula en la que Dios nos ha unido a todos en la esperanza de que nosotros, sus hijos, podamos aprender las lecciones de amor, unidad, y servicio desinteresado a través de tapas.
Avancemos en la luz de esta comprensión y no nos sintamos debilitados ni empequeñecidos por el miedo provocado por el virus. Todo lo que comienza debe acabar. La enfermedad del virus Corona también comenzó en alguna parte y algún día debe terminar. ¿Cuándo? No podemos dar una respuesta precisa, solo podemos esperar pacientemente con amor y esperanza, solo podemos rezar y meditar. Esto también pasará. Teniendo esto en cuenta, unámonos mientras damos cautelosamente cada paso por este camino intransitado. Rezo sinceramente a nuestra queridísima Amma para que nos otorgue la necesaria fuerza espiritual, devoción, coraje y confianza en nosotros mismos. Que nos bendiga a todos para que podamos ganar esta batalla contra uno de los más grandes desafíos a los que se ha enfrentado la raza humana.
Om Lokah Samastah Sukhino Bhavantu...
El ABC para lograr paz en tiempos difíciles
Sw. Shubamritananda Puri, 5 de abril de 2020
Mis saludos infinitos a los Pies de Loto de mi amada maestra, Amma, y a todos vosotros, queridas hermanas y hermanos de diferentes partes del mundo, que participáis en esta transmisión por Internet. Rezo para que todos gocéis de la mejor salud física y espiritual, al igual que vuestros allegados y seres queridos. Estoy seguro de que muchos habéis leído o visto el mensaje de Amma dirigido a sus hijos sobre los tiempos difíciles que atraviesa el mundo. Ella ha estado pensando en todos vosotros y haciendo un seguimiento regular de los acontecimientos en diferentes partes del mundo. Recordemos sus palabras: “Necesitamos vivir con esperanza, confianza en nosotros mismos y amor, y no con miedo”.
Me gustaría centrar mi charla hoy en el tema: "El ABC para lograr paz en los tiempos actuales"
He estado hablando en estos días con muchas personas de diferentes partes del mundo por Internet, y el tema recurrente es la pandemia del virus Corona. Una frase muy común que escucho es "No puedo creer que esto esté sucediendo". Recientemente, un joven me dijo: "Siento que lo que estamos pasando es un sueño y alguien me despertará pronto de esta pesadilla". A menudo hay una gran resistencia en nuestras mentes para aceptar el momento presente. Por tanto, una de las primeras cosas que necesitamos desarrollar es la aceptación.
A- La aceptación es una necesidad...
Esta es la A en este abecedario. La oración por la serenidad, que siempre vale la pena contemplar, es especialmente importante en los tiempos actuales.
Dios, concédeme la serenidad para
aceptar las cosas que no puedo cambiar,
el coraje para cambiar las cosas que puedo
y la sabiduría para distinguir la diferencia.
Estoy seguro de que muchos habéis oído hablar de las 5 etapas que atraviesan la mayoría de los seres humanos cuando tienen que afrontar grandes penas o situaciones difíciles: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Incluso con el despertador que suena por la mañana, se pasa por estas fases. Primero hay una negación, es decir, te vuelves hacia el otro lado. Después, hay ira hacia el pobre despertador, como si él estableciera la hora de la alarma. Luego, presionas el botón de la repetición y comienzas a negociar diciendo ... "2 minutos más". Después, cuando el reloj comienza a sonar de nuevo, hay una expresión de frustración y depresión en tu rostro ... y finalmente llega la aceptación de que es hora de despertarse. Más tarde nos sentimos muy aliviados por habernos levantado. De lo contrario, podríamos haber perdido un vuelo o una reunión importante. Cuanto antes se dé la transición hacia la aceptación, mayor será la paz que sentiremos.
Tenemos que aceptar la situación actual, pues no hay otra opción. Esta pandemia es como un karma colectivo que atraviesa todo el mundo. Al igual que no podemos culpar al reloj por la alarma que suena en la mañana, no podemos jugar a echarle la culpa a nadie por la situación en la que nos encontramos. Todos hemos aprendido en física que un cable se calienta cuando presenta resistencia al flujo de la corriente eléctrica. Incluso puede llegar a incendiarse. Sucede lo mismo en cualquier tipo de resistencia en la vida. La vida se calienta por el sufrimiento cuando nos resistimos a las situaciones.
La serenidad llega cuando transformas las expectativas en aceptación.
Por ejemplo: Hay muchos que mantienen sus teléfonos móviles encendidos incluso durante las conferencias. Inicialmente me irritaba mucho, ya que el sonido perturbaba mi concentración. También me di cuenta de que la irritación no acababa ahí. Permitía que se extendiera por un tiempo en mi mente. Empezaba a pensar: “¿Qué tipo de persona es esta? ¿No debería tener la decencia de apagar su teléfono móvil cuando está en una charla? La gente se ha vuelto tan insensible. ¿Hacia dónde va este mundo? Pero luego me dije: “Tú eres el que sufre con esta cadena de pensamientos negativos. Los demás están sentados pacíficamente, no se sienten afectados en absoluto. Es mejor aceptarlo que quejarse”. Ahora, cuando escucho el sonido del teléfono durante una charla, trato de pensar: “Quizás se hayan olvidado de apagarlo. O el teléfono es nuevo y no saben cómo apagarlo. O que ellos son como son". Esta actitud me mantiene en paz en gran medida. Ya se trate de una llamada telefónica irritante, de una pérdida en los negocios, de un despido laboral, de una enfermedad crónica o de una crisis masiva como esta pandemia; la aceptación es la única forma de encontrar estabilidad y de prepararnos para afrontarla de la manera correcta.
El Señor Krishna en la Bhagavad Gita habla sobre la actitud de aceptación como prasada buddhi. Hay un cese de dolor, una tranquilidad mental en el buscador cuando recibe prasad. Esto procede de la aceptación. Amma nos da este hermoso ejemplo: “Cuando recibimos el prasad en un templo, ¿acaso le decimos al sacerdote: "No es lo suficientemente dulce ... o no tiene suficientes anacardos...?" No. Simplemente lo aceptamos con gratitud y amor. Tal actitud debería darse también en todas las situaciones de la vida, ya sean buenas o malas.
La aceptación a veces es malinterpretada como abandono o aceptación de la derrota, o que se coloca el listón demasiado bajo. Pero nunca es así. La aceptación es un signo de fortaleza y no de debilidad. El elemento principal de la aceptación es abrirse a la realidad tal como es, y no cómo nos sentimos respecto a ella. La aceptación es una pausa, un período de dejar fluir, de ver con claridad. Esto permite establecerte en tu interior, lo que te da claridad sobre qué hacer para mejorar la situación, o convertir la situación a tu favor al redirigir tu energía física, emocional y mental para cambiar las cosas que se pueden cambiar a través de tu esfuerzo. La aceptación no significa que no se tenga preferencias. Se puede tener preferencias y por supuesto trabajar para satisfacerlas; pero si no se cumplen, hay que aceptarlo con ecuanimidad.
Aunque la situación externa sea de tal magnitud que no podamos cambiarla mucho a través de nuestros esfuerzos, seguramente podamos moldearnos y elegir cómo queremos afrontar esa experiencia. Por tanto, la aceptación siempre es una actitud beneficiosa en todos los sentidos.
La aceptación siempre se da en el momento presente. Aunque no soportes lo que está sucediendo, haz del momento presente tu amigo y aliado, no tu enemigo. Esto transformará milagrosamente toda tu vida. Aceptar también significa incluir o dejar espacio a la parte de nosotros que grita "no" a la situación. De esa manera, aceptamos la situación y también el rechazo a la misma. En la serenidad que surge de la aceptación, toda perturbación se calma y la mente se vuelve más silenciosa. Tal mente puede pensar de manera eficaz en las acciones correctas a realizar para transformar la situación a nuestro favor. Nos ayuda a convertirnos en la persona que hemos elegido ser en esas situaciones.
Estoy seguro de que muchos habéis oído hablar del Dr. Victor Frankl, un neurólogo y psiquiatra austriaco muy famoso, y uno de los héroes que sobrevivió a los campos de concentración nazis. Escribió un hermoso libro titulado ‘El hombre en busca de sentido'. Mientras veía personas morir a su alrededor, incluidos sus seres queridos y parientes, y él mismo era sometido a toda clase de torturas, se dijo a sí mismo: "Podrán controlar mi libertad externa, pero no pueden tocar mi libertad interna". Depende de mí totalmente el permanecer en paz o angustiarme". Estas son las palabras que salen de la boca de alguien que ha desarrollado aceptación y posee un claro dominio de sí mismo.
Cuando le preguntas a Amma, "¿Qué es la entrega?" Ella dice, la entrega significa aceptación. Es la aceptación de los pares opuestos de la vida (éxito y fracaso, alegría y tristeza, placer y dolor) como complementarios, sin ningún tipo de rechazo o protesta".
En la biografía de Amma, vemos cómo Amma aceptó todos los desafíos que se le presentaron. Amma no se quejó al Universo sobre el porqué la ponían a prueba de aquella manera. Hubo muchos detractores en los primeros días, que hicieron todo lo posible para detener la misión de Amma. Muchos de ellos ahora se han convertido en ardientes devotos. Cuando se le pregunta a Amma sobre cómo ve esta transformación, dice: “En aquellos días ellos tiraban piedras; ahora tiran flores". La aceptación de Amma no posee ningún tipo de juicio valorativo.
Por tanto, hay que aceptar lo que es, dejar ir lo que fue y tener fe en lo que será. La aceptación es el camino hacia la paz.
Consejo práctico: Realizad una introspección y observad las cosas a las que vuestra mente se está resistiendo en estos días. Anotadlas en vuestro diario personal y fijaros en cada una de ellas. Notad las emociones que surgen en vuestro interior cuando uno se resiste. A continuación, tratad de ver algo bueno en lo que estáis resistiendo, y lentamente comenzad a aceptarlo. Por ejemplo, si te parece aburrida mi charla..., lo bueno es que te das cuenta de que tu audición es correcta. Si estás cansado con todo el lavado de manos que estás haciendo actualmente..., eso también significa que tienes acceso al agua corriente. Observad las emociones que os surgen cuando llegáis a la aceptación. La felicidad que proviene de la aceptación es algo que se puede notar de manera muy tangible.
B. Ser flexible a los cambios.
Esta situación en la que nos encontramos exige algunos cambios que tienen que darse en nuestro estilo de vida y en nuestras actitudes. No seamos rígidos con nuestros gustos y aversiones y tratemos de ser flexibles.
¿Habéis visto cómo se doblan los cuerpos de los niños pequeños? Son totalmente flexibles. Son capaces de colocar sus piernas alrededor del cuello y chuparse el dedo gordo del pie. No tienen problema en hacerlo. A medida que se envejece, el cuerpo se pone cada vez más rígido y si se prueba cuando se tiene más de 40 años a hacer la postura que el niño adopta fácilmente, se necesitará una ambulancia para que el médico restablezca la postura inicial. ¿Habéis observado el cuerpo de una persona cuando muere? Está totalmente rígido. Es difícil enderezar las manos y las piernas si están dobladas. La flexibilidad es la compañera de la vida y la rigidez es la compañera de la muerte.
Nosotros, los indios, somos muy buenos en flexibilidad, al menos en nuestro movimiento lateral de cabeza. A veces es muy confuso para los occidentales. No pueden entender si es "sí" o "no" y, en realidad, pueden ser ambos.
No seamos tan rígidos en la vida, ya que esa rigidez nos alejará totalmente de la verdadera alegría. Si podemos seguir el flujo de la vida, veremos que no hay nada más alegre que eso. Pero la flexibilidad no es solo externa, sino también interna. Una mentalidad flexible es una mentalidad relajada y una mentalidad rígida es lo contrario.
Recuerdo un incidente que sucedió después del tsunami. Fue sorprendente ver la forma en que Amma dirigió todas las operaciones de rescate y socorro. El campus universitario, al otro lado de los remansos de Amritapuri, se convirtió en un campo de ayuda pocas horas después de producirse el tsunami. Miles de personas fueron llevadas allí fuera de peligro. Cuando llegaron al campus, se les facilitó un conjunto de ropa, comida caliente, artículos de aseo y una esterilla para dormir. Amma se aseguró de que todas sus necesidades estuvieran cubiertas desde el momento de su llegada al campus. Esa noche, yo estaba ayudando en el campus con el servicio de té. Una persona probó el té que le ofrecí e hizo una mueca extraña después de beber un poco. Le pregunté si había algún problema. Me contestó: "No tiene suficiente azúcar". Le dije: "¿Te das cuenta de lo afortunado que eres por haber sobrevivido a un gran desastre natural como el tsunami? Se ha organizado todo esto para ti en unas pocas horas. ¿No crees que también podrías ser un poco más flexible por tu parte?". Así es como nuestros gustos y aversiones nos gobiernan.
Apenas ha habido situaciones como esta, en la que los seres humanos tengan que estar confinados en sus hogares sin apenas poder salir a ningún lado. Sé que esto no es fácil para muchos. Es un buen momento para practicar la paciencia y la flexibilidad. Muchos se han convertido en karma-rogis; es decir, se ven afectados por la enfermedad de la acción o karma. Es posible que uno no tenga que hacer algo, pero aun así la mente inquieta lo empuja a la acción. El verdadero dominio sobre la mente también consiste en la capacidad de permanecer quieto y silencioso cuando sea necesario. Hasta ahora, nuestros padres y profesores siempre nos han dicho: "No permanezcáis sentados, haced algo". La vida ahora nos dice: "No hagas nada, permanece sentado". Unas palabras de Blaise Pascal, el filósofo francés, me vienen a la mente: "Todos los problemas de la humanidad se derivan de la incapacidad del ser humano para permanecer sentado, en silencio y solo, en una habitación". A medida que aumenta la flexibilidad, comprobaréis que la mente no reacciona tanto a los cambios externos que ocurren a vuestro alrededor. Se vuelve más pacífica y dichosa.
Consejo práctico:
Flexibilidad mental: ir desde el confinamiento a la apertura mental.
Una mente bajo el estado de confinamiento:
Estoy atrapado en casa.
Una persona de mente abierta:
Estoy a salvo en casa.
Estoy pasando más tiempo con mi familia.
Estoy teniendo mi retiro privado.
Una mente bajo el estado de confinamiento:
Me quedaré sin los artículos necesarios. No puedo comprar nada nuevo.
Una persona de mente abierta:
Tengo lo suficiente en casa. Puedo usar las cosas sabiamente.
Puedo reducir los desechos, reciclar, reutilizar.
Una mente bajo el estado de confinamiento:
Todo se está cerrando. Siento pánico.
Una persona de mente abierta:
Los lugares más importantes como la tienda de comestibles y las instalaciones médicas siguen abiertas.
Todavía puedo seguir mis estudios a distancia. No estoy perdiendo mis clases.
Una mente bajo el estado de confinamiento:
Hay demasiada inseguridad. Me siento ansioso e inseguro.
Una persona de mente abierta:
Si bien no puedo controlar la situación, puedo controlar mis acciones manteniéndome a salvo, lavándome las manos regularmente, tomando todas las precauciones y quedándome en casa.
Puedo mantenerme saludable practicando mindfulness, haciendo ejercicio todos los días, tomando alimentos nutritivos y durmiendo bien. También haré todo lo que me haga feliz mientras estoy en casa.
C - Convertir los desafíos en oportunidades
Actualmente, puedes encontrar personas que están al límite debido al miedo y la ansiedad, y pasarán su tiempo culpando a situaciones, países, gobiernos, sistemas de salud, trabajadores de la salud, etc. Por otro lado, también puedes encontrar bastantes héroes que han surgido en estas semanas y que han encontrado formas de transmitir la felicidad a otros seres y, en el proceso, seguramente se han sentido ellos mismos más felices. Los desafíos en la vida pueden ayudarnos a mejorar o que nos sintamos amargados. Recuerda siempre que no eres una víctima a menos que decidas serlo. Todo depende de cómo tratemos los desafíos. Necesitamos buscar formas de aprovechar al máximo estos desafíos para crecer en sabiduría y paz. Para esto necesitamos enfocarnos en un objetivo más elevado. De ese modo, ningún desafío nos causará un estado de bloqueo.
Un hermoso ejemplo de esto es una de las residentes en Amritapuri llamada Andrea, originaria de Alemania. Amma le ha dado el nombre de Purnima. Ella va en silla de ruedas desde hace muchos años. Pero su enfoque en Amma y su voluntad de servir es increíble. Ella nunca permite que su discapacidad le impida hacer lo que le gusta, que es servir a los demás. Purnima viaja a todos los lugares a los que va Amma, en India y en el extranjero. Durante los programas, puedes encontrarla distribuyendo números para el abrazo (darshan) en su silla de ruedas. En Amritapuri, a veces ayuda en el hospital distribuyendo las tarjetas de los pacientes. A veces puedes encontrar su silla de ruedas cargando un montón de ropa de los visitantes, desde el área de lavado hasta el área de secado. Si la observamos desde un punto de vista externo, parece que esté en un estado de bloqueo permanente. Pero su amor por Amma y el objetivo de servirla la han convertido en una persona muy feliz y libre.
Por tanto, durante estos meses de aislamiento, cada vez que tu mente se deprima, reflexiona y dile a tu mente que nada te va a decepcionar. “Transformaré esta situación en un verdadero suelo fértil para mi crecimiento”. Mantén un objetivo más alto como algo primordial. Podría ser centrarse más en la práctica espiritual. O podrías expandir felicidad a tu manera. Si eres músico, toca música on-line y haz feliz a la gente. Si eres agricultor, enseña on-line a algunos jóvenes los conceptos básicos de la agricultura. Si eres chef, da clases de cocina on-line... hay mucho que se puede hacer para difundir la alegría. Y así, en ningún momento os sentiréis atrapados en la ansiedad ni en el aburrimiento.
Consejo práctico: Me gustaría expresar el aspecto práctico de esta enseñanza con un incidente que me ocurrió hace unos años. Estuve en Estambul para dar unas charlas. En el camino de regreso, llegué al aeropuerto unas horas antes de mi vuelo. Después de facturar el equipaje, vi una línea que rodeaba el área del aeropuerto. Pensé: "Esto es extraño. ¿Están vendiendo entradas para la Copa Mundial de fútbol en el aeropuerto? Descubrí que era la fila para pasar el control de seguridad. El área de control de seguridad ni siquiera era visible. La fila se extendía hasta llegar a la puerta del aeropuerto. De pie allí, al principio me sentí un poco impaciente y ansioso, y comencé a culpar a las autoridades del aeropuerto por no ampliar el aeropuerto lo suficiente. (Ahora ya cuentan con un nuevo y amplísimo aeropuerto).
Afortunadamente, me di cuenta de mi estado mental. Pensé para mis adentros: "Esto es algo que tengo que afrontar. No hay forma de avanzar, y la mayoría de las personas que se encuentran delante también tienen vuelos que tomar, algunos incluso antes que yo. Voy a tratar de aprovechar al máximo esta oportunidad. Voy a fijarme el reto de recitar los 1000 nombres de la divinidad y completarlos antes de llegar al control de seguridad". A partir de ese momento, no sentí la espera tan agotadora. Ni siquiera me di cuenta de que la línea de espera se movía. Me acercaba a la zona de control y todavía no había terminado el recitado. Incluso quería que la persona que iba delante se tomara un poco más de tiempo para que pudiera alcanzar el objetivo que me había propuesto. Sentí una gran felicidad cuando terminé de recitar coincidiendo exactamente con la llegada de mi turno.
Conozco a un amigo que se ha propuesto escribir 21.000 mantras (1.000 mantras por día), en este período de confinamiento de 21 días que hay en India. Quiere traer los cuadernos escritos y ofrecérselos a Amma cuando la vea la próxima vez. Todos podemos mantenernos enfocados proponiéndonos objetivos interesantes en este período de autoaislamiento, algo que nos mantenga inspirados.
Así, queridas hermanas y hermanos, afrontemos estos tiempos con aceptación, flexibilidad y convirtamos estos desafíos en oportunidades. Profundicemos interiormente y establezcamos sólidos cimientos en nuestra vida. Aunque los mercados bursátiles estén fluctuando bastante, este es un buen momento para la inversión espiritual.
Mientras atravesamos estos tiempos difíciles, pidamos a Amma por la paz de las almas que han partido, y por sus seres queridos. Para que encuentren la fuerza mental para hacer frente a esta gran tragedia personal. Oremos por los cientos de miles que están afectados por el virus y están hospitalizados o en autoaislamiento. Oremos por la seguridad física y la fortaleza mental de todos los médicos, enfermeras, personal sanitario, farmacéuticos, trabajadores sociales, policías y todos aquellos que están trabajando de forma desinteresada e ininterrumpida para mantenernos a salvo.
Permitidme terminar con una cita de Amma: “Encendamos la lámpara del amor y la fe en nuestro corazón y avancemos. Tal vez te preguntes: ‘¿Cómo podrá eliminarse esta densa oscuridad encendiendo solo mi pequeña lámpara?’ Si cada uno de nosotros enciende su lámpara interior, la intensidad de la luz se multiplicará y toda la oscuridad podrá ser vencida".
Om Lokah Samastah Sukhino Bhavantu...
PASADO
Enseñanzas de Amma, compartidas por Ânand
PASADO
Pregunta:
Amada Madre:
-En uno de Tus Satsangs, nos dijiste que el ser humano toma de la naturaleza 3 veces más de lo que necesita.
-A consecuencia de este hecho, es posible que el planeta se queje?
-Son el terremoto de Gujarat del año 2.001, y el tsunami del pasado día 26 de diciembre quejas de la Madre Tierra?
-Estas quejas son consecuencia del karma de la población y las zonas donde se han producido estas desgracias? O
-Son consecuencia del abuso que hacemos de la naturaleza?
-Si es a consecuencia del abuso que hacemos. No se produce éste en la sociedad occidental?
-Y si es así el efecto kármico no debería producirse en los países occidentales?
-Son dudas de mi mente Madre, perdóname mi ignorancia?
-Podrías a través de Tu palabra, Madre, dar luz a este tema kármico?
-Madre: Que podemos hacer para paliar las dificultades que nos has anunciado para este año 2.005?
Tu hijo
Ânand
AMMA: Es verdad que tomamos de la Naturaleza tres veces más de lo que necesitamos, talamos muchos árboles, construimos pozos, presas, quitamos piedras de las montañas, extraemos minerales y combustibles, que son los que mueven la industria y procesos de construcción; y todo esto es un abuso que va en aumento. La población aumenta sin cesar, y para poder alimentar a esta población, hacemos esto.
Para poder saciar el hambre de la población, en la agricultura utilizamos fertilizantes, y químicos para su crecimiento, y los cultivos que normalmente tomaban 6 meses para formarse, ahora toman solo 3 meses. Tenemos vegetales más grandes, pero con menos sabor. Ahora podemos cosechar frutos fuera de temporada.
El problema principal está en el aumento de la población, el aumento de la población es la causa de todos estos problemas, pero donde se cortan los árboles, para luego construir casas o fábricas, se corta la vida, por la falta de oxígeno que representa la desaparición de los árboles, que además desaparecen también por incendios. Los rayos solares caen sobre la tierra, y los árboles ayudan a que no repercutan los efectos dañinos de los rayos ultravioleta, los rayos ultravioleta producen cáncer de piel, pero si los cortamos, desequilibramos la armonía de la naturaleza, por eso ocurren los terremotos.
La calidad de la vida de la gente va decreciendo. Por ejemplo cuando AMMA era niña, cuando vacunaban a los niños, con polvos talco se curaba la herida, y ahora se necesitan los mismos polvos, pero incrementado con otros químicos, para curar la herida. Recurrimos en todo, más a los químicos y menos a lo natural.
En el pasado el hombre tenía unas expectativas de vida de 120 años, ahora de 80 años. No había medicinas para controlar las epidemias; hoy, hay medicinas, pero aparecen nuevas enfermedades. No se han encontrado soluciones para enfermedades como la diabetes, presión sanguínea, etc. Abusamos de los calmantes, analgésicos, cuyos efectos secundarios, nos producen acidez de estómago, generan problemas en las articulaciones, especialmente en los pies, y pueden provocar que los capilares se rompan, y otros que no conocemos los efectos de manera inmediata, pero si los conoceremos a 5 años vista, soluciones para hoy y problemas para mañana, es la consecuencia de tomar fármacos químicos. Medicinas.
AMMA no está en contra de usar calmantes, pero hay que estar muy atento.
Antes, incluso el estiércol de las vacas era benigno y provechoso, pero no hoy en día por la cantidad de químicos que contiene el alimento que comen las vacas. Antes recurrían al estiércol de la vaca, para curar vacunas, pero hoy las infectan.
Las diferentes alteraciones que le hacemos al medio ambiente, han generado diferentes enfermedades en el planeta. Ahora la ciencia es capaz de hacer trasplantes de órganos, pero aparecen nuevas enfermedades. Sida, cáncer, hipertensión, ... enfermedades que no tienen cura, a consecuencia del abuso de químicos y farmacéuticos.
El Srimad Bhagavatam, nos da un cuadro del Kali Yuga: el hombre cortará árboles, y construirá casas, almacenes, y negocios, en su lugar. Los Templos perderán su samskara, su razón primordial, y también se convertirán en negocios, y esto se ha convertido en realidad hoy. Lo que ocurre ya lo predijeron los sabios-rishis.
Como consecuencia hemos perdido el sentido del dharma. Lo que prevalece ahora en el Kali Yuga es el adharma, no hay seres virtuosos, prevalece el egoísmo, incluso en las familias. Una familia con 3 componentes, no es una familia, sino 3 islas aisladas la una de la otra, y en donde cada uno desea coger, poseer, lo máximo posible.
En el Kali Yuga, el padre comerá a su hijo, y el hijo comerá a su padre. Bhagavatam.
La fe en DIOS, indica permanecer en el dharma, en vivir de una forma recta.
Las señales de tráfico nos ayudan a andar bien, a respetar al otro, para circular sin accidentes. El vivir correctamente es dhármico.
El Sanatana Dharma -hinduismo- , nos dice que todos somos eslabones de la misma cadena.
La buena disposición para dar, es necesaria.
No hay que culpar a nadie, a ninguna nación en particular, ni a ninguna persona. Tenemos que compartir, porque lo que pasa en un lugar corresponde a todo el mundo. Es un karma colectivo
No es justo acusar al mundo occidental de las calamidades que están ocurriendo, cada nación tiene su papel. AMMA se sorprende que una persona occidental, culpe al mundo occidental.
RESUMEN
Más que una pregunta es un planteamiento que le hizo Ânand a Amma en Amritapuri, en el mes de enero del año 2005, concretamente un día después de la festividad de Reyes.
En mis apuntes de aquella fecha tengo anotado lo siguiente:
Esta pregunta apareció en mi mente con la concepción clara, pero sin forma, meditando la mañana del jueves día 6 de enero, y cuando terminé la meditación, cogí el boli, y enseguida salió la batería de preguntas, por lo que me imaginé que era la Madre quien la ponía en mi mente, y me dije, bueno tocaré teclas y según como suenen actuaré.
Toqué algunas teclas, el tema fluyó de manera armónica y tuve la traducción al malayalam, en poco tiempo, y se la entregué a la persona que se cuidaba de las preguntas de satsang de Amma.
Cuando llegó Amma al día siguiente a la hora del satsang, fue la pregunta que eligió entre todas las que había.
La leyó y la comentó con el que era entonces br. Shubamrita, ahora swami Shubamritananda Puri. Amma me llamó y no tuve más que levantarme y ponerme a su lado, pues estaba justo detrás Suyo, haciendo el seva de hot water, y estuve todo el largo tiempo que duró Su respuesta, ocupó todo el satsang, no atendió ninguna pregunta más, de pie a Su lado, con las manos juntas, y me dirigió 4 ó 5 miradas indescifrables para mí, pero ninguna de enfado, y cuando ya estaba sentado, porque era el tiempo que traducía br. Shubamrita, me miró con comprensión, con compasión, con amor, diciéndome a través de estas miradas: o.k. Todo está bien.
Aunque en su respuesta dijo: Amma se sorprende que una persona occidental, culpe al mundo occidental, y también dijo: Amma sólo trata de explicar la ley kármica, en caso de que Amma esté equivocada, por favor perdónenla.
Estamos hablando de un mensaje de hace más de 15 años, aunque Amma ya viene avisando desde que entré en contacto con ella, y esto ocurrió hace más de 22 años.
Y me imagino que nos viene advirtiendo Amma desde más atrás todavía:
“Es verdad que tomamos de la Naturaleza 3 veces más de lo que necesitamos”.
“Talamos muchos árboles, quitamos piedras de las montañas, extraemos minerales y combustibles, y todo esto es un abuso que va en aumento”.
“La población aumenta sin cesar, y para poder alimentar a esta población hacemos esto”.
“Tenemos vegetales más grandes, pero con menos sabor, ahora podemos cosechar frutos fuera de temporada”.
“El problema principal está en el aumento de la población”.
“Donde se cortan árboles, se corta la vida, por la falta de oxígeno que representa la desaparición de los árboles, que además desaparecen por los incendios”.
“Si cortamos los árboles, desequilibramos la armonía de la Naturaleza”.
“La calidad de la vida de la gente va desapareciendo”.
“En el pasado el hombre tenía unas expectativas de vida de 120 años, ahora de 80 años”.
“No había medicinas para controlar las epidemias, hoy hay medicinas, pero aparecen nuevas enfermedades”.
La gente de mi generación nos damos cuenta de lo que Amma nos está recordando durante los últimos 25 años, pues nos es muy fácil tener presente de la manera como vivíamos hace 70 años...
...y como en nombre del progreso se han ido cometiendo todos estos abusos, que finalmente han roto la armonía en el planeta.
Vivía en un barrio de unos 4.000 habitantes, a dos kilómetros de una ciudad de 35.000 habitantes. Era un pueblo mayoritariamente agricultor, hasta que empezaron a aparecer las fábricas en la zona, la gente se ganaba la vida básicamente en la agricultura, y todo lo que dimanaba o generaba la agricultura: albañiles, carpinteros, mecánicos,...
La agricultura se atendía con mulas o caballos, que arrastraban los arados, y otros aperos, y también hacían el servicio de arrastrar los carros o carretas que se utilizaban como medios de transporte para los productos agrícolas y para las personas.
Era una época en la que se vivía más despacio, se podía ver el tiempo, se podían ver las horas de un día.
Todavía me acuerdo de la 1ª bicicleta que apareció en el pueblo. La bicicleta permitía poca carga, pero los desplazamientos podían ser más rápidos.
La gente hacía vida familiar, no había televisores, ni aire acondicionado, ni siquiera ventiladores.
En el verano salía la gente después de cenar a la calle a tomar el fresco, y se compartía entre vecinos lo acontecido durante el día.
La comida era muy esencial, los productos tal como venían del campo, y los huevos que daban las gallinas que casi todo el mundo tenía en casa, y que las alimentábamos con verduras y maíz.
Comíamos también carne de los animales que se alimentaban de los alimentos que cultivaban los payeses, y cuya carne nos servía de alimento todo el año, la ponían en conserva en aceite, o la secaban.
Se amasaba la harina para hacer pan una vez a la semana, y toda la semana se comía del mismo pan, que se guardaba en un armario exprofeso para ello de madera.
Estamos hablando de hace 70 años, un tiempo en el que había todavía una relación muy poderosa y positiva del ser humano con la Naturaleza.
Pero hace 15 años, Amma ya nos decía:
“Las diferentes alteraciones que le hacemos al medio ambiente han generado diferentes enfermedades en el planeta”.
“El Srimad Bhagavatam nos da un cuadro del Kali Yuga: el hombre cortará árboles, y construirá casas, almacenes y negocios en su lugar”
“Los Templos perderán su samskara, su razón principal y también se convertirán en negocios, y esto es lo que está pasando en realidad hoy. Lo predijeron los sabios/rishis”.
“Hemos perdido el sentido del dharma”.
“Lo que prevalece ahora en el Kali Yuga, es el adharma”.
“No hay seres virtuosos, prevalece el egoísmo, incluso en las familias”.
“La fe en Dios indica permanecer en el dharma, en vivir de una forma recta”.
“El vivir correctamente es lo dhármico”.
“En el Sanatana Dharmna, se nos dice: que todos somos eslabones de la misma cadena”.
“La buena disposición para dar, es necesaria”.
“No hay que culpar a nadie, a ninguna nación en particular, ni a ninguna persona”.
“Lo que pasa en un lugar corresponde a todo el mundo, es un karma colectivo”.
“No es justo acusar al mundo occidental de las calamidades que están ocurriendo, cada nación tiene su papel”.
“Amma se sorprende que una persona occidental, culpe al mundo occidental”.
Tal como lo vivo, es como lo expreso: Dios ha creado el Universo en el que está incluído el planeta tierra, y lo ha creado con unas leyes que son por las que el Universo se rige.
Dios es armonía, y ha dotado a Su Creación de esta armonía, una armonía perfecta.
Mientras nadie la manipula, la armonía reina por doquier.
Cuando alguien decide con sus actos romper esta armonía entran en acción las leyes cósmicas que gobiernan el Universo, para restablecer esta armonía.
Como nos dice Amma, estamos tomando de la Naturaleza 3 veces más de lo que necesitamos, y esto durante años y años. Lo tomamos como si nos perteneciera, sin ningún respeto, como si fuera una fuente inagotable de recursos. Como si fuera una fábrica que puede producir cantidades ilimitadas.
Esta es nuestra naturaleza, la naturaleza del ser humano.
Y la Naturaleza que es la paciencia infinita de Dios, nos envía avisos diciéndonos: ¡Cuidado que no es por ahí, rectificad por favor!
Pero nosotros en nuestra ignorancia, continuamos con nuestras agresiones, con lo que cada vez los avisos son más significativos.
Las leyes cósmicas necesariamente actúan, para sacarse de encima a un colectivo insistentemente perturbador. Y estas sacudidas no tienen otro objetivo que restablecer la armonía. Restablecer la armonía para que podamos vivir mejor.
En estos momentos parece que el corona virus sea el fin del mundo, pero Amma dice que no lo es, que el corona virus pasará.
El ser humano vive esta pandemia como una catástrofe, y lo vive así por la impotencia ante lo desconocido, es algo que no conoce y para lo que no tiene ninguna solución válida.
Y además pensando en que es lo que ocurrirá después que el corona virus se haya ido, o se haya retirado temporalmente.
A los gobernantes les preocupa la economía.
¿Qué va a ocurrir aquí? Esto se hundirá.
Ya aseguran que esta crisis es peor que la del año 2008, a nivel económico, esto hace dos semanas, pero hace una semana ya se opinaba que esta crisis es peor que la de la segunda guerra mundial, y ahora ya se dice que mucho peor, que será una crisis como del 1929, en la que el mundo tardó 25 años en recuperarse económicamente.
Sea lo que sea, lo que vivimos como algo que a posteriori va a condicionar nuestras vidas a peor, desde la insignificancia de pequeños átomos que somos dentro del Universo, debemos apoyarnos en la fe en Dios, y tener todo el coraje que nos permita aceptar que lo que venga va a ser mucho mejor para el ser humano.
Reflexionemos para hacer los cambios que la vida nos pida a cada uno, sin poner resistencia.
OM NAMAH SHIVAYA